La tasa tobin, un impuesto a los ahorradores de parte de los derrochones
1. La Tasa Tobin, un impuesto a los ahorradores de parte de los derrochones
31 Ene 2013 - Hugo Ferrer - 15
Las clases medias (sea lo que sea eso) o, mejor dicho, las masas -
término más propio de un "contrarian"- viven eternamente en Babia. Ya
denuncié hace meses que la Tasa Tobin era un impuesto para la clase
media y que lo peor de todos es que son las clases medias quienes lo
están pidiendo (65% de la población a favor). Como dije entonces:
La élite, la clase dirigente, siempre tendrá herramientas para
hacer las cosas como le conviene. Y siempre será la plebe la
Hugo Ferrer que pagará la factura, no sin celebrarlo con pleno gozo
1º en inbestia pensando que han conquistado algo, cuando en realidad le
han vuelto a robar la cartera. No se dan cuenta, pero por eso
son la plebe y no salen de ella.
Durante los próximos años vamos a asistir a la muerte parcial de una
industria que se tiene por improductiva, pero que realmente es parte del
torrente sanguíneo del sistema. Y sin ese componente, la sangre será de
mala calidad y poco a poco el enfermo empeorará sin remedio. ¿Por qué
estoy tan dramático? Porque ya no hay marcha atrás para la aprobación
e implementación de la llamada Tasa Tobin o, más técnicamente,
"Impuesto a las Transacciones Financieras" ("FTT" en inglés).
El impuesto será de naturaleza altamente confiscatoria, de modo que
toda compraventa de acciones o bonos será gravada con un 0,1% por
operación y toda compraventa con derivados será gravada con un
0,01%. El impuesto se aplicará a todas las instituciones que realicen la
operación y que tengan su sede en la Unión Europea o que realicen la
transacción en nombre de un cliente con residencia en la Unión Europea,
de tal manera que si usted es residente en la UE y decide comprar
acciones canadienses, se le cargará un 0,1% por cada vez que compre o
venda esos títulos. Un absoluto despropósito. Vayamos por pasos
porque hay que aportar material y debemos de tomar perspectiva.
Es difícil de explicar el porqué pero todos lo sabemos: Europa
odia el dinero, Europa odia el capitalismo. La Comisión
Europea, el 28 de septiembre de 2011, presentó una
propuesta para gravar las transacciones financieras en los 27
países de la Unión. En la nota de prensa de aquél día, se argüía
que había dos razones para el lanzamiento de la propuesta:
En primer lugar, se garantizará la justa contribución del sector
financiero en un momento de saneamiento presupuestario en los
Estados miembros. Este sector desempeñó un papel en los orígenes de
la crisis económica. Las administraciones y los ciudadanos europeos en
general han soportado el coste de los masivos rescates sufragados por
los contribuyentes en apoyo del sector financiero. Además, la fiscalidad
actual del sector es inferior a la de otros sectores. La propuesta
generará unos ingresos fiscales suplementarios importantes procedentes
del sector financiero para que este contribuya a la hacienda pública.
-En segundo lugar, una normativa coordinada a escala de la UE ayudará
a consolidar el mercado único de la UE. En la actualidad, diez Estados
miembros aplican alguna forma de impuesto sobre las transacciones
financieras. La propuesta introducirá nuevos tipos impositivos mínimos y
armonizará los impuestos vigentes sobre las transacciones financieras
en la UE, lo que contribuirá a reducir las distorsiones de la competencia
en el mercado único, desalentará las prácticas especulativas arriesgadas
y servirá de complemento a las medidas reglamentarias dirigidas a
prevenir futuras crisis. El impuesto sobre las transacciones financieras a
escala de la UE reforzará la posición de la UE en favor de unas normas
comunes en relación con la introducción de este impuesto en todo el
mundo, sobre todo a través del G-20.
2. Estas razones son esgrimidas desde la profunda miopía que afecta a las
instituciones europeas. En primer lugar, señala que "el sector
desempeñó un papel en los orígenes de la crisis económica" y que "las
administraciones y los ciudadanos europeos en general han soportado el
coste masivo de los rescates", es decir, se deja claro que hay dos
antagonistas "Los Malígnos Mercados" y "La Buena Administración y los
Buenos Ciudadanos". Establecidos los sujetos activos de la dialéctica y
asignados desde el principio los papeles del malo y del bueno, las
instituciones europeas acusan a "los mercados" de llevar el mundo a la
ruina y se olvidan de mencionar que tal vez en el origen de los
problemas tuvieron mucho que ver las administraciones públicas, un
sistema corrupto, el intervencionismo desaforado, el exceso de
burocracia y unos impuestos pesados que convierten Europa en un
infierno fiscal.
En su segundo punto, aseguran que el impuesto desalentará las
"prácticas especulativas arriesgadas y servirá de complemento a las
medidas reglamentarias dirigidas a prevenir futuras crisis". Es decir,
crean una Unión Monetaria artificial que los más avezados observadores
ya avisaron que saltaría por los aires, con esa Unión Monetaria
"imposible" originan un ambiente de tipos reducidos que crea burbujas,
especialmente en los países del sur que a su vez tenían unas economías
altamente intervenidas en donde los ayuntamientos manejaban a su
antojo las recalificaciones de tierra promoviendo la corrupción más soez
a la par que una enorme burbuja inmobiliaria. Hacen todo esto, legislan
y cuando el experimiento le salta por los aires, acusan a los mercados.
No se han enterado que ellos son los principales culpables de las crisis al
alterar el libre fluir de mercancías y servicios según las leyes naturales.
Y por si fuera poco, creen que convencerán al G20 y a la humanidad
entera de imponer este suicida impuesto.
Sigamos leyendo. Ese mismo día de 28 de septiembre de 2011, publican
el llamado MEMO/11/640 en donde aclaran algunas cuestiones en
formato "preguntas y respuestas". De esas preguntas y respuestas me
llama la atención:
¿Por qué ha propuesto la Comisión un nuevo impuesto del sector
financiero?
El sector financiero aportaría una contribución equitativa para
cubrir los costes de la crisis después de haber disfrutado de
ayudas públicas muy significativas desde el inicio de la crisis
actual;
La pregunta es ¿dónde está mi ayuda? No me importa pagar el impuesto
si recibí ayuda. ¿Por qué ellos tienen la culpa según la UE y yo como
ciudadano que compro y vendo instrumentos financieros tengo que
pagar la culpa? Al final, lo que ocurre es que, entre el fagocitario
estatalismo de la Unión Europea y el corrupto corporativismo de las
instituciones financieras, solo hay una persona que paga la factura: el
ciudadano. Ese pobre ciudadano que vive dentro de un sistema atroz y
degenerado.
El impuesto afectaría a absolutamente todos los productos. Se ha
escuchado durante los últimos meses que productos del tipo de los CFDs
estarían excluidos, pero en esta pregunta y respuesta del MEMO queda
muy claro:
¿Qué transacciones quedarán incluidas en su ámbito?
La Comisión ha propuesto que el impuesto se aplique a todas las
transacciones de instrumentos financieros entre entidades
financieras, si al menos una de estas entidades financieras se
considera establecida en la Unión Europea.Los instrumentos
financieros en cuestión serían productos como las acciones,
obligaciones, derivados y productos financieros
estructurados.Daría igual que las transacciones se efectuaran en
mercados organizados o en mercados extrabursátiles, ya que en
3. ambos casos se aplicaría el impuesto.
La clave es la expresión "extrabursátil" lo que incluye a todo lo que se
mueve y se menea.
Otra pregunta del MEMO:
¿Dónde se aplicará el impuesto?
El impuesto se aplicaría en el territorio de los 27 Estados
miembros de la Unión Europea.Afectaría a todas las transacciones
financieras a condición de que al menos una de las partes
intervinientes en la transacción estuviera establecida en un Estado
miembro de la UE y de que en la transacción fuera parte una
entidad financiera establecida en el territorio del Estado miembro
correspondiente.
Esto ya es de coña. Técnicamente es como si usted va de vacaciones a
Manhattan y decide comprar un paquete de Marlboro y la Unión Europea
le dice que pague en Europa un 0,1% por la transacción porque usted es
europeo. Esto es una expresión de un estatalismo ultraexpansivo y
confiscatorio.
Más preguntas y respuestas del mismo MEMO:
¿Quién y cómo se va a beneficiar?
De este impuesto se beneficiarían todos los ciudadanos y
empresas mediante la generación de unos ingresos públicos
complementarios que podrían utilizarse para crear un mayor
crecimiento económico y prosperidad en la UE.Los Estados
miembros también se verían beneficiados por esta nueva fuente
de ingresos públicos, tanto en forma de financiación directa para
sus propios presupuestos como de reducción de sus contribuciones
al presupuesto de la UE.
Por último, el impuesto sobre las transacciones financieras se
convertiría en un nuevo «recurso propio» para que la Unión
Europea financiara sus políticas en beneficio de todos.
Y si tanta riqueza va a generar ¿por qué no hacemos un sistema en el
que todo lo damos al Estado? Cuánto más le demos mejor ¿no? ¡Ah no!
¡Espera! Eso ya lo vimos y sabemos como acabó.
Después hay algo que no entiendo. El impuesto es 0,1% en acciones y
bonos. En derivados es el 0,01%. ¿Por qué esta diferencia? ¿No son
acaso los mercados de derivados el lugar donde los especuladores
campan a sus anchas haciendo el mal? ¿No son, supuestamente, los
mercados OTC el patio de recreo de los malditos especuladores?
Entonces ¿por qué gravarlos con un impuesto 10 veces menor?
Un ejemplo. Si yo, un ahorrador, quiero invertir en acciones cien mil
euros, se me cobrará por la compra un impuesto de 100 euros. Ahora, si
compro un CDS que ha sido tachado uno de los productos más sucios
del sistema, por el mismo nominal solo pago 10 euros de impuesto.
¿Qué ocurre aquí? ¿Por qué se está castigando el producto del ahorrador
(acciones) y se castiga menos al producto del especulador? Y cuidado
porque no estoy haciendo juicio moral, solo señalo la perversión de la
Unión Europea y como su objetivo es recaudar a toda costa y a costa de
las clases medias especialmente. Y no me vengan que el impuesto es
0,1% para todos porque al final es un 0,1% aplicado al margen del
derivado. Es necesario recordar que cuando se compra o vende un
contrato derivado, se es responsable del nominal al completo.
Ahora, ya no valdrá la pena comprar ETFs porque sale bastante más
caro que comprar un futuro debido al impuesto. ¿Cómo afectará todo
esto a la industria de los ETFs?
4. Los CFDs se volverán aún más caros por la misma razón. El típico (y
recalco típico, no todos) jugador novato de CFDs coge y pone 1,000
euros en una cuenta para poder operar una posición nominal de 100,000
euros (apalancamiento 1:100). Lo curioso es que tendría que pagar el
10% del margen como impuesto. ¿Cómo afectará el impuesto a la
industria-casino de los CFDs?
Muchas preguntas e interrogantes. Pero yo tengo algo claro. Este
impuesto apenas me afecta pero afecta mucho a los ahorradores, a los
fondos de pensiones y da más alas a los derrochones, a los burócratas, a
los estatalistas, Bárcenas y ladrones.