El enfoque comunicativo en la enseñanza de la lengua
1. ENAZ Lic. En Educación Primaria
Miriam Torres García 1º I
Si de lo que se trata es de trabajar en el aula por la mejora de las
capacidades de uso comprensivo y expresivo de los aprendices, por
la adquisición de normas, destrezas y estrategias asociadas a la
producción y recepción de textos orales, escritos e iconoverbales en
situaciones diversas de comunicación,
Cada programa o currículo de Lengua y Literatura responde siempre
—como en cualquier otra área— a la concepción que mantenga el
planificador sobre su enseñanza y al conocimiento —o las opciones
de escuela— sobre las ciencias del lenguaje y el aprendizaje.
Nuestros objetivos son que los alumnos sean capaces de:
-producir mensajes válidos según la situación o contexto en que se
dan
-decodificarlos e interpretarlos: construcción de significación
Es decir, que desarrolle su competencia comunicativa.
Esto implica un trabajo de relación entre contexto y saberes: el
primero referido a la interacción social y al uso de las prácticas
discursivas y el segundo a los procesos cognitivos de adquisición y
desarrollo del lenguaje y a los métodos de comprensión y
producción.
El segundo nivel de la planificación, aquel en que se contempla de
modo más próximo la práctica cotidiana al elaborar las lecciones o
unidades didácticas y al prever el tipo concreto de actividades y los
materiales específicos que se van a utilizar.
Para Chomsky, lo innato remite a un conjunto de principios capaces
de guiar la construcción de una gramática. Queda sin embargo por
definir la propia gramática. Chomsky es explícito: «Toda gramática
es una teoría relativa a una lengua particular, que especifica las
propiedades formales y semánticas de un conjunto infinito de
oraciones»
2. Chomsky plantea dos aspectos decisivos para la configuración de la
psicolingüística. De una parte, su creencia en la existencia de una
gramática universal, entendida como el sistema de principios,
condiciones y reglas que son elementos o propiedades comunes a
todas las lenguas humanas, no sólo por accidente, sino por
necesidad biológica, no lógica. De la otra, su afirmación sobre el
lenguaje como un «órgano mental» especial, es decir, que se
construye gracias a propiedades innatas de la mente humana.
Tanto la lingüística como la psicología retomaron perspectivas
olvidadas y desarrollaron una nueva concepción del lenguaje. Éste
se encaró como comunicación antes que como representación, de
forma que la adquisición del habla remitía al aprendizaje de su uso
para regular y controlar los intercambios sociales. No se trataba de
reeditar el conductismo.
esta perspectiva estudió la aparición del lenguaje y, en concreto, el
paso de las actividades prelingüísticas a las actividades lingüísticas.
En este sentido, el modelo de los actos de habla fue probablemente
la piedra de toque que permitió verificar una cierta continuidad
entre los dos tipos de actividad, de modo que se entendió que los
niños y las niñas construían las condiciones de felicidad para requerir,
controlar la atención, etc., y, progresivamente, utilizaban
procedimientos cada vez más complejos y más culturales, de los
cuales el más potente era el lenguaje.
Bibliografía
Lomas, C. (1993). El enfoque comunicativo de la enseñanza de la lengua. Barcelona: Paídos.
3. En este artículo hemos repasado someramente algunas de las ideas
rectoras de la psicolingüística evolutiva y hemos intentado mostrar su
influencia en algunas propuestas didácticas sobre la enseñanza de la
lengua. Ciertamente, la historia de la didáctica de la lengua no es paralela
a aquello que hemos descrito en este ensayo. Por el contrario, propuestas
que hoy surgen desde el campo de la psicología tienen una larga
tradición en la enseñanza de la lengua como son, por ejemplo, la retórica
y la estilística y, a la vez, propuestas que difícilmente se pueden asumir
para explicar el habla infantil continúan vigentes. Para concluir,
únicamente nos interesa resaltar dos aspectos.
En primer lugar, queremos resaltar que cualquier propuesta didáctica sobre
la lengua comporta, en sí misma, una concepción sobre el lenguaje que,
de una u otra forma, se explícita en la propia propuesta. En este sentido,
creemos de interés que, en el ámbito de la didáctica de la lengua, se
reflexione sobre aquello que se quiere enseñar porque, de otra forma,
difícilmente se pueden explicitar objetivos y seleccionar contenidos.
En segundo lugar, queremos mostrar que la psicología no es prescriptiva
para el proceso de enseñanza-aprendizaje. En concreto, en relación con
la enseñanza de la lengua, la psicolingüística evolutiva puede aportar
determinados conocimientos sobre el proceso de adquisición del lenguaje,
pero, en ningún caso, puede prescribir los contenidos concretos a enseñar
o el momento de hacerlo. Ambas cosas responden a investigaciones
didácticas concretas que, sin duda, han de tener en cuenta los aspectos
psicolingüísticos implicados, pero que no pueden sustituir a los
conocimientos didácticos.