Investigación teórica de la dimensión valoral en la práctica educativa.
Transformación de la práctica educativa
1. Centro Regional de Educación Normal
Clave: 23DNE0002D
Observación y análisis de la práctica
escolar.
Coordinadora: Ninfa Margely Monje Catzín.
“Reporte de lectura”
Autora: Mariel Zapata Rodríguez
Segundo Semestre 1°B
2. La práctica y las acciones
educativas, objeto construido y
referentes conceptuales
nacionales e internacionales.
María Elena Mora Oropeza, Luciano Gonzáles
Velasco, Juan Campechano Covarrubias y José
Martínez Rosas.
3. Síntesis.
La producción teórica y de investigación trae
como efecto casi inmediato, la publicación de
trabajos que tienen la intención de aportar a la
constitución del campo. Son entonces, los
mismos educadores, investigadores y sus
propios teóricos consultados los que
proporcionan los principios básicos de
conceptualización del objeto de estudio en este
campo de conocimiento.
La educación es una construcción dirigida que
tiene un sentido y que tiene toda una serie de
posibilidades. Los los eventos educativos están
constituidos por la práctica, es en ella donde se
actualiza e interpreta “lo educativo”. (Pág 190).
4. El educador se encuentra inmerso en una
experiencia en donde potencialmente, puede
tener un cierto control sobre lo que quiere
producir y es susceptible de incidir sobre sus
acciones, ya sea provocándolas o
modificándolas. Pág. 191
La práctica educativa de acuerdo con
Gimeno Sacristán (1998:35) “es una acción
orientada, con sentido, donde el sujeto tiene
un papel fundamental como agente, aunque
insertado en la estructura social”. Y es
educativa porque su intención incorpora
precisamente el incidir en la transformación
de otro, propicia que los sujetos de formen.
5. La práctica educativa es un conjunto
articulado de acciones
intencionadamente transformadoras del
sujeto que se interpretan como tales
mediante una red conceptual que se
modifica a partir de la relación entre la
teoría y la práctica. Pág. 191
Las prácticas educativas son portadoras
y están ancladas a la cultura y desde
ella los actores actualizan y modifican
los sistemas simbólicos, (Geertz).
Pág.192
6. Gimeno Sacristán (1998: 36) afirma que la
acción humana mantiene una gran
“dependencia directa de quienes están
implicados en su desarrollo, adquieren sin
embargo un carácter social y cultural que
desborda a los individuos concretos que la
practican”. Enfatiza que a través de las
acciones educativas que realizan, los
profesores se manifiestan y transforman lo
que acontece. Pág. 193
La transformación de la práctica no puede
realizarse sin cierta conciencia de los fines
que la orientan, sin cierto conocimiento del
objeto que se desea transformar. Pág. 195
7. La reflexión es una fuerza que permite al
educador superar su acción
cotidiana, reestructurar su autocomprensión
y orientar desde ahí a la acción evidenciando
las consecuencias prácticas. Pág. 195
El convertir las acciones en reflexivas y
conscientes por encima de la inercia
cotidiana, constituye el proceso de
construcción de su práctica; el educador es
un recreador de la realidad comprendiéndola
y explicándola. Pág. 196
Es fundamental, que ya evidenciada la
transformación de la práctica
cotidiana, permanezca. Pág. 196
8. La transformación del educador, que es la
condición y producto esencial, de la
intervención, implica la construcción de un
modelo metodológico diferente que modifica
aquellas concepciones que articulan cada uno de
los constitutivos con una lógica construida
históricamente por su formación o experiencia.
Pág. 197
El método fundamental para producir la
transformación sustancial de las acciones que
constituyen la práctica, es la intervención. Pág.
197
El educador puede desarrollar competencias
más complejas que el sólo conocimiento
reflexivo de su práctica, cuanto más riguroso es
el trabajo de intervención, mayor posibilidades
tiene de desarrollar habilidades especificas. Pág.
198
9. La educación se concibe como una pieza fundamental de los
procesos institucionalizados de producción social y cultural.
Sus características son la separación entre la teoría y la
práctica, de forma que el educador se convierte en un
ejecutor de orientaciones de los
planificadores, investigadores y teóricos. Pág. 201
Ante estas situaciones problemáticas. Los actores utilizando
métodos e instrumentos de intervención pertinente y con el
apoyo de un pedagogo social, intervienen sistemáticamente
en las situaciones concretas. Estas situaciones no son
definitivas e inflexibles ya que son modificadas en función de
los mismos cambios de las personas. Pág. 203
La acción inicia la reflexión. Pág. 206
Cuando el profesional reflexiona desde la acción de un caso
que percibe como único, prestando atención a los fenómenos
y sacando a la superficie su comprensión intuitiva de ellos, su
experimentación es exploratoria, probando en la acción y
probando su hipótesis. De este hecho se sigue el carácter
distintivo de la investigación en la práctica (Schon, 1998:
138). Pág. 209