Para determinar una nueva alternativa de negocio, se deben considerar factores como las necesidades y deseos latentes de los clientes, las tendencias del mercado, las oportunidades tecnológicas emergentes, las fortalezas y debilidades frente a la competencia, y cómo aprovechar las localizaciones físicas y clientela existentes. Además, la viabilidad económica de cualquier nueva propuesta es un factor decisivo.