La maestra Riveros inicialmente no prestaba atención a Facundo Moreno, un estudiante con una situación familiar difícil, pero al revisar su historial escolar se dio cuenta de su potencial. Ella comenzó a brindarle más apoyo a Facundo y, con el tiempo, él se convirtió en uno de sus mejores estudiantes. Años más tarde, Facundo se recibió de médico y le escribió varias cartas a la maestra Riveros para agradecerle por haber creído en él.