Obra de Marisa azuara. Traducida por Igino Sanna con la colaboración de Gabriela Degastaldi. Presentada por el Profesor Salvatore Dedòla. Castillo de Sanluri, 5 de octubre de 2012
2. A día de hoy, la
identidad de Cristóval
Colón sigue sin ser
establecida de forma
concluyente
3. La teoría más aceptada determina
que nació en la ciudad de Génova
y era hijo de Domenico Colombo y
Susana Fontanarossa.
Documento Assereto
4. Sin embargo, un
documento contemporáneo
al descubridor, el
Documento Borromei, lo
niega tajantemente.
Dice así: Y diré todavía ser
Colom equivalente a Colombo,
por lo que habiéndose
descubierto que vive en Génova
un tal Cristoforo Colombo
Canajosa, hijo de Domingo y
de Susana Fontanarosa, no se
debe confundir con el navegante
de la Indias Occidentales. – En
Bergamo año del Señor de
1494
Colombo y Colón son dos
personas diferentes
5. Se impone, por tanto,
recomenzar la búsqueda del
descubridor desde el
principio. Es una labor
ingente, pero las pruebas
encontradas merecen la pena.
Demuestran que:
9. 4- COLÓN NACIÓ
ALREDEDOR DE 1436
“… el cual Don Cristóbal Colón,
inventor de las Indias, de maravillosa
y honrada memoria, natural de la
provincia de Milán, estando en
Valladolid en 1506 en el mes de mayo
murió en senectute bona, de edad de 70
años” (Cura de los Palacios)
12. 7- COLÓN ERA SÚBDITO DE LOS REYES CATÓLICOS Y NATURAL
DE UNO DE SUS ESTADOS
13. ¿Cómo podía ser Colón genovés y al mismo tiempo súbdito y natural de un
estado regido por los Reyes Católicos?
14. Jurídicamente sólo existe una posibilidad: que Colón procediese de un
territorio que en el momento de su nacimiento fuese genovés y más tarde
hubiese pasado a poder de los Reyes Católicos
15. Un único territorio en el mundo
cumplía dicha formalidad: la
Corona de Logu en la isla de
Cerdeña, anexionada oficialmente
a la Corona de Aragón tras la
derrota de Leonardo Alagón en la
Batalla de Macomer
16. De la presencia sarda en Cerdeña, no cabe dudar. Todavía se encuentran
incontables testimonios en la actualidad
19. Acabamos de determinar el territorio en que vino al mundo el
descubridor. Ahora, ¿seremos capaces de encontrar a su familia?
20. Recordemos el documento que certifica su
procedencia de sangre real. Ello reduce
nuestro campo de búsqueda a los linajes
judiciales de Cerdeña
21. Únicamente nos
Descartaremos por
quedan los
diferentes motivos
Cubello,
a los Doria del
marqueses de
Logudoro, a los
Oristán y los
Visconti de
Piccolomini de
Cerdeña y a los
Sena, vizcondes de
Arborea de la línea
Sanluri.
directa
Centremonos en
ellos
22. Inicia la dinastía el
conquistador de Córcega,
Ugo della Colonna.
Hernando Colón escribió que
“su padre limó el apellido
para asemejarlo al de sus
mayores”. Muy gráfico.
Dicha genealogía también
nos lleva a las ramas de los
Príncipes de San Colombano,
conocidos en la época como
Colombos
23. Centrémonos en ella, ya que
es la que nos lleva al rey
Barisone d’Arborea. Como
puede comprobarse, a
cualquiera de sus
descendientes puede
aplicárseles tanto el apelativo
Colonus como Colombo
24. De dicha estirpe dicen los Anales de Génova : “L’antichissima e
nobile famiglia Serra, originaria di Genova, godette di grande
nobiltà in Genova, Spagna, Sardegna e nel Reame di Napoli. Si
intuisce la grandezza di questa famiglia dal motto: “Venturi aevi
non immemor" ovvero "Conoscere il passato per guardare al
futuro”. Nella Cronologia dei Consoli di Genova (“ Atti della
Società Ligure di Storia Patria” – Vol. I, fasc. 3, carta 240) si
rileva che il Casato discente dalla famiglia ligure dei de Mari;
capostipite fu Corso che prese il cognome dal padre Serra, figlio di
Ottone de Mari, della Classe dei Visconti nel 1122. I Serra di
Sardegna raggiunsero il massimo splendore nel 1145 con Barisone
de Serra proclamato re di Sardegna da Federico Barbarossa”. Los
miembros de la familia Serra se inscribían en el Albergo
Giudicale de Génova, registro nobiliario de la época,
prácticamente destruido en la actualidad
25. Continuemos, pues, con
los descendientes del rey
Barisone. Entre ellos
están los Cubello y, por
supuesto, los De Sena
Piccolomini, cuyo
apellido, al ser limado
(es decir, recortado por
delante y por detrás) se
convierte en Colom,
Colón en castellano
26. Los datos parecen
confirmar la identidad
de Colón, pero podría
tratarse sólo de una
casualidad.
Necesitamos más
certezas para asentar
nuestra tesis. Nos las
da Hernando Colón en
la biografía que
escribió de su padre
27. En la página 104 de la Historia del Almirante leemos que la patria de Colón
era Janua y su linaje Terra Rubra
28. Una pequeña comprobación en
el Archivo Malaspina de Mulazzo
nos permite certificar que los De
Sena Piccolomini procedían de la
Marca de Janua y del linaje de
los marqueses de Terrarossa
29. No caben dudas. Hemos dado con la familia de
Colón. Es la de los vizcondes de Sanluri, señores de
Láconi y barones de Quartu
31. Sólo queda por averiguar de quién era hijo el descubridor. Las opciones son
limitadas. Atendiendo a su testamento, el vizconde Antonio de Sanluri sólo
tenía dos hijos varones, Pedro y Salvadore.
33. Algo muy diferente ocurre, sin embargo, con Salvadore, marido de Isabela
d’Alagon. Tenían tres hijos varones, cuyo nombre no da en su testamento de 1482
para no perjudicarlos, que huyeron de Cerdeña tras la derrota de Macomer
34. En la correspondencia mantenida
con Fernando el Católico por la
enajenación del feudo de Tuili,
Salvadore Piccolomini dice que sus
hijos estaban en Portugal con el
barco que le reclamaba el rey de
Aragón
35. Sorprendentemente, según Hernando Colón, su
padre y su tío tenían un barco en Lisboa que les
robaron los piratas ingleses. ¿Será casualidad?
¿Tan casualidad como los nombres impuestos
por Colón a la primera isla que descubrió y a la
primera ciudad que fundó?
36. No fueron las únicas referencias de Colón a su familia. Veamos algunas otras:
37. 1- Cristóbal Colón, en una
carta a Juana de Torres,
declaró NO SER EL
PRIMER ALMIRANTE
DE SU FAMILIA
38. 2- Colón exigió a los Reyes Católicos
el tratamiento de Don. Estos se lo
otorgaron con las prerrogativas
exclusivas de la Generosità sarda
39. 3- Colón hizo constar en su codicilo
testamentario que Caller (actual Cagliari)
se hallaba en Génova
40. 4- Sospechosamente, las fechas de liberación de los hermanos del marqués de
Oristán, presos en el castillo de Játiva, coinciden con las firmas de los privilegios de
Colón
41. 5- De forma harto incomprensible, el título de
vizconde de Sanluri quedó desierto tras su
enajenación durante veintiocho años, pese a la
necesidad económica del rey de Aragón. Dos meses
después de la muerte de Colón, Fernando el
Católico se apresuró a otorgarlo a los Castelvi
42. 6- El hijo mayor de Colón, Diego, dio el nombre de Oristán a la capital de sus
estados en Jamaica. Era el título ostentado por los últimos soberanos de la
Corona de Logu y el nombre de su capital
43. 7- Colón, para llevar a cabo el proyecto descubridor, se rodeó de gente con
grandes intereses en Cerdeña o muy próxima a los antiguos vizcondes de
Sanluri
44. 8- Llamativamente, quienes se revelaron sus grandes enemigos tras el
descubrimiento, como el Padre Boil o Pedro Bertrán Margarit, también eran
enemigos de los primeros vizcondes de Sanluri
45. 9- Todos los genoveses que Colón nombra en su testamento estaban
emparentados con los primeros vizcondes de Sanluri
46. 10- Como era habitual en el siglo XV Colón mantuvo una estrecha relación con
,
sus parientes, los Piccolomini de Siena, sobre todo con los papas Pío II y Pío III
47. Su estancia en Siena fue
recogida por los cronistas de la
ciudad y, en la iglesia de
Fontegiusta, todavía conservan
los regalos que hizo a la Virgen
del lugar
48. Colón también aparece
retratado en su juventud en los
frescos de la Librería
Picolomini. Curiosamente, con
el lebrel de los Arborea
49. Por si quedara alguna duda
sobre la relación de Colón con
los vizcondes de Sanluri, sus
herederos intentaron recuperar
el título por todos los medios,
ayudados por sus parientes
Borgia
Luís de Castelvi, vizconde de Sanluri
50. La operación fue un monumental
fracaso y desembocó en la
segunda sentencia de felonía
emitida en Cerdeña
51. Puede decirse, sin
el menor margen
de error, que la
vida de Colón y la
historia del
descubrimiento de
América están
determinadas por
las dos únicas
sentencias de
felonía emitidas
en Cerdeña
durante el periodo
de dominación
aragonesa
52. CAUSAS QUE HAN LLEVADO A
SILENCIAR LA IDENTIDAD DE
COLÓN
53. En un primer momento
fueron los intereses
políticos y expansionistas
de Fernando el Católico los
que obligaron a ocultar
quién era Colón y a borrar
las huellas de sus orígenes
54. Más tarde, cuando los Saboya, duques de Geneve, obtuvieron Cerdeña, de nuevo
primaron los intereses políticos sobre el esclarecimiento del origen de Colón
55. El rey Vittorio Emanuele I hubiese podido hacer pública su identidad.
Sabía muy bien quién era el descubridor, pues obraba en su poder la caja de
cordobán con los documentos privados de Colón. Prefirió entregársela a los
Cambiaso a cambio de anexionar Génova a la Unión Italiana
56. Los Saboya ya habían comenzado a diseñar su plan de
unificar Italia a costa de sacrificar el Reino de Cerdeña
57. En aquel momento, los intereses de la República de Génova se centraban en el
testamento apócrifo de Colón que los designaba herederos si faltaban
sucesores directos. El botín podía ser el continente americano
58. La maniobra chocó contra los jueces españoles, pero Génova aún mantenía
vivas sus reivindicaciones coloniales sobre Cerdeña. Para Génova, todo lo
sardo es genovés, como ocurre con Carloforte, Comune Onorario di Genova.
59. Otro tanto sucede con los catalanes y Alghero. También con los catalanes y
Colón. La única prueba que apoya una “supuesta nacionalidad catalana” del
descubridor es que intercalaba palabras lemosinas en sus escritos. Pero Cataluña
no desiste de intentar apropiárselo
60. A tal punto llega su obsesión
que, en el siglo XIX, un noble
catalán expolió los archivos
de Cerdeña en busca de
pruebas que poder utilizar
61. Retablo de San Cristóbal. Oliena
Entretanto, los sardos,
a quienes sus invasores
han negado la
nobleza, la dignidad y
el derecho a su propia
historia, luchan por
reconstruir un pasado
que bien se ha perdido
irremediablemente
bien permanece
disimulado u oculto en
sus más preciosas
obras de arte