2. Hablar del comportamiento de nuestros hijos es conectarnos con sus actitudes, con su conducta, con su forma de ser; esas actitudes que muchas veces nos hacen sentirnos tan orgullosos como padres y otras tristes, porque no se ajustaron a nuestras expectativas; nos hace pregun-tarnos ¿qué propicia esas actitudes? Por lo que para lograr actitudes positivas pudiéramos tomar algunas sugerencias:
3.
4.
5.
6. Es importante considerar también qué comportamiento, qué actitudes tenemos nosotros como padres porque: “ La Educación Silenciosa es mucho más fuerte que la hablada” “ LA ÙNICA ENERGIA QUE FORTALECE VERDADERAMENTE EL HOGAR Y A CADA UNO SE SUS MIEMBROS ES EL AMOR SIN CONDICIONES” Carlos Cuauhtemoc Sánchez Paola Villacis Psicóloga Básica I