2. Definición:
• Número de pulsaciones de una arteria periférica por minuto
Ritmo del pulso: Regularidad o irregularidad de los intervalos entre
pulsaciones.
Adulto: 72 - 78 ppm
Infante: 110 - 150 ppm
3. Fundamento científico:
Es resultado de la contracción del ventrículo izquierdo y la consiguiente
expulsión de un volumen de sangre hacia la aorta central, fenómeno que
da lugar a la transmisión de la onda pulsátil hacia todas las arterias
periféricas.
4. La velocidad del pulso (latidos por minuto) corresponde a la frecuencia
cardiaca, la cual varía con lo siguiente:
Edad: el pulso sufre variaciones desde el momento del nacimiento hasta la
madurez y la senectud.
Sexo: después de la pubertad el pulso es más lento en el hombre que en la
mujer.
5. Fiebre: aumenta el pulso por la vasodilatación periférica secundaria al
ascenso de la temperatura.
Ejercicio físico: la velocidad del pulso aumenta con la actividad física. En los
atletas en reposo la frecuencia aparece disminuida (bradicardia) debido al
gran tamaño y fuerza del corazón; mantienen normalmente un estado de
bradicardia.
6. Medicamentos: Pueden afectar el pulso; algunos lo aumentan y otros lo
disminuyen.
Hemorragias: la pérdida de sangre mayor de 500 ml aumenta el pulso.
Estado emocional: las emociones como el miedo, la ansiedad y el dolor
pueden estimular el sistema simpático aumentando la actividad cardiaca.
7. Puntos anatómicos para
palpación del pulso:
1. Pulso temporal: Se palpa sobre el hueso temporal en la región externa de la frente, en
un trayecto que va desde la ceja hasta el cuero cabelludo.
2. Pulso carotídeo: Encontrado en la parte lateral del cuello entre la tráquea y el músculo
esternocleidomastoideo.
3. Pulso braquial: se palpa en la cara interna del músculo bíceps o en la zona media del
espacio antecubital.
8. 4. Pulso radial: se palpa realizando presión suave sobre la arteria radial en la zona media
de la cara interna de la muñeca. “Método clínico más usado”.
5. Pulso femoral: se palpa la arteria femoral localizada debajo del ligamento inguinal.
6. Pulso poplíteo: se palpa realizando presión fuerte sobre la arteria poplítea, por detrás
de la rodilla, en la fosa poplítea.
7. Pulso tibial posterior: se palpa la arteria tibial localizada por detrás del maléolo interno.
8. Pulso pedio: se palpa la arteria dorsal del pie sobre los huesos de la parte alta del dorso
del pie.
9. Recomendaciones para
valoración del pulso:
1. Manos limpias, secas y en lo posible tibias.
2. Para toma del dato en condiciones basales ponga en reposo al paciente unos 10 15 minutos antes de controlar el pulso.
3. Verificar si el paciente ha recibido medicamentos que afectan la FC.
4. Evitar usar el dedo pulgar, porque el latido de este dedo es muy fuerte y se pueden
confundir los pulsos del paciente y del examinador.
10. 5. No controlar el pulso en sitios que presenten dolor, heridas, hemorragias o fístulas
arteriovenosas.
6. Comprimir suavemente la arteria para no hacer desaparecer totalmente el pulso.
7. El pulso cardiaco apical y los tonos cardiacos, se valoran mediante auscultación con
el fonendoscopio en el adulto y con palpación en niño.
8. Palpar cada pulso en forma individual, evaluar características y en forma
simultánea; para detectar cambios en la sincronización y amplitud. Comparar
pulsos de las extremidades del mismo lado y del contralateral con el fin de detectar
variaciones.
11. Características del pulso:
• Frecuencia: Número de ondas percibidas en un minuto.
• Ritmo: Período armónico de latidos cardíacos regulares.
La irregularidad está asociada con trastornos del ritmo como fibrilación auricular. El
pulso regular con pausas (latidos omitidos) o los latidos adicionales reflejan
contracciones ventriculares o auriculares prematuras.
12. • Volumen o amplitud: es la calidad o fuerza de la sangre en cada latido.
Se habla de amplitud normal, cuando el pulso es fácilmente palpable, no desaparece
de manera intermitente y todos los pulsos son simétricos, con elevaciones plenas,
fuertes y rápidas.
• Elasticidad: Capacidad de expansión o de deformación de la pared arterial bajo la
onda pulsátil.
19. Arritmia sinusal
Variación del ritmo normal caracterizada por cambios cíclicos en la
frecuencia del pulso debido a cambios periódicos en la frecuencia de la
descarga del nodo sinoauricular.
20. Pulso alterante
Existe alternancia regular de pulsaciones débiles y fuertes, sin cambios de
longitud del ciclo.
Degeneración de fibra miocárdica.
21. Pulso de Corrigan
Pulso saltón, caracterizado por una expansión amplia seguida de un
colapso súbito; se presenta en la insuficiencia aórtica.
27. Semiología:
Bradicardia sinusal
FC 40 - 60 latidos por minuto
Común en atletas y personas jóvenes de salud vigorosa así como durante el reposo
o sueño.
También se encuentra en las siguientes condiciones:
• Hipotiroidismo
• Colestasis
• Estados de hipervagotonía
• Hipertensión endocraneana
• Efectos de la digital
• Efectos de fármacos B - adrenérgicos
• Cardiopatía ateroesclerótica
28. Taquicardia sinusal
FC que no sobrepasa los 160 latidos por minuto.
Se debe a las siguientes causas:
• Causas fisiológicas: ejercicio físico, emociones intensas.
• Hipertiroidismo
• Hipotensión
• Hipoxia
• Hipertermia
• Anemia aguda
• Infecciones
• Insuficiencia cardiaca
• Lesiones en pericardio, miocardio o endocardio
• Efectos de fármacos simpaticomiméticos: nicotina, cafeína, mariguana.
29. Arritmia sinusal
Alteración benigna del ritmo que no da lugar a ningún síntoma. Puede ser de
origen respiratorio o no, pero, en ambos casos, se debe a aumento y disminución
alternantes del tono vagal y simpático.
30. Extrasistoles
Depende del sitio de formación del impulso, por lo que conviene clasificarlas de la
siguiente manera:
a) Auriculares: Pueden presentarse en corazones normales, pero es más frecuente
que aparezcan en casos de cardiopatías, especialmente reumáticas y
ateroscleróticas.
También puede ser resultado del empleo de drogas simpatomiméticas, tabaco,
cafeína y de alteraciones del SNC.
31. b) Fasciculares y de haz de His: Pueden aparecer tanto en corazones normales
durante periodos de stress o de exceso de producción de catecolaminas, como en
corazones enfermos, por isquemia o exceso de digitálico.
32. c) Ventriculares: Pueden presentarse en corazones normales o enfermos o como
resultado de exceso de digital.
Normales: excesos de catecolaminas.
Pueden ser precipitadas por estados inflamatorios pericárdicos, epicárdicos o
miocárdicos, así como por condiciones que dan lugar a insuficiencia cardiaca
congestiva o isquemia por cardiopatía coronaria.
33. Taquicardia paroxística supraventricular
FC por encima de 160 latidos/ minuto.
Se desconoce su etiología.
Es característico que se presente en personas jóvenes sin evidencias de
enfermedad cardiaca, pero también se pueden presentar en individuos de mayor
edad con enfermedad cardiovascular ateroesclerótica.
Se manifiesta con dolor precordial, angustia y palpitaciones.
34. Flutter auricular
Trastorno del ritmo que puede presentarse en cualquier cardiopatía, pero es
particularmente frecuente en la de origen aterosclerótico, en el infarto del
miocardio, cardiopatía reumática y enfermedades inflamatorias de la aurícula.
35. Fibrilación auricular
Se presenta en gente joven, puede ser idiopática o puede ser consecutiva a
enfermedad valvular mitral de origen reumático. En las personas de mayor edad, la
causa más común es la cardiopatía aterosclerótica.
36. Taquicardia ventricular
Se presenta de manera paroxística en individuos jóvenes, sin otras evidencias de
cardiopatía, pero es más común que se presente en casos de:
- Cardiopatía aterosclerótica
- Enfermedad coronaria con isquemia del miocardio
- Acción digitálica
37. Fibrilación ventricular
La causa más común es el IAM y probablemente constituye la causa más frecuente
de muerte súbita. A veces se produce durante la anestesia general o por
sobredosificación de digital, quinidina o procainamida.
38. Pulso paradójico
Se presenta en toda situación en la que haya disminución del llenado ventricular
izquierdo durante la inspiración.
La causa más común es la acentuación de la presión negativa intratorácica durante
la inspiración, que ocurre en la enfermedad pulmonar obstructiva.
Obstrucción de la vena cava superior
Insuficiencia cardiaca grave
Choque cardiogénico
39. Técnica de exploración:
Para determinar la frecuencia, suele bastar con contar el número de pulsaciones
durante un intervalo de 15 segundos para después multiplicar por 4.
Si el pulso es muy irregular es preferible contar durante 1 minuto entero y
comparar con las frecuencias del latido cardiaco determinado por auscultación,
para poder determinar la posible existencia de un déficit de pulso (número de
ciclos que dan lugar a sonido cardiaco, pero no a un pulso periférico).
40. La arteria clásicamente preferida para la determinación de la frecuencia y el ritmo
del pulso es la radial.
Si se desea precisar las características del contorno del pulso, es preferible el pulso
carotideo.
La arteria femoral es la preferida cuando se requiere averiguar si existe pulso
alternante.