Parece que estas palabras gustaron a algunos de los asistentes a la ceremonia de inauguración de la 18ª SNCyT y Congreso de Estudiantes. Para ellos las reproduzco aquí.
BITÁCORA DE ESTUDIO DE PROBLEMÁTICA. TUTORÍA V. PDF 2 UNIDAD.pdf
Palabras de Bienvenida a la 18ª SNCyT y Congreso de Estudiantes de Ingeniería
1. Palabras de Bienvenida a la 18ª SNCyT y
Congreso de Estudiantes de Ingeniería
Dr. José Enrique Alvarez Estrada
9 de noviembre de 2011
Auditorio de la Universidad del Caribe
Gidi Grinstein dijo una vez: “Los inmigrantes no son reacios a volver a empezar. Son,
por definición tomadores de riesgos. Una nación de inmigrantes es una nación de
emprendedores.”
En Cancún todos somos inmigrantes o hijos de inmigrantes; Cancún es, por tanto, una
ciudad de emprendedores. O al menos debe serlo.
Esta ciudad es extraordinaria por varios factores. Hace algunos días transmitieron por
History Channel un programa titulado “La Historia Secreta de la Riviera Maya”, donde
uno de los pioneros comentaba que, junto con Brasilia, la nuestra es la única ciudad
latinoamericana que se planificó y construyó el siglo pasado desde cero. Hace muy poco
tiempo, todo lo que hoy es Cancún no era sino selva y mangle.
A pesar del brillo de la actividad turística, que eclipsa todas las demás, Cancún es una
ciudad que nació como un prodigio de la ingeniería, y que no puede existir sin ella. La
construcción de los grandes complejos turísticos, su operación diaria, la cadena de
suministros que los abastece, y hasta los aviones en que se transporta el grueso de los
turistas que nos visitan, son todos logros diarios de nuestra disciplina. Sin ellos toda la
actividad económica de nuestra ciudad desaparecería en cuestión de días.
Ahora, a casi 40 años de su fundación, Cancún afronta un nuevo reto: reinventarse o
morir. Es muy posible que la actividad turística haya llegado a su punto más alto, y ya
no puede soportar económicamente a una población de cerca de 1 millón de habitantes.
Tenemos que encontrar formas nuevas y creativas de generar riqueza. Y eso pasa
forzosamente por la ingeniería.
2. Ya sea reinventándonos como centro logístico, como proveedor de tecnologías de
información, como generador de contenido multimedia, como creador de nuevas fuentes
de energía renovable, o todo ello al mismo tiempo, no lo dudemos: el futuro de Cancún
está en la ingeniería.
Pero paradójicamente, contra más “cerebro de obra” se requiere en ingeniería, menos
son los candidatos a ingenieros. En el 2008 México graduó un total de 23,660
estudiantes de ingeniería de todos los niveles, un 2.5% más que el año anterior. Esto se
traduce en una tasa de 0.02% de ingenieros respecto al total de la población, menos de
1/10 de Brasil, 1/6 de Finlandia y ¼ respecto a Israel.
Si lo ponemos en términos del producto interno bruto, estamos en una situación similar a
Israel o Nueva Zelanda (cerca del 0.02%), pero nuevamente muy por debajo de Brasil
(0.07%) y de Finlandia (0.04%).
Y es conocido que muchos ingenieros estudian la carrera por presión o compromiso
social, sin pensar realmente en ejercerla.
Y de los que la ejercen, pocos son aquéllos que innovan, que emprenden.
Estos y otros pensamientos similares son los que nos tienen aquí reunidos el día de hoy.
La Universidad del Caribe, a través del DCBeI, asume con plenitud su responsabilidad
social y económica, y dedica cada año 3 días a reflexionar acerca de los retos, alcances y
oportunidades de las carreras de ingeniería.