4. Comité de Lactancia Materna de la AEP
Reunión de trabajo del libro
Barcelona, Febrero 2004
De pie, de izquierda a derecha: Isolina Riaño, Juan José Lasarte, Mª Carmen Temboury,
José María Paricio, Marta Díaz-Gómez, Leonardo Landa, Ana Martínez, José Arena.
Sentados, de izquierda a derecha: Adolfo Gómez-Papi, María Teresa Hernández-Aguilar,
Jesús Martín-Calama, Josefa Aguayo, María José Lozano, Vicente Molina.
5. Prólogo
Constituye una enorme satisfacción A lo largo de distintos capítulos se ana-
prologar esta obra que como el lector liza las diferentes facetas relacionadas con
podrá rápidamente percibir constituye el la alimentación al pecho abarcando aspec-
libro más importante que hasta ahora se tos históricos, epidemiológicos, fisiológi-
ha editado en España sobre la Lactancia cos, etc. con un extraordinario rigor que
Materna. se conjuga plenamente con un carácter
Sigue siendo una realidad y probable- divulgativo de tal manera que este libro tie-
mente lo será siempre, que la alimentación ne la rara virtud de interesar tanto a los
al pecho materno es la opción óptima que profesionales sanitarios de distintos nive-
podemos y debemos ofrecer a los lactan- les como a cualquier persona que acuda al
tes durante los primeros meses de la vida. mismo con deseos de información sobre el
Este libro, sencillamente extraordina- tema.
rio, está escrito por Pediatras expertos que Sería absolutamente imposible en el
constituyen el Comité de Lactancia Mater- espacio de un prólogo recoger y analizar
na de la Asociación Española de Pediatría. el excelente trabajo que los autores han
Es realmente gratificante comprobar que desarrollado en esta obra. Estoy conven-
contamos con Comités, dentro de nuestra cido que este libro marcará un hito y será
Asociación, que nos ofrecen sus conoci- una obra de referencia a nivel nacional e
mientos a través de una serie de mono- internacional sobre la Lactancia Materna.
grafías que suponen un caudal científico Acciones de este tipo consolidan y presti-
de enorme interés. Se trata de un libro que gian no solo a los autores, al Comité que
está escrito con fe, con entusiasmo, yo diría representan y a la A.E.P., también son
que con pasión sin caer en fundamentalis- expresión del nivel científico de la Pedia-
mos respecto a los múltiples aspectos rela- tría y Puericultura españolas, y reivindi-
cionados con la lactancia materna. co el término Puericultura, tan latino, tan
6. clásico, porque este libro nos enseña a cui- También es obligado agradecer a Pre-
dar, a alimentar, a “cultivar” a los niños natal y Medela su patrocinio para que esta
desde el momento del nacimiento con lo obra llegue no solo a los socios de la A.E.P.
mejor que le podemos ofrecer que es el sino a otros sanitarios y una buena parte
pecho materno. De esta forma estamos ins- de la sociedad, por lo que les expresamos
taurando, ya en la propia sala de partos, nuestro agradecimiento y por supuesto a
uno de los hábitos más saludable: alimen- la editorial Ergon que una vez más cola-
tarlo al pecho de su madre. bora con la A.E.P. y no regatea esfuerzos
Quiero expresar mi profundo agra- para proporcionarnos una publicación de
decimiento a los autores, mi respeto por excelente presentación y calidad.
el excelente trabajo que han desarrollado
que estoy seguro, será motivo de admi- Prof. Alfonso Delgado Rubio
ración y reconocimiento por parte de sus Presidente de la
colegas. Asociación Española de Pediatría
7. Autores
JOSEFA AGUAYO MALDONADO MARÍA TERESA HERNÁNDEZ-AGUILAR
Pediatra-Neonatóloga Pediatra de Atención Primaria
Profesora Asociada de Pediatría E.A.P. Area 09, Valencia
Universidad de Sevilla Comité de Lactancia Materna de la AEP
Neonatología. Hospital de Valme, Sevilla
Comité de Lactancia Materna de la AEP LEONARDO LANDA RIVERA
Pediatra de Atención Primaria
JOSÉ ARENA ANSÓTEGUI E.A.P. Pedreguer, Alicante
Pediatra-Neonatólogo Comité de Lactancia Materna de la AEP
Hospital Donostia. Donostia-San Sebastián
Coordinador del Programa de JUAN JOSÉ LASARTE VELILLAS
Salud Materno-Infantil de UNICEF Pediatra de Atención Primaria
Comité Español E.A.P. Zuera, Zaragoza
Comité de Lactancia Materna de la AEP Comité de Lactancia Materna de la AEP
N. MARTA DÍAZ-GÓMEZ MARÍA JOSÉ LOZANO DE TORRE
Pediatra Pediatra
Catedrática de Enfermería Materno-Infantil Profesora Titular de Pediatría
Escuela Universitaria de Enfermería y Universidad de Cantabria
Fisioterapia de la Universidad de La Laguna Hospital Universitario M de Valdecilla
Comité de Lactancia Materna de la AEP Santander
Comité de Lactancia Materna de la AEP
ADOLFO GÓMEZ PAPÍ
Pediatra-Neonatólogo JESÚS MARTÍN-CALAMA VALERO
Profesor Agregado de Pediatría Pediatra
Universitat Rovira i Virgili. Tarragona Hospital O. Polanco de Teruel
Hospital Universitario de Tarragona "Joan XXIII" Comité de Lactancia Materna de la AEP
Hospital Amigo de los Niños OMS/UNICEF 1997 (coordinador)
Comité de Lactancia Materna de la AEP
8. ANA MARTÍNEZ RUBIO ISOLINA RIAÑO GALÁN
Pediatra de Atención Primaria Pediatra
EAP. Pilas, Sevilla Jefe de Sección de Pediatría
Comité de Lactancia Materna de la AEP Hospital Carmen y Severo Ochoa,
Cangas del Narcea, Asturias
VICENTE MOLINA MORALES Hospital Amigo de los Niños OMS/UNICEF 2002
Pediatra-Neonatólogo Comité de lactancia materna de la AEP
Jefe del Departamento de Pediatría
Institut Universitari Dexeus. Barcelona. Mª CARMEN TEMBOURY MOLINA
Hospital Amigo de los Niños OMS/UNICEF 2004 Pediatra
Comité de Lactancia Materna de la AEP Jefe del Servicio de Pediatría de la
Clínica Santa Elena, Madrid.
JOSÉ MARÍA PARICIO TALAYERO Comité de Lactancia Materna de la AEP
Pediatra
Jefe del Servicio de Pediatría DOMINGO VILLAAMIL GÓMEZ DE LA
Hospital Marina Alta (Denia, Alicante) TORRE
Hospital Amigo de los Niños OMS/UNICEF 1999 Abogado
Comité de Lactancia Materna de la AEP Jefe del Sindicato Médico
Profesional de Asturias
Asesor Jurídico del Colegio Oficial de
Psicólogos del Principado de Asturias
9. Indice
INTRODUCCIÓN
J. Martín-Calama 1
A. ASPECTOS TEÓRICOS
1. Aspectos históricos de la alimentación al seno materno
J.M. Paricio Talayero 7
2. Aspectos antropológicos en la práctica del amamantamiento
L. Landa Rivera 27
3. Epidemiología de la lactancia materna. Prevalencia y tendencias de la lactancia
materna en el mundo y en España
M.T. Hernández Aguilar 31
4. Lactogénesis
J. Martín-Calama 45
5. Composición de la leche humana
M.C. Temboury Molina 59
6. Inconvenientes de la lactancia artificial
A. Gómez Papí 77
7. Duración recomendada de la lactancia materna. Ventajas e inconvenientes
I. Riaño Galán 85
8. La lactancia materna en recién nacidos pretérminos
J. Aguayo Maldonado 95
9. Contraindicaciones y falsas contraindicaciones para la lactancia materna
N. Marta Díaz-Gómez 107
10. Ventajas de la lactancia materna para la madre
A. Martínez Rubio 119
11. Los Diez Pasos de la OMS y UNICEF para favorecer la lactancia materna.
Aplicación y evidencia científica de su eficacia
M.J. Lozano de la Torre 125
10. 12. Lactancia materna: otras formas de promoción
J.M. Paricio Talayero, M.C. Temboury Molina 141
13. Importancia de los grupos de apoyo
J.J. Lasarte Velillas 147
14. Estudios sobre el crecimiento de los lactantes amamantados
L. Landa Rivera 153
15. Habilidades de comunicación en la lactancia materna
J. Aguayo Maldonado 159
B. ASPECTOS PRÁCTICOS
1. Inicio de la lactancia en la maternidad
• Introducción. Recomendaciones actuales de la OMS y Unicef: los diez pasos,
la IHAN, función especial de las maternidades
J. Arena Ansótegui 171
• Información y preparación durante el embarazo
V. Molina Morales 174
• Conducta inmediata al nacimiento. Contacto precoz
A. Gómez Papí 176
• Cómo organizar los primeros días: lactancia a demanda, duración de las tomas,
alojamiento conjunto, cuidados de la madre (descanso, limitación de visitas,
educación sanitaria)
V. Molina Morales 181
• La técnica de amamantamiento correcto
M.C. Temboury Molina 184
• Problemas de los primeros días
– Bebé poco exigente y bebé ansioso. El bebé que rechaza el pecho
V. Molina Morales 190
– Disfunción motora oral- Diferencia entre la succión del pecho y el biberón
M.C. Temboury Molina 191
– Suplementos y chupetes
A. Gómez Papí 193
– Retraso en la subida de la leche, pérdida de peso excesiva
V. Molina Morales 194
– Problemas tempranos de las mamas
J. Aguayo Maldonado 196
– Ictericia y lactancia materna
A. Gómez Papí 200
• Extracción y conservación de la leche materna
M.T. Hernández Aguilar 203
• Consejos al alta de maternidad. Como controlar la ingesta
V. Molina Morales 218
• Papel de los profesionales de la salud en las maternidades. Sugerencias para
apoyar la lactancia materna
J. Arena Ansótegui 220
11. 2. Seguimiento de la lactancia
• Cuidados y problemas de la madre
– Alimentación
A. Martínez Rubio 225
– Cuidados de los pezones y el pecho. Persistencia de las grietas
I. Riaño Galán 231
– Retención y mastitis
N. Marta Díaz-Gómez 235
– Ejercicio físico
N. Marta Díaz-Gómez 241
– Anticoncepción en la madre lactante
A. Martínez Rubio 244
• Cuidados y problemas del lactante
– Frecuencia y duración de las tomas
L. Landa Rivera 250
– El lactante que no come
L. Landa Rivera 253
– Hipogalactia (El lactante que no queda satisfecho)
L. Landa Rivera 258
– Dificultad para regular el horario diurno y nocturno. El sueño del lactante
A. Martínez Rubio 261
– Los cólicos y el llanto
A. Martínez Rubio 267
– Suplementos vitamínicos y minerales
N. Marta Díaz-Gómez 273
– Enfermedades comunes en el lactante amamantado. La hospitalización.
Algunas enfermedades raras
J.M. Paricio Talayero 278
– Papel del pediatra en el seguimiento de la lactancia materna
M.C. Temboury Molina 282
3. Prolongación de la lactancia
• Inicio de la alimentación complementaria
M.J. Lozano de la Torre 287
• Vuelta al trabajo
M.T. Hernández Aguilar 293
• El proceso de destete
M.T. Hernández Aguilar 299
4. Situaciones especiales
• Patología materna (cirugía mamaria previa, infecciones (SIDA, hepatitis),
problemas endocrinológicos, etc.)
I. Riaño Galán 305
• Patología del recién nacido
J. Aguayo Maldonado 312
• Recién nacido ingresado en neonatología. El recién nacido enfermo o prematuro
(aspectos prácticos) el método de la madre canguro
A. Gómez Papí 320
12. • Múltiples
V. Molina Morales 326
• Relación, lactancia inducida y compartida
J. Martín-Calama 329
C. DUDAS MÁS FRECUENTES DE MADRES Y PROFESIONALES
1. Preguntas y respuestas más frecuentes en 2 años de funcionamiento del
foro de lactancia materna de la AEP
J.J. Lasarte Velillas, J. Martín-Calama 339
2. Recomendaciones populares contrastadas y mitos sobre la lactancia materna
J. Martín-Calama 349
D. ANEXOS
1. Estrategias e iniciativas de apoyo a la lactancia materna. Declaraciones de la
OMS y el UNICEF: IHAN
J. Arena Ansotegui 365
2. El código de la industria
J. Aguayo Maldonado 377
3. Legislación española relativa a la lactancia materna
D. Villaamil Gómez de la Torre 391
4. Compatibilidad de fármacos, productos herbales, drogas de abuso y contaminantes
ambientales con la lactancia
J.M. Paricio Talayero 397
5. Grupos de apoyo a la lactancia materna (GALM)
I. Riaño Galán, J.J. Lasarte Velillas 409
6. Guías de Práctica Clínica sobre lactancia materna
M.T. Hernández Aguilar 419
7. Investigación en lactancia materna, aspectos metodológicos
M.T. Hernández Aguilar 427
INDICE DE MATERIAS 439
13. Introducción
En 1995 el Prof. Peña Guitián, enton- hospitales o áreas de salud en las que se
ces Presidente de la Asociación Española habían desarrollado labores de promoción
de Pediatría (AEP), pidió a algunos pedia- de la lactancia, y se recomendaba crear un
tras que habíamos trabajado en temas de grupo de expertos, que de forma seria y
lactancia materna, que hiciéramos un infor- fundada, fuera dando recomendaciones
me a la Junta Directiva, preparando un que pudieran ir corrigiendo poco a poco
proyecto “para impulsar la alimentación los errores cometidos.
al pecho en España”. El informe se hizo. El 15 de diciembre del mismo año, la
Entre las causas de la baja prevalencia de Junta Directiva decidía la creación de un
lactancia en España, hubo que reconocer Comité de Lactancia Materna, a propues-
que los pediatras habíamos tenido una par- ta del Prof. Moya, nuevo presidente de la
te importante de responsabilidad. A pesar AEP. El Comité no fue dotado de presu-
del apoyo teórico tradicional, la mayoría puesto económico, y por razones obvias,
no había sabido dar respuesta a las difi- su funcionamiento dependió, sobre todo,
cultades de las madres lactantes, para las del entusiasmo y la generosidad de los que
que el biberón terminaba siendo la única nos involucramos.
alternativa. También hubo que reconocer Los pasos del Comité fueron necesa-
que para muchos compañeros el manejo riamente lentos. Se enviaron textos breves
de la lactancia era considerado un tema con recomendaciones sobre lactancia a las
menor, al que no se le dedicaba la misma revistas nacionales de pediatría, se hicie-
atención que a otros capítulos “mas cien- ron cuñas radiofónicas, se diseñó una
tíficos”, y lo mas grave, que la mayoría no encuesta nacional sobre lactancia y se
eran conscientes de su falta de formación. publicó un informe técnico sobre lactan-
El informe dirigido a la Junta, también cia materna. Asesoramos a las publicacio-
se hacía eco de los avances logrados en los nes que nos pidieron consejo para editar
14. 2 Lactancia materna: teoría y práctica
folletos de lactancia. Sugerimos cambiar neonatales. Está claro que estos cambios
las recomendaciones oficiales de la AEP, también se deben al esfuerzo de otros gru-
para la asistencia a madres lactantes. En pos, pero en el Comité nos sentimos satis-
colaboración con varios gobiernos auto- fechos por nuestra aportación.
nómicos se publicaron recomendaciones Es justo recordar a los compañeros que
prácticas para el manejo de la lactancia en en algún momento formaron parte del mis-
las comunidades autónomas, y se diseña- mo y cuya colaboración nunca ha sido sufi-
ron programas autonómicos de promo- cientemente agradecida: Josefa Aguayo
ción. Creamos un Foro de preguntas y res- Maldonado, José Arena Ansótegui, Mar-
puestas para padres/madres y profesiona- garita Alonso Franch, José Mª Fraga Ber-
les, dentro de la página web de la AEP. Par- múdez, Jaime Dalmau Serra, Marta Díaz
ticipamos en los congresos nacionales de Gómez, Manuel García del Río, Adolfo
la AEP, con mesas redondas y talleres de Gómez Papí, Maite Hernández Aguilar,
trabajo. Colaboramos con la Sociedad Leonardo Landa Rivera, JuanJosé Lasar-
Española de Ginecología y Obstetricia, las te Velillas, Mª José Lozano de la Torre, Ana
Asociaciones de Matronas y de Enferme- Martínez Rubio, Vicente Molina Morales,
ras para organizar, por primera vez en Ana Muñoz Guillén, Manuel Pajarón Ahu-
España, un Congreso de Lactancia Mater- mada, José Mª Paricio Talayero, Isolina
na bajo el auspicio de la Iniciativa Hospi- Riaño Galán, Justino Rodriguez Alarcón,
tal Amigo de los Niños (IHAN). Además, Carmen Temboury Molina, y yo mismo.
hubo muchas iniciativas locales llevadas Hace un año, surgió la idea de reco-
adelante de forma individual por miem- pilar en un texto, lo que habíamos apren-
bros del Comité, como cursos de forma- dido en el trabajo diario con las madres
ción, talleres prácticos o reuniones con gru- lactantes. Desde el principio tuvimos cla-
pos de madres. Alguna de estas iniciativas ro que el libro sólo tendría éxito si era apo-
locales acabaron teniendo alcance nacio- yado por la AEP, y había compromiso para
nal y enorme utilidad; el programa de con- hacerlo llegar a la mayoría de los pedia-
sulta on-line sobre empleo de fármacos tras. El Presidente, Alfonso Delgado, no lo
durante la lactancia, desarrollado desde el dudó, se sumó al proyecto desde el princi-
Hospital de Denia, es el mejor ejemplo. pio y nos garantizó el respaldo de la Jun-
Sabiendo que introducir cambios en ta Directiva. A partir de ahí, el alma del
rutinas muy arraigadas no es fácil y suele libro ha sido Vicente Molina. A él le encar-
suscitar rechazo, el Comité ha tratado siem- gamos que coordinara la edición, y lo ha
pre de fundamentar científicamente sus hecho muy bien. Suyo es el mérito de la
recomendaciones y de evitar posturas agre- elección en la estructura de los capítulos,
sivas. Han pasado nueve años y las cosas la distribución de temas, el apremio para
han cambiado a mejor para la lactancia cumplir los plazos, y la supervisión gene-
materna. Los pediatras saben más de lac- ral.
tancia y en la mayoría de los hospitales Se optó por la elaboración indepen-
se han introducido cambios en las rutinas diente de los capítulos, aceptando las inevi-
15. Introducción 3
tables repeticiones e incluso puntos de vis- ser las únicas en responder a nuestra peti-
ta no concordantes, en favor de la plurali- ción de ayuda, sino por amoldarse a las
dad. Hemos buscado sobre todo un enfo- exigencias de edición para que el libro for-
que práctico (apartado B), pero sin renun- mara parte de las monografías de la AEP.
ciar a unos conocimientos teóricos básicos Puedo decir que la ejecución del libro
(apartado A) y a datos interesantes para ha sido nuevamente expresión del funcio-
entender la situación actual de la lactancia namiento habitual del Comité, una mues-
materna (apartado C y Anexos). Todos tra de entusiasmo y generosidad. Sólo con
hemos tratado de transmitir con la mejor ver el resultado en las manos, nos sentimos
voluntad lo que hemos aprendido, pero satisfechos, si además sirve para que los
somos conscientes de que puede haber pediatras mejoremos nuestra asistencia a
imprecisiones y lagunas. En algunos capí- las madres lactantes y que ellas y sus hijos
tulos se ha dado por supuesto que el libro disfruten, habremos cumplido nuestro obje-
va dirigido a profesionales con conoci- tivo.
mientos previos de anatomía y fisiología,
evitando explicaciones mas detalladas. Jesus Martín-Calama
Es de justicia reconocer el esfuerzo que Coordinador del
han hecho Medela y Prenatal, no sólo por Comité de Lactancia de la AEP
17. 1 Aspectos históricos de la alimentación
al seno materno
José María Paricio Talayero
LACTANCIA MATERNA, nutrición) y muy graves y posiblemente
LACTANCIA NATURAL. FACTORES no del todo conocidas en las sociedades
DE LA PÉRDIDA DE UNA CULTURA enriquecidas de la tierra (aumento de
enfermedades infecciosas e inmunitarias,
La lactancia materna es el fenómeno de consultas médicas y de hospitalizacio-
biocultural por excelencia. En los nes).
humanos, además de un proceso Aún queriendo y con más conoci-
biológico, la lactancia es un mientos, no es fácil enmendar el yerro pro-
comportamiento determinado por la ducido: en efecto, más de una generación
cultura. de mujeres no han amamantado a sus hijos,
Stuart-Macadam P, Dettwyler KA. interrumpiéndose la transmisión de cono-
Breastfeeding, Biocultural cimientos intergeneracional, perdiéndose
Perspectives, New York, 1995. una cultura.
Si todo en lactancia fuese instinto, no
En torno al inicio del siglo XX se ini- habría mayor problema, pero en ella hay
cia el mayor experimento a gran escala en un componente instintivo, fundamental-
una especie animal y sin comprobaciones mente de la parte del recién nacido (refle-
previas de los posibles resultados: a la jos de búsqueda y succión-deglución),
especie humana se le cambia su forma de unos reflejos sumamente eficaces en la
alimentación inicial: centenares de miles madre (la estimulación del pezón que pro-
de niños pasan a ser alimentados con leche voca aumento de las hormonas prolacti-
modificada de una especia distinta. Las na y oxitocina) y un importante compo-
consecuencias, que no se previeron, han nente cultural transmitido (la técnica o
sido desastrosas en el mundo expoliado arte femenino de amamantar, legado
(miles de muertos por infecciones y des- sabiamente de madres a hijas y que for-
18. 8 Lactancia materna: Guía para profesionales
maba parte del acervo cultural de la dominante acepte que todo lo artificial
humanidad, sin que los sanitarios tuvié- es mejor que lo natural, encuadrándo-
semos que intervenir en ello). Pues bien, se en esto la llamada “maternidad cien-
eso es lo que se ha perdido: la cultura del tífica”.
amamantamiento, de la crianza natural y, • Pensamiento feminista inicial con pre-
posiblemente, el vínculo afectivo natu- tensión de la mujer de todos los com-
ral entre madres e hijos. portamientos y valores del otro géne-
En esa pérdida intervienen fundamen- ro, incluso los perjudiciales para la
talmente tres componentes: especie. La lactancia artificial es con-
1. Modificaciones de la leche de vaca: siderada como una liberación.
hasta fines del siglo XIX poco se sabía de • Enormes intereses económicos indus-
la composición de la leche y de sus dife- triales.
rencias con las de otros mamíferos. Se • Una participación activa de la clase
conocen desde la antigüedad recipientes sanitaria, fundamentalmente, médi-
en forma de biberón que hablan de los ca, convencida inicialmente de las
intentos de alimentación de niños con maravillas de la maternidad científi-
leches de animales, pero no es hasta fina- ca aunada a una cierta prepotencia
les de 1800 en que el progreso de las cien- que negaba cualquier posibilidad de
cias, de la química en concreto, hizo que intervención válida de las propias
se empezasen a realizar modificaciones mujeres en su parto y en la crianza de
aceptables de la leche de vaca: hasta enton- sus hijos.
ces la mortalidad de niños alimentados 3. Desde hace millones de años, la espe-
con leches distintas a la de mujer era altí- cie a la que pertenecemos (homínidos)
sima (de orden superior al 90% en el pri- empezó a basar su triunfo adaptativo en
mer año de vida). una sutil y lenta modificación evolutiva de
2. Cambios sociológicos ocurridos en su cadera que le conduciría de la condición
la era moderna de la sociedad industrial a de cuadrúpedo a la bipedestación, con libe-
lo largo de los siglos XIX y XX, entre ración de sus patas anteriores: lo que en
ellos: términos adaptativos globales supone una
• La incorporación de la mujer al traba- mejora para la supervivencia de los homí-
jo asalariado hace ver el amamanta- nidos, hace que el parto, de poca distocia
miento como un problema, deriván- en los primates, suela necesitar asistencia
dose inicialmente (siglo XIX) hacia la en los humanos, convirtiéndolo en una acti-
lactancia mercenaria, que se extiende vidad social más que en un comporta-
hasta los estratos más humildes de la miento solitario. Esa asistencia, a lo lar-
sociedad y posteriormente (siglo XX) go del último siglo y según países, se vie-
hacia la lactancia artificial. ne prestando en hospitales coincidiendo
• Un cierto espíritu de modernidad con con la implantación de la maternidad cien-
creencia ciega en avances científico-téc- tífica y el predominio de alimentación arti-
nicos, que hace que el pensamiento ficial: una serie de rutinas erróneas han
19. Aspectos históricos de la alimentación al seno materno 9
sido difundidas por nosotros los sanitarios En 1974 la 27ª Asamblea Mundial de
y, la mayor parte de ellas, contribuyen a la Salud (AMS) advirtió el descenso de la
dificultar enormemente la lactancia mater- LM en muchos países del mundo y lo rela-
na (LM). cionó con la promoción indiscriminada de
Hoy día, sobre todo en los países ricos, sucedáneos industriales de LM, recomen-
no podemos invocar ni el feminismo, ni el dando a los estados miembros adoptar
trabajo asalariado de la mujer, ni la pre- medidas correctoras.
sión de la industria de sucedáneos como En 1978 la 31ª AMS volvió a reco-
excusa para no aumentar la prevalencia de mendar la regulación de la promoción de
la lactancia. Por otra parte, tras los desas- estos productos; en 1979 se realizó una
tres causados por empleo perverso de la Reunión Conjunta OMS/UNICEF Sobre
ciencia, lo artificial es denostado en bene- Alimentación del Lactante y del Niño
ficio de lo natural. Pequeño, y finalmente el 21.05.1981 se
Las primeras en reaccionar frente a esta aprobó el Código Internacional de Comer-
situación fueron las propias mujeres: cialización de Sucedáneos de Leche Mater-
• Cecily Williams, pediatra que descri- na, al que el Gobierno Español se adhirió
bió el kwashiokor en 1933, se oponía por medio de Real Decreto 12 años más
al uso generalizado de sustitutos de tarde (RD 1408/92 en BOE 13.01.93).
leche humana; en su conferencia Milk Desgraciadamente, la sola recomen-
and Murder, pronunciada en 1939 en dación de la OMS o la regulación estatal
el Singapore Rotary Club atribuye a no consiguieron modificar las tasas de LM
esa práctica miles de muertes de lac- en países con un producto interior bruto
tantes. alto, detectándose que, tanto la pérdida de
• En 1956, en pleno auge de la cultura la cultura social de la LM como los siste-
del biberón, un grupo de mujeres de mas sanitarios y los propios profesionales
Chicago fundan La Liga de la Leche de la salud, de modo inintencionado, por
(LLL) para dar apoyo personal a muje- su falta de preparación y conocimientos y
res que amamantasen. Hoy día consti- la aplicación de rutinas erróneas en pari-
tuye el más prestigioso grupo interna- torio, maternidad y salas de pediatría,
cional de apoyo a la lactancia. En Espa- constituían el mayor freno a la LM en paí-
ña existen más de 50 grupos de apoyo ses desarrollados, aumentando la morbi-
a la lactancia. Su éxito radica en la mortalidad infantil y el gasto sanitario en
atención personalizada con base tanto los mismos.
en la propia experiencia como en la for- Por ello, en 1989 OMS/UNICEF rea-
mación adquirida. lizan la Declaración conjunta sobre “Pro-
Los esfuerzos para promover la lac- tección, promoción y apoyo de la lactan-
tancia materna constituyen para la OMS cia materna. La función especial de los ser-
un elemento clave de los sistemas sanita- vicios de maternidad”, instando a que
rios dentro de su plan Salud para todos en todos los sectores de la sociedad, especial-
el año 2000. mente los padres, tengan acceso a educa-
20. 10 Lactancia materna: Guía para profesionales
ción sobre LM y reciban apoyo para poner- ¿POR QUÉ NOS LLAMAMOS
la en práctica. MAMÍFEROS?
En 1990 en la reunión conjunta
OMS/UNICEF en Florencia sobre “La lac- “Cuando se expulsa el feto a la luz
tancia materna en el decenio de 1990: una del día, éste mama la leche de los
iniciativa a nivel mundial” surge la Decla- pechos para nutrirse, sin que nadie se
ración de Innocenti instando a los gobier- lo enseñe. Las mamas están situadas
nos a adoptar medidas para conseguir una en el pecho y provistas de pezones.
“cultura de la lactancia materna”. Están formadas por un material
En 1991 comienza la INICIATIVA glandular que, mediante una fuerza
HOSPITAL AMIGO DE LOS NIÑOS, innata, convierte en leche la sangre
acreditación que concede OMS/UNICEF que las venas le envían”.
a hospitales que tras ser evaluados cum- Andreas Vesalio (1514-1564) De
plen una serie de requisitos: más del 75% humani corporis fabrica libri septem
de LM al alta en la maternidad y observar (Basilea, 1543)
10 pasos que gozan de evidencias cientí-
ficas para promover en frecuencia y dura- En 1758, el sueco Carl von Linné, pro-
ción la LM (Ver anexo 1). fesor de Medicina, catedrático de Biología
Los sanitarios, especialmente todos los y autor de la moderna taxonomía de los
que tratamos a diario con madres y niños, seres vivos, en la 10ª edición de su obra
debemos hacer un esfuerzo de humildad, Sistema Naturae, crea el término mam-
reconocer lo que no sabemos y aprender- malia (“de mamas”) para nombrar una cla-
lo, ya que tenemos la responsabilidad de se de vertebrados, entre los que nos encon-
informar, orientar, aconsejar y ayudar a tramos los humanos, caracterizados, entre
aquellas mujeres que libremente (es decir, otros hechos, por tener glándulas mama-
debidamente informadas) han elegido para rias.
sus hijos lo mejor: el producto y el calor Aunque algunos contemporáneos de
de su pecho. Linné como el naturalista Buffon se opo-
Hasta que las mujeres recuperen una nían al término, en el siglo XVIII el inte-
cultura pérdida, y sigan dando a luz en los rés por el pecho femenino entre los ilus-
hospitales y confiando en nosotros, los trados y las políticas que defendían la lac-
sanitarios tenemos la obligación de actua- tancia materna estaban tan en boga, que
lizar nuestros conocimientos teóricos y la nueva nomenclatura para el grupo de
prácticos para que todos trasmitamos una animales denominados cuadrúpedos por y
información validada y coherente a las desde Aristóteles (384 a 322 a.C.) ganó
madres que quieren amamantar a sus hijos, amplia aceptación.
para que puedan hacerlo el primer medio Esta denominación o sus variantes
año de forma exclusiva y como comple- (mammals, en inglés) ha sido adoptada en
mento el tiempo que ambos, madre e hijo, los países de habla inglesa mientras que tér-
deseen. minos significando “portador de mamas”
21. Aspectos históricos de la alimentación al seno materno 11
(mamífero, en español) se emplean en las mantar a sus hijos, fuese cuál fuese su cla-
lenguas romances y el que significa lite- se social, se conocen numerosos textos his-
ralmente “que maman” (Säugetiere), en ale- tóricos en los que se aprecia que en muchas
mán. civilizaciones, mujeres de distintas gene-
Pese a todo el cúmulo de pruebas en raciones y clases sociales no han ama-
pro de los beneficios de la lactancia mater- mantado a sus hijos.
na exclusiva, la prevalencia de la misma es Hay referencias antiquísimas al siste-
baja o muy baja en prácticamente todo el ma de amas de cría en dos códigos babi-
mundo, estimándola la OMS inferior al lónicos de las culturas paleo-semíticas de
50% en niños de hasta 4 meses en muchí- la antigua Mesopotamia: una de las Leyes
^
simos países. de Esnunna (final del siglo XIX a.C.) esti-
Esta situación, que se ha agravado a lo pula el pago debido a la nodriza, y el Códi-
largo de la segunda mitad del siglo XX con go de Hammurabi, unos treinta años pos-
la sustitución indiscriminada de la lactan- terior al anterior, contiene una disposición
cia natural por fórmulas derivadas de leche sobre las nodrizas; el hebreo Jeremías se
de vaca, es en realidad, nueva en el devenir lamenta en el 600 a.C. que las mujeres de
de la humanidad: desde el principio de los la época sean peores que chacales por no
tiempos y hasta hace menos de 150 años la amamantar a sus hijos y se pueden encon-
inmensa mayoría de recién nacidos huma- trar hasta diez referencias en nueve libros
nos habían sido alimentados con leche de diferentes de la Biblia judeocristiana y una
la propia especie, sea de sus madres, sea de en el Nuevo Testamento sobre las amas de
mujeres contratadas para tal fin. cría.
Las nodrizas eran muy comunes en la
Grecia clásica, siendo preferidas a las pro-
LACTANCIA MERCENARIA. pias madres por Platón (427-347 a.C.), y
LAS NODRIZAS EN LA HISTORIA a las mejores se las tenía en gran conside-
ración; Aristóteles (384-322 a.C.) en su
“¿Quieres que yo vaya y llame una Historia Animalium se interesa por la lac-
nodriza de entre las hebreas para que tancia y describe métodos para determinar
te críe este niño?”. “Ve”, le contestó si la leche de una mujer, sea la propia
la hija de Faraón. Fue, pues, la joven madre o de una nodriza es apta para el lac-
y llamó a la madre del niño. Y la hija tante, llegando a la conclusión de que la
de Faraón le dijo: “Toma este niño y leche de los primeros días o calostro no
críamelo que yo te pagaré.” debe ser consumida por el recién nacido.
La Biblia. Éxodo 2: 7-9 La mayoría de mujeres nobles del Impe-
(siglo IX a.C.) rio romano recurrían a nodrizas para ama-
mantar a sus hijos. Sorano de Efeso (98-
Dejando aparte algunas culturas como 138 d.C.), en Gynecia, tratado de referen-
la espartana clásica, en la que existían leyes cia de la Ginecología y la Obstetricia
que obligaban a todas las mujeres a ama- durante más de 1.500 años, describe minu-
22. 12 Lactancia materna: Guía para profesionales
ciosamente las condiciones de elección de clase humilde) amamantaban a más de una
una buena nodriza, su dieta, régimen de criatura a la vez: la suya propia y la deja-
vida y formas de lactar. Pese a ello, la con- da a su cuidado. Teniendo en cuenta el efec-
sideración de una buena madre en la Roma to anticonceptivo de la lactancia, las cla-
Imperial era aquella que amamantaba a ses populares tenían una fecundidad limi-
sus hijos. tada por término medio a un nacimiento
A partir del siglo VII podemos encon- bianual, lo que ha podido constituir un
trar referencias al sistema de amas de cría efectivo control de natalidad entre las
hasta en tres suras distintos del Corán, y masas campesinas de la Europa preindus-
en España en las Partidas de Alfonso X trial. Por el contrario, la fecundidad no
el Sabio (1221-1284) se recogen las con- controlada por lactancia entre las clases
diciones que deben reunir las nodrizas rea- acomodadas hace que la descendencia pue-
les. da suponer de 15 a 20 hijos, pero a expen-
En la Francia de los siglos XIII al XIX sas de una terrible mortalidad.
las mujeres de clases media y alta no ama- En Francia, lo que en el XVI era una
mantan a sus hijos, haciéndolo por medio práctica exclusiva de la aristocracia, se
de nodrizas, leches de diversos animales extiende en el XVII a la burguesía y alcan-
y preparados de cereales. Ambroise Paré za en el XVIII a las clases populares: unas
(1509-1590), el médico francés más famo- y otras mujeres dependen de la leche de
so de su época, titula un capítulo de una pago, las de clase social baja para poder
de sus obras Acerca de los senos y el pecho trabajar y las de clase alta para atender sus
de la nodriza y una discípula suya, Louise numerosas obligaciones sociales. En 1780,
Bourgeoise publica en 1609 el primer libro de 21.000 niños nacidos en París, 1.801
francés sobre obstetricia escrito por una son amamantados por sus madres, 19.000
matrona, en el que explica los consejos por una nodriza en el domicilio familiar,
para la elección de una buena nodriza. nourrice sur lieu, o en la inclusa y 199 en
En Florencia, hacia 1300, en franco casa de una nodriza, generalmente en el
contraste con la moda extendida del géne- campo.
ro pictórico de la Madonna del latte (Vir- En este país el sistema de nodrizas
gen de leche) que exalta claramente las vir- alcanza enormes proporciones, siendo el
tudes de la lactancia materna y el vínculo único de Europa que reglamenta oficial-
materno-filial establecido por medio de mente la lactancia mercenaria, conocién-
ella, se extiende la costumbre de enviar a dose legislación al respecto desde 1284; en
los niños de las clases noble y media urba- el siglo XVIII se desarrollan disposiciones
nas con una balia o nodriza al campo para proteger a los niños amamantados
durante un promedio de 2 años. por nodrizas y garantizar la remuneración
La lactancia mercenaria se extiende de de las mismas y en 1769 se crea en París el
tal manera durante el Renacimiento en Bureau des Nourrices, Oficina de Nodri-
Europa, pero sobre todo en Francia e Ita- zas, dependiente del gobierno, que, entre
lia, que la mayoría de mujeres (las de la 1770 y 1776 recluta 15.000 amas de cría,
23. Aspectos históricos de la alimentación al seno materno 13
constituyendo una próspera industria que contribuyen a la desaparición de la lac-
persiste hasta finales del siglo XIX. tancia mercenaria a partir de 1900, si bien
En Inglaterra, en 1700, menos del 50% el modelo persistió aisladamente mucho
de niños eran criados a pecho por sus tiempo después: el primer banco de leche
madres y existe una precisa denominación humana data de 1910 en Boston, hubo
en inglés para nodrizas que lactan (wet nur- nodrizas internas para niños hospitaliza-
se) y para las que no (dry nurse). dos en la maternidad del hospital francés
En los siglos XVI y XVII los Países de Baudelocque hasta 1946 y se encuen-
Bajos constituyen la excepción al fenóme- tran partidas para gastos de nodrizas en el
no de lactancia mercenaria del resto de presupuesto de muchas clínicas suecas has-
Europa: una moral hogareña y reivindica- ta 1950.
dora de lo natural promovida por los pode- La mortalidad infantil bajo el sistema
res públicos presenta a la buena madre de nodrizas era muy elevada: en el siglo
como aquella que amamanta a sus hijos; XVIII la tasa de mortalidad infantil (muer-
se cree por ello que hay menos nodrizas y tos menores de un año por mil nacidos
menor mortalidad infantil que en los paí- vivos) era de 109 en los niños amaman-
ses vecinos durante ese período. tados por sus madres, de 170 en los ama-
En pleno siglo XVIII, en los periódicos mantados por nodriza a domicilio, de 381
españoles, a la vez que se previene de los cuando la nodriza se los llevaba a ama-
peligros que acarrea el empleo de amas de mantar en su casa y de 500 a 910 en los
leche, aparecen abundantes anuncios de alimentados por nodrizas en la inclusa.
ofertas de nodrizas, constituyendo más de Argumentos sin fundamento científico
la cuarta parte de anuncios de ofertas de acerca de características físicas (parecido,
puestos de trabajo. posibles enfermedades) y espirituales
En el siglo XIX en Rusia, a excepción (carácter, personalidad) transmitidas por
de la nobleza, que sigue las costumbres la leche, junto a las alarmantes cifras de
francesas, la mayoría de niños son ama- mortalidad descritas, hacen que médicos,
mantados por sus madres. También en humanistas, filósofos, sacerdotes, mora-
Norteamérica y desde el siglo XVII, la listas, científicos y políticos de toda Euro-
mayoría de mujeres lactaban a sus hijos, pa hayan clamado en los últimos seis siglos
no siendo frecuente el sistema de crianza contra la lactancia mercenaria:
por nodriza, mientras que en Alemania • En el siglo XV, el franciscano San Ber-
todavía en el siglo XIX era generalizado el nardino de Siena y el español Antonio
empleo de amas de cría y raro que una de Nebrija.
madre cuidase por sí misma a sus hijos. • A lo largo de los siglos XVI y XVII,
A partir de 1890, el desarrollo de diver- Erasmo de Rotterdam, Juan Luis Vives,
sas mejoras en la fabricación y conserva- el obstetra Jacques Guillemeau y el
ción de leche artificial va desplazando poco obispo protestante checo y pedagogo
a poco este sistema de crianza. Los descu- Comenio; Thomas Phaer en su Boke
brimientos de Louis Pasteur (1822-1895) of Children de 1544 aconseja ama-
24. 14 Lactancia materna: Guía para profesionales
mantar a los propios hijos y para el sus hijos, ha tenido tan poca influencia, en
también médico Ambroise Paré (1510- especial entre las clases acomodadas, fun-
1590) una mujer no es madre si no pare damentalmente urbanas.
y amamanta. Toda una serie de creencias populares
• En el siglo XVIII el novelista Daniel y erróneas teorías, muchas de ellas sus-
Defoe, el Dr. William Cadogan (Essay tentadas por los mismos médicos que apo-
upon Nursing) y Carl von Linné, padre yaban la lactancia materna, además de una
de 7 hijos, en su obra Nutris Noverca serie de factores socioeconómicos y reli-
de 1752. En España, Jaume Bonells, giosos, modas y estilos de vida, contri-
médico de la casa de Alba es conside- buyeron a un rechazo de la lactancia
rado el promotor de la puericultura materna entre las clases medias y altas de
científica en nuestro país por su obra muchos países de la Europa de los siglos
Perjuicios que acarrean al género XV a XIX:
humano y al Estado las madres que • Hipócrates (s. V a.C.) afirma que la
rehúsan criar a sus hijos y medios para leche del pecho es una modificación de
contener el abuso de ponerlos en ama, la sangre menstrual del útero, que lle-
publicada en 1786 por influencia de la ga allí mediante conexiones internas
propia duquesa. entre ambos órganos. Esta idea subsis-
Pero es en Francia donde surge la prin- te sin que nadie la ponga en duda has-
cipal y más influyente campaña contra la ta bien entrado el siglo XVII. La noción
lactancia mercenaria de manos del filóso- de indecencia, impureza o indecoro de
fo Jean Jacques Rousseau (1712-1778) la menstruación, sustentada en varias
quien, en franco contraste con haber aban- culturas por las grandes religiones
donado a sus cinco hijos en un hospicio, monoteístas, es mantenida hasta bien
en Emile, ou De l’éducation de 1762 afir- entrado el siglo XX por la llamada
ma que la lactancia materna une con fir- Medicina Pastoral.
meza a madres e hijos, cohesiona la fami- • Desde Sorano de Efeso (s. II d.C.) exis-
lia y proporciona los fundamentos para la te la creencia de que la lactancia debi-
regeneración social. lita a las madres y puede ser peligrosa
La pasión que Rousseau inspiró por la para su salud, especialmente el primer
lactancia traspasó barreras sociales y polí- mes.
ticas así como fronteras nacionales: ade- • Durante los siglos XVI a XVIII, el
más de en Francia, en Alemania se pro- canon de belleza imperante exige a las
mulgaron a finales del XVIII leyes y ayu- mujeres unos pechos pequeños y un
das económicas en pro del amamanta- poco moderado sobrepeso, ambos
miento de los propios hijos. hechos reñidos con la práctica de lac-
Resulta, pues, interesante analizar por- tancia. La moda dominante de vesti-
qué la opinión de tantos pensadores, médi- dos muy ajustados, poco prácticos
cos o no, que desde la antigüedad clásica para acceder al pecho y los corsés
han urgido a las madres a amamantar a ceñidísimos que, desde la infancia,
25. Aspectos históricos de la alimentación al seno materno 15
aplastaban el pecho, deformando el leche la madre, purgar a la madre o
pezón, no contribuían a mejorar la nodriza si el lactante está enfermo o
situación. el antiquísimo tabú del calostro: no
• El alto índice de mortalidad infantil de administrarlo por considerarlo vene-
la época lleva a la necesidad en las fami- noso o impuro. La mayoría de los lla-
lias de conseguir un número elevado de mados pueblos primitivos actuales, a
vástagos de los que sólo sobrevivirá un excepción de las mujeres maoríes, que
pequeño porcentaje que asegurará la amamantan desde el primer momen-
economía familiar y la transmisión del to, esperan unos días a dar pecho.
apellido. Era conocido en la época Algunos autores, a la vista de todo
cómo la lactancia materna aumentaba ello, aventuran que la rutina de admi-
el intervalo entre los embarazos, dis- nistrar inicialmente suero glucosado
minuyendo por tanto el número de hijos a los recién nacidos sería una remi-
posibles. niscencia de este erróneo tabú ances-
• Es Galeno (s. II d.C.) el primero, pero tral.
no el último médico conocido, que • La ambigüedad del discurso sea médi-
proscribe las relaciones sexuales duran- co, científico o meramente el emitido
te el período de lactancia. La idea por la “autoridad” del momento que,
extendida era que se corrompía la tras reconocer casi unánimemente que
leche, por lo que se recomendaba una la lactancia por la propia madre es lo
abstinencia absoluta durante el tiem- preferible, describe toda una retahíla
po que durase el amamantamiento. de circunstancias de índole física, social,
Esta creencia se mantenía vigente en el sexual o de pura conveniencia que lle-
siglo XVII y, falta de pruebas pero sutil- va a prohibirla y recomendar un ama
mente modificada, alcanza el siglo XX de cría, convirtiéndose el médico en
en los prontuarios cristianos de Medi- el garante de la adquisición de una bue-
cina Pastoral. na nodriza.
• A lo anterior se añade el que la dura- Todos estos factores contribuyen a
ción media recomendada de la lactan- crear una baja opinión social del ama-
cia materna en los textos legislativos mantamiento, al que se le considera indig-
tradicionales o religiosos como el Tal- no, vergonzoso, propio de clases inferio-
mud (siglos III a.C. a VI d.C.) o el res o de animales. Además, como tantas
Corán y en los escritos de Aristóteles, otras cosas, la decisión de si los propios
Sorano o Galeno era de un mínimo de hijos serán o no amamantados por su
24 meses. madre es prerrogativa del marido, quien,
• Unas normas dietéticas carentes de por mor de bastantes de los puntos enun-
fundamento y perjudiciales para la ciados, se suele oponer. De esta manera, en
salud de madres y niños, vienen a difi- la Europa de estos siglos se pone de moda
cultar y desacreditar más aún la lac- la lactancia mercenaria por medio de nodri-
tancia materna: prohibición de beber zas o madres de leche, siendo las mujeres
26. 16 Lactancia materna: Guía para profesionales
del pueblo llano las únicas que amaman- viar la congestión mamaria). Sorano de
tan a sus hijos y, mediante transacción eco- Efeso (s. II d.C.) recomienda la leche de
nómica, a los hijos de las clases acomoda- cabra para niños que no puedan ser cria-
das. dos a pecho.
Las altas tasas de mortalidad infan- En Europa el empleo de cuernos como
til derivadas de esta práctica obligaron biberones está bien documentado desde
a la creación de un sistema de legislación comienzos de la Edad Media, enumerán-
extremadamente minucioso de la lactan- dose entre los útiles habituales de la nodri-
cia mercenaria, que no podía impedir sin za junto a pañales, fajas y baberos en un
embargo la extrema rotura del vínculo poema del siglo XII.
materno filial, por no decir la carencia No se conocen textos médicos que des-
total del mismo que este régimen impli- criban la alimentación infantil desde los
caba, pese a que ya el griego Plutarco de tiempos antiguos hasta el Renacimiento. Se
Queronea (46-120 d.C.) en su Moralia creía que la leche de animales (al igual que
(Obras morales y de costumbres), había la de la nodriza) podía transmitir al niño
subrayado las ventajas afectivas de la lac- los caracteres de estos, por lo que no se con-
tancia materna: “...esta convivencia en la sideraba tolerable. Hay que esperar a 1472
alimentación es un vínculo que refuerza para que Bagellardo, además de referencias
el afecto...” respecto a la elección de nodrizas, dé nor-
mas sobre alimentación artificial.
En 1565, Simon de Vallembert en De
ALIMENTACIÓN DE LACTANTES la manière de nourrir et gouverner les
CON LECHE DE ANIMALES enfants des leur naissance, recomienda
administrar leche de vaca o cabra en un
(Una loba sedienta de los montes cuerno a partir del tercer mes y se opone
cercanos se desvió hacia el llanto de a la antigua costumbre de alimentar a los
los niños y, con mansedumbre, se niños con comida masticada por la madre
inclinó sobre ellos y les ofreció sus o nodriza por considerar que es fuente de
mamas) infecciones por gusanos.
Tito Livio (s. I a.C.) Ab Urbe A lo largo del siglo XVIII, las expe-
Condita (Historia de Roma desde su riencias de alimentación artificial de lac-
fundación) tantes en medio institucional fueron desas-
trosas, paradigma de lo cual fue el hospi-
La alimentación artificial de lactantes cio de Rouen, en el que entre 1763 y 1765
es conocida desde antiguo, encontrándose sólo sobrevivieron 5 niños de un total de
en yacimientos arqueológicos desde 2.000 132 internados. Será preciso ampliar el
años a.C. numerosas vasijas con boquilla conocimiento de la composición bioquí-
que probablemente servían de biberón para mica de la leche de mujer para poder mejo-
niños pequeños (investigaciones recientes rar estos resultados; el británico Under-
propugnan que eran sacaleches para ali- wood en 1799 y el alemán Simon en 1838
27. Aspectos históricos de la alimentación al seno materno 17
llevan a cabo análisis químicos detallados después de la de mujer, se sitúan por orden
de la leche. Hay que tener en cuenta que de adecuación a las necesidades nutritivas
hasta entonces la única aproximación a las del niño, la de cabra, la de asna y, en últi-
características o composición de la leche de mo lugar, la de vaca; pero son precisamente
mujer consistían en el clásico y absoluta- las modificaciones de la leche de este últi-
mente carente de rigor científico test de la mo animal, en especial la dilución, la adi-
uña, primeramente descrito por Sorano en ción de azúcar y las ebulliciones repeti-
el siglo II d.C. das las que permiten a esta industria tener
El Dr. George Napheys (primer con- una creciente prosperidad. La pasteuriza-
tradictor de Aristóteles en cuanto al calos- ción vuelve más segura la leche embote-
tro), observa que la mortalidad en las inclu- llada y hace que el biberón vaya hacién-
sas francesas, en las que se criaba a los dose popular en las ciudades de Inglaterra,
niños con mezclas artificiales de leche y aunque se introduce muy escasamente en
sopas de pan, panade, eran muy superio- el ambiente rural.
res, 500 a 800 por mil, a las que presen- Pese a que algunos médicos como Pie-
taban inclusas en las que habitualmente rre Budin (1846-1907), pioneros de la
eran amamantados por nodrizas: 337 a medicina perinatal, recomendaban la lac-
350. En los hospicios de Nueva York, la tancia materna para disminuir una mor-
mortalidad con leche artificial era cercana talidad infantil en torno al 300 por 1.000
al 100%. a finales del siglo XIX, el desarrollo de una
Desde antiguo era conocido el fracaso industria química cada vez más científica-
irremediable de la alimentación con leche mente preparada, una competencia comer-
de animales que acababa casi indefecti- cial por un mercado, el de la alimentación
blemente con la muerte del lactante; el mis- infantil, que ofrecía pingües beneficios (quí-
mo Tito Livio, que fija por escrito la his- micos y comerciantes, como Henri Nestlé,
toria de Rómulo y Remo, cree que es una entran en el campo de la alimentación
leyenda originada por el equívoco nombre infantil, inicialmente reservado a los médi-
latino de la profesión a que se dedicaba la cos) y una ideología dominante que ensal-
mujer del pastor que los recogió (lupa, zaba el progreso y la tecnología vinieron a
loba, y también cortesana, prostituta). La preconizar la “maternidad científica”, uno
leche de cánidos como la loba contiene de cuyos paradigmas era la lactancia arti-
unas diez veces más proteínas y unas 5 ficial, convenciendo incluso a los profe-
veces más minerales que la de mujer, lo que sionales sanitarios: la ciencia de la nutri-
supone una carga renal de solutos aún más ción desarrolla tal dependencia del cálculo
insoportable para el lactante humano y su y la medición, que lleva a la falsa creencia
supervivencia que la de la leche de vaca. entre población y profesionales de que lo
Durante el siglo XIX todos los trata- industrial es más perfecto que lo natural
dos médicos convienen en afirmar la supe- porque se puede medir, pesar, calcular
rioridad de la leche de mujer sobre la de “científicamente”. El mismo Budin en
cualquier animal. Se suele reconocer que, Francia, Biedert y Heubner en Alemania y
28. 18 Lactancia materna: Guía para profesionales
Meigs y Roth en Estados Unidos, figuran El mismo año, el New Internationalist,
entre los promotores de bases científicas revista mensual de dos organizaciones de
para modificar la leche de vaca y hacerla caridad británicas, OXFAM y Christian Aid,
digerible para los lactantes humanos. Des- publica un artículo, The baby food tragedy,
de entonces (finales del siglo XIX), la com- en el que se acusa a los fabricantes de suce-
petencia por dominar el mercado de las dáneos de ser responsables directos de miles
madres que no amamantan se ha hecho de muertes de niños en países subdesarro-
despiadada. llados, por el consumo generalizado de sus
Los avances obtenidos en las últimas productos tras prácticas de comercialización
décadas en la composición de leches para inapropiadas. Era la primera vez que se acu-
lactantes a partir de modificaciones de leche saba públicamente a compañías considera-
de vaca han conseguido productos que, das hasta entonces modelo de progreso médi-
aunque desprovistos de las propiedades co. Meses después se publica el libro The
inmunitarias de la leche materna, son quí- baby killer en el que M. Muller, periodista
micamente similares a ella, y administra- de otra organización de caridad británica,
dos a lactantes en condiciones culturales War on Want, insiste en las críticas a los
(bien preparados), económicas (en canti- métodos de comercialización; su libro es
dad suficiente) e higiénicas adecuadas, sue- publicado en Suiza y Nestlé demanda judi-
len conseguir resultados nutricionales satis- cialmente a los editores por calumnia.
factorios de entrada y alejados de los pal- En 1975 las principales compañías del
mariamente catastróficos descritos en siglos mundo quizás no sintiéndose bien repre-
anteriores, si bien las consecuencias en sentados en el PAG, crean un consejo pro-
muchos aspectos a largo plazo siguen sien- pio: el International Council of Infant Food
do desconocidas y probablemente no ópti- Industries (ICIFI)
mas. En 1977 se crea el Infant Formula
Los intentos de regulación del merca- Action Coalition (INFACT), vinculado al
do de comercialización de sucedáneos arti- Instituto para el tercer mundo de la Uni-
ficiales merecen un pequeño comentario: versidad de Minesota, para frenar la expan-
En 1972 la Unión Internacional de sión del mercado de fórmula infantil. Se
Consumidores (IOCU) presentó a la inician campañas de boicot a diversas
FAO/OMS un proyecto en borrador del industrias (Bristol Myers, Nestlé), dentro
Código para regular las prácticas de comer- y fuera de EE.UU. El senador E. Kennedy,
cialización de alimentos infantiles. en plena campaña electoral se interesa por
En 1973 el Protein Advisory Group el tema y, no logrando acuerdos con las
(PAG), creado por OMS, FAO y UNICEF, casas comerciales en audiencias del Sena-
tras varios encuentros entre gobiernos, pro- do de EE.UU., solicita la formalización por
fesionales de salud y representantes de la parte de la OMS de un código ético de
industria de fórmulas de alimentación comercialización.
infantil, definió en su informe número 23 Tras más de dos años de negociaciones
el papel de las tres partes implicadas. entre representantes gubernamentales, sani-
29. Aspectos históricos de la alimentación al seno materno 19
tarios, de la industria y grupos activos ciu- • Las madres reciben revistas, folletos,
dadanos (entre ellos, el International Baby libritos y otros materiales promocio-
Food Action Network (IBFAN) creado en nales en establecimientos de salud, en
1979 y que aglutinaba a INFACT y otros tiendas y por correo.
grupos de presión) en 1981 se aprueba por • Siete compañías utilizan “clubes para
118 votos a favor, 3 abstenciones y 1 voto bebés” como estrategia para llegar a
en contra (el de EE.UU.) el Código Inter- las madres y promocionar sus produc-
nacional de Comercialización de Sucedá- tos.
neos de Leche Materna, conjunto de reglas • Varias compañías patrocinan sitios Web
destinadas a proteger la lactancia materna públicos de temas de salud o médicos,
de las prácticas comerciales poco éticas. Su a través de los cuales promocionan sus
preámbulo declara que “la comercialización productos o enlazan con el sitio de la
de los substitutos de la leche materna requie- compañía.
re un tratamiento especial que hace inade- • Ninguna compañía respeta las dispo-
cuadas en el caso de esos productos las prác- siciones del Código sobre el etiqueta-
ticas habituales de comercialización”. do de sus productos (imágenes de
En 1990, la Asamblea Mundial de niños, idioma diferente al del país, eti-
Salud de la OMS recomienda a todos los quetas similares en leches de inicio que
gobiernos adoptar el Código. de continuación, multiplicidad de fór-
Pese a que las casas comerciales aglu- mulas especiales, etc.).
tinadas desde 1985 en la Internacional • Hay un incumplimiento sistemático del
Association of Infant Food Manufactures Código.
(IFM) tiene su sistema propio de control
de denuncias de violaciones del Código por
parte de los fabricantes, estas, muy fre- DURACIÓN DE LA LACTANCIA.
cuentes, vienen recogidas en informes DE LA PREHISTORIA AL SIGLO XIX
periódicos (Violando las reglas) por IBFAN
a través del grupo Baby Milk Action “Hijo, ten compasión de mí que te
(BMA). El infome de 2001 declaraba que: llevé en el seno por nueve meses, te
• Los establecimientos de salud siguen sien- amamanté por tres años y te crié y
do el canal más usado y eficaz de las eduqué hasta la edad que tienes”
compañías para llegar a las madres. La Biblia, Segundo libro de los
• Casi todas las empresas donan gratis Macabeos, 7: 27. (124 años a.C.)
fórmulas infantiles a los estableci-
mientos de salud. Durante la mayor parte de la historia
• Casi todas las empresas donan gratis del género humano, no ha habido sustitu-
fórmulas infantiles a los trabajadores to eficaz para la leche materna. En el papi-
de salud. ro egipcio encontrado en Tebas por Ebers,
• La promoción dirigida a trabajadores perteneciente al principio de la XVIII dinas-
de salud, suele llegar a las madres. tía (1587-1328 a.C.), se describen méto-
30. 20 Lactancia materna: Guía para profesionales
dos para estimular el flujo de leche en muje- gresivo hasta los tres años y en los papiros
res lactantes y para saber si la leche es bue- egipcios se podía leer: “cuando naciste ella
na o mala. Hasta bien entrado el siglo XX, te llevó a su cuello y durante tres años te
la elevada mortalidad que acompañaba a amamantó”. Similar tiempo se recoge en
la alimentación artificial hace que el pecho Grecia del siglo IV a.C. y en el Imperio
de la mujer (madre o nodriza) signifique la romano en las cuatro primeras centurias
diferencia entre la vida y la muerte para el de nuestra era.
recién nacido y el lactante pequeño, hacien- La cita introductoria de este capítulo
do del amamantamiento un hecho esencial hace pensar que entre los judíos del segun-
para la supervivencia de la especie. do siglo antes de Cristo no sería rara una
Basándose en diversos patrones de pri- lactancia de 3 años y en el Talmud se reco-
mates no humanos, la edad de destete natu- mienda una duración de 24 meses. Encon-
ral correspondiente a los humanos estaría tramos en la Europa carolingia de los siglos
entre los dos años y medio y los siete años. VIII a X una lactancia media de 2 años y
Muchos grandes mamíferos, incluidos los en la época feudal (siglos XI a XIII) de 18
grandes primates, destetan cuando la cría meses. En el sur de Francia en el siglo IX
alcanza el cuádruple de su peso al nacer (24 hay datos para saber que en familias cam-
a 30 meses en humanos) o cuando alcanzan pesinas se destetaba a los niños a los 2 años
el tercio del peso de un adulto (4 a 7 años y a las niñas al año. En todas clases socia-
en humanos) o en función del peso de una les la lactancia se complementaba a menu-
hembra adulta (2,8 a 3,7 años en humanos) do y pronto con papillas de pan y leche de
o 6 veces el período de gestación (4,5 años animales o agua.
en humanos) o al erupcionar los primeros Desde el siglo VII el Islam prescribe un
molares permanentes (5,5 a 6 años). amamantamiento de 2 años “completos”,
Se sabe que el tiempo de lactancia en lo que recomienda el médico persa Avice-
los humanos ha permanecido hasta hace na (Ibn Sina, 980-1037) cuatro siglos des-
menos de 100 años, e incluso hasta hoy en pués. El mallorquín Ramón Llull (1233-
algunas regiones del mundo, estabilizado 1315) en su Libre d’Evast e d’Aloma e de
entre los 18 meses y los 3 años de vida, y Blanquerna preconiza un año de alimen-
ello desde tiempos prehistóricos o históri- tación al pecho, sea de madre o, en su
cos muy antiguos, con introducción de otros defecto, de “nodriza sana”.
alimentos (leche de cabra o vaca, maíz) De nuevo en Francia, en el siglo XV los
entre los 6 y 24 meses según culturas. datos apuntan a lactancias de 2 a 3 años y
Cifras similares se mantienen en la en el siglo XVI el obstetra francés Jacques
Mesopotamia del segundo milenio a.C. (la
^ Guillemeau (1550-1613) en su obra De la
ley 32 del Código de Esnunna establece un nourriture et gouvernement des enfants
contrato con la nodriza de tres años); en recomienda que se inicie el destete hacia
la India del período Ayurvédico (1800 a los 15 meses y se acabe entre los 2 y 3 años,
1500 a.C.) se recomienda una lactancia cuando toda la dentición temporal haya
exclusiva durante un año con destete pro- erupcionado. En las clases altas el destete
31. Aspectos históricos de la alimentación al seno materno 21
solía ser brusco, mientras que entre el cam- experimento sin controles del
pesinado o clases bajas era progresivo y la mundo.
lactancia se prolongaba más tiempo. Profesor Bo Vahlquist, 1981
En el siglo XVI el escritor valenciano A lo largo del siglo XX se han conoci-
Joan Timoneda nombra dos años de ama- do prácticas de crianza de diversos pueblos
mantamiento, al igual que en las ciudades que históricamente han mantenido poco
del territorio que hoy es Italia central y contacto con la civilización predominante
septentrional en que los niños de clase y gracias a la literatura etnográfica pode-
media eran amamantados un promedio de mos saber que la duración media de ama-
2 años en los siglos XIV a XVI. En Ingla- mantamiento es de tres a cuatro años en
terra en los siglos XV y XVI los niños reci- sociedades tradicionales en las que no se
bían exclusivamente leche hasta que les ha diseminado el uso de fórmulas artifi-
salían los primeros cuatro dientes y gene- ciales de leche, variando la edad de inicio
ralmente eran destetados hacia el año de de la alimentación complementaria desde
edad. En América del Norte en el siglo los cuatro meses de los hotentotes africa-
XVII los niños mamaban hasta los 12 o nos, pasando por el año de pueblos de
18 meses y en la Rusia Imperial de los Samoa, los uno a dos años de tribus arme-
siglos XVIII y XIX, aunque la gran mayo- nias, los dos a tres años de aborígenes aus-
ría eran criados a pecho, desde las prime- tralianos, tres a cuatro de habitantes de
ras semanas ya se les administraban otros Groenlandia, cinco años en pueblos
alimentos y al año comían lo mismo que hawaianos y los siete años de ciertas pobla-
sus padres. ciones esquimales. En las últimas décadas,
El desarrollo de la dentición ha sido un en regiones de Sudamérica el destete suele
factor decisivo tanto en la introducción de hacerse a los 2 años y en el mundo árabe
alimentos distintos de la leche materna la media es de 18 meses, con cifras desde
como en el destete definitivo, que en 14 meses en Siria a 19-20 meses en Mau-
muchas sociedades han venido condicio- ritania y Egipto; en países africanos hay
nados respectivamente por la aparición de amplias variaciones entre los 21 meses de
los primeros dientes en el segundo semes- Gambia y los 42 de Costa de Marfil. En
tre y su erupción total hacia los dos años. 1989 de 46 sociedades no industrializadas
del mundo el destete ocurría entre los 2 o
3 años de edad en el 75% de ellos, y a los
LA LACTANCIA EN EL SIGLO XX 18 meses en el resto.
Pese a que desde el Estado con relati-
.... al doblar el siglo (XIX) se habían va frecuencia se ha hecho promoción acti-
puesto los cimientos para la va de la lactancia (las leyes prusianas de
alimentación sistemática de lactantes principio de siglo XX promoviendo la lac-
con leche distinta de la humana.... La tancia y actualmente el gobierno de Qué-
alimentación artificial temprana de bec que paga primas a las madres que ama-
los lactantes constituye el más vasto mantan, o el consentimiento informado
32. 22 Lactancia materna: Guía para profesionales
69
63
55 53
Nacimiento
44
40 40 38
3 meses
24
22
20 20
6 meses
16
10
7 7
5
3
1910 1920 1930 1940 1950 1960 1970 1980 1990
Figura 1. Porcentaje de niños con lactancia materna al nacer, 3 y 6 meses. EE.UU., 1910-1990.
que tienen que firmar las madres en Tas- sido intrínsecamente hostil a la lactancia,
mania si quieren alimentar a sus hijos con incluyendo la detención de mujeres por
lactancia artificial, durante el siglo XX han amamantar en público acusándolas de
ocurrido grandes cambios en la forma de exhibicionismo: hasta bien entrada la déca-
alimentación de los lactantes en práctica- da de 1990, en varios estados no se apro-
mente todo el mundo, pero de modo más baron leyes que permitiesen hacerlo.
generalizado en los países desarrollados. Al principio de la década de 1990,
Estados Unidos de Norteamérica prácticamente en toda Latinoamérica, más
podría ser un paradigma de este fenóme- del 95% de niños eran amamantados en
no, como vemos en la figura 1, elaborada algún momento, pero las cifras de lactan-
a partir de datos de la literatura. En 1979, cia materna exclusiva (LME) hasta los 4
el 29% de los recién nacidos en los Hos- meses, aunque altas para otras regiones,
pitales de Nueva York recibían lactancia muestran un descenso en los últimos años,
materna al alta en la maternidad; en 1996 estando por debajo del 20% e incluso del
este porcentaje había subido a 58%. 10% (región caribeña) con excepción de
Si bien la frecuencia y duración de la Bolivia que mantiene cifras superiores al
lactancia materna está aumentando en los 50% de LME al 4º mes.
últimos 25 años en Estados Unidos, la cul- En Tailandia, país en el que el 99% de
tura de fines del siglo XX en este país ha los niños son amamantados en algún
33. Aspectos históricos de la alimentación al seno materno 23
TABLA I. Porcentaje de niños con lactancia materna al inicio, 3 y 6 meses de vida según trabajos
realizados en distintas regiones de España
Porcentaje LME (LMP)*
Región, Autonomía Año N Inicio 3 meses 6 meses
Comarca Cataluña 2000 200 — (78) — (67) — (39)
Pueblo Aragón 1988 345 — (80) — (34) — (11)
Pueblo Cataluña 1998 88 81 (83) 59 (75) 3 (6)
Pueblo Ciudad Real 1993-95 170 82 (88) 34 (46) — (6)
Córdoba ciudad 1995 561 — (77) — (25) — (10)
Castilla-León 1998 - 75 (88) - 7 (28)
Centro-Norte España 1992-93 1.175 80 (88) 27 (45) 4 (14)
Asturias 1996 418 51 (73) 15 (31) 9 (20)
España 1995 400 - 37 (54) 15 (33)
1999 10.487 — (84) — (55) — (25)
*LME: lactancia materna exclusiva. LMP: lactancia materna parcial o mixta.
momento, las cifras de lactancia materna cadores de lactancia materna son bajos con
exclusiva al 4º mes eran de 0,2% en 1992 lenta recuperación en la mayoría de países
y del 4% en 1996; este mismo indicador de la región europea, que registran con 15
subió en Pakistán del 12% en 1988 al 25% a 20 años de retraso los índices estadou-
en 1992 y era del 55% en Arabia Saudí en nidenses. Muchos de ellos no llegan al 70%
1991. de LME inicial y Francia apenas alcanza
Australia y Nueva Zelanda mantienen en 50%. Es preciso exceptuar a Suecia y
desde el último decenio cifras de lactancia Noruega, con cifras muy altas (más del
materna exclusiva superiores a 80, 50 y 60% de LME al 4º mes) desde hace varias
20% a los 0, 3 y 6 meses respectivamen- décadas y el esfuerzo realizado en otros
te. países como Armenia o Polonia, en los que
En casi todos los países del África sub- se han conseguido incrementos del 1 al
sahariana las cifras de lactancia materna 20% de LME al 4º mes en pocos años.
exclusiva a los cuatro meses de edad son En España diversos trabajos publica-
muy bajas, inferiores al 20% y algunos de dos en la última década nos permiten tener
ellos (Senegal, República Centro Africana, una idea de que la prevalencia y duración
Níger y Nigeria), inferiores al 5% de la lactancia materna en nuestro país no
A pesar de las numerosas ventajas reco- alcanzan el patrón óptimo recomendado
nocidas sobre la lactancia artificial inclu- por la Organización Mundial de la Salud
so en el mundo industrializado, los indi- (ver Tabla I).
34. 24 Lactancia materna: Guía para profesionales
Hay abundante literatura para com- Los intentos, conocidos desde antiguo,
prender que las cifras de incidencia y dura- de alimentar recién nacidos y lactan-
ción de lactancia materna tienen significa- tes con leches de animales o modifica-
tivamente que ver con factores tales como ciones de las mismas se saldaban has-
la edad, la paridad, el nivel de educación, ta los albores de 1900 con una morta-
el grupo étnico, el tabaquismo y el traba- lidad cercana al 100%.
jo de la madre, el nivel sociocultural y de
ingresos familiar, el tipo de institución del Desde la prehistoria, la duración media
nacimiento y sus normas de cuidados y recomendada y practicada de la lac-
atención a madres y recién nacidos, y la tancia en las diversas culturas se ha
forma de terminación del parto, la madu- mantenido estable entre los 2 y 4 años.
rez, el peso y el estado de salud del recién
nacido, entre otros. Como ejemplo en 1987 Gracias a la intervención de grupos de
en EE.UU., por diferentes motivos (dura- mujeres (Liga de la Leche y posteriores
ción de estudios, ingresos familiares y hora- grupos de apoyo), grupos de presión
rios de trabajo, entre otros) los porcenta- (IBFAN), organismos internacionales
jes de lactancia materna eran 60% en muje- (OMS/UNICEF) y, posteriormente, aso-
res blancas, 50% en hispanas y 25% en ciaciones de profesionales sanitarios, en
negras. las últimas décadas muchos países están
empezando a remontar sus índices de
lactancia. Se precisará un esfuerzo con-
RECUERDE junto y mantenido para acercarse a lo
ideal: 100% de lactancia materna exclu-
La lactancia materna es un fenómeno siva a los 6 meses de edad.
biocultural, simbiosis de instinto y cul-
tura. Es el aspecto cultural el que le con-
fiere una especial vulnerabilidad: avan-
ces científicos, cambios sociológicos, BIBLIOGRAFÍA
desinterés de sanitarios y presiones
comerciales han estado a punto de Arsuaga JL. El collar de Neandertal. En busca
hacerla desaparecer en el último siglo. de los primeros pensadores. Madrid: Temas de
hoy; 1999.
Hasta hace unos 100 años, todos los Burguière A et al. Histoire de la famille. Paris:
niños eran amamantados, pero no siem- Armand Colin; 1986.
pre por sus madres. En muchas civili- Comité de Lactancia Materna de la Asociación
zaciones los niños de clases altas eran Española de Pediatría. Informe técnico sobre la
lactancia materna en España. An Esp Pediatr
criados por nodrizas. La mortalidad de
1999; 50: 333-340.
estos niños era muy superior a la de los
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36. 2 Aspectos antropológicos en la práctica
del amamantamiento
Leonardo Landa Rivera
“La lactancia está en el corazón los lactantes en el mundo moderno, uno es
mismo de nuestra identidad, inicia su la frecuencia de alimentación y otro la sen-
evolución aún antes del embarazo y sación de baja producción de leche de
cada mamífero ha desarrollado por muchas madres en las sociedades indus-
milenios una leche única para sus trializadas.
necesidades, su comportamiento y su
entorno. Es una estrategia
espectacular de supervivencia que FRECUENCIA DE LA SUCCIÓN
nos sitúa entre los mamíferos ...
animales que alimentan a sus crías Desde cierto tiempo a esta parte, los
con su leche” médicos hemos empezado a aceptar la lac-
Gabrielle Palmer tancia a demanda como la mejor manera
The politics of lactation 1993 de satisfacer las necesidades del pequeño
lactante. De hecho, la recomendamos y así
lo hacemos constar en la hoja de prescrip-
Definida la lactancia como un fenó- ción médica. Sin embargo, no parece que-
meno cultural con implicaciones biológi- dar muy claro lo que debemos entender por
cas determinantes para la supervivencia de una lactancia a demanda. No resulta extra-
la especie humana, a semejanza de lo que ño pues, ver a madres aferradas a un hora-
ocurre con otros mamíferos, vemos en otro rio rígido unas veces, restringiendo las
capítulo de este libro cómo se ha modifi- tomas nocturnas en otras o esperando a
cado su práctica por factores sociales, eco- que el niño se desgañite para ofrecer el
nómicos y psicológicos. Dos aspectos han pecho. Este tipo de comportamiento se ini-
sido particularmente influenciados por cia con cambios introducidos a mediados
cambios de hábito en la alimentación de del siglo XX, junto a la incorporación de
37. 28 Lactancia materna: Guía para profesionales
la mujer al mercado de trabajo y el uso a Este modelo de alimentación se vio
gran escala de leches artificiales en el mun- rápidamente incorporado a la enseñanza
do industrializado y su posterior propaga- de los estudiantes de pediatría en una épo-
ción a otras zonas menos favorecidas. Las ca de confianza ciega en los avances tec-
modernas leches con más densidad que la nológicos y convertida en la norma que
leche humana, en gran parte debido a su por muchos años se ha venido ofreciendo
mayor contenido proteico, condicionan una a las madres. Sin considerar las diferencias,
digestión más lenta que requiere períodos tales recomendaciones se han aplicado por
más largos entre las tomas y, con ello, ali- igual a las madres lactantes con resultados
mentación menos frecuente. desastrosos, tanto para la instauración de
La evolución ha marcado la frecuencia la lactancia materna como para su dura-
de las tomas en las diferentes especies en ción.
función del contenido en solutos de la leche
de los diferentes mamíferos. Por ejemplo,
la leche de león marino contiene 62-65% HIPOGALACTIA
de solutos y se alimenta una vez por sema-
na; la de conejo contiene 33% y se alimenta Es un hecho generalmente aceptado que
cada 24 horas; la de rata contiene 21% y toda mujer sana es capaz de amamantar
amamanta de forma continua. La leche satisfactoriamente a su hijo. Sin embargo,
humana contiene 12,4% ¿Cada cuanto la causa más frecuente citada por las
tiempo debería amamantar entonces una madres en las diversas encuestas como fra-
cría humana? Sabemos que el tiempo de caso en la lactancia es la falta de leche. Sea
digestión de la leche materna es aproxi- real o percibido, dicho fenómeno se ha
madamente 20 minutos. ¿Resultaría razo- transformado en una constante en las socie-
nable entonces pedirle a una madre que dades industrializadas y sectores privile-
amamante a su hijo cada 3 horas? No giados de los países en desarrollo. Muchos
podemos pasar por alto la satisfacción factores pueden contribuir a este hecho,
emocional que supone la succión para el tales como un estilo de vida a velocidad de
bebé y su reconocida importancia para el vértigo, condiciones adversas por partos
desarrollo cerebral que determina un mejor con intervención excesiva, mensajes mediá-
desempeño cognoscitivo y psicoafectivo. ticos subliminales que incitan a la insegu-
Éste se ve alterado por el uso de biberón, ridad individual en favor de productos con
puesto que no sólo interrumpe el proceso pretendida solución para todo, pérdida de
fisiológico, si no que tampoco satisface la cultura de la lactancia como patrón de
la succión no nutritiva al ser retirado una alimentación, profesionales sanitarios que
vez vacío de la boca del niño. Para com- desconocen las bases del comportamiento
pensar esta carencia se volvió práctica de la lactancia, influencia de la industria a
común el uso de chupete conocido curio- través de técnicas de mercadeo agresivas
samente como “pacificador” en el idioma para introducir alimentos infantiles, y un
inglés. largo etcétera que mina la capacidad de la