2. ¿El emprendedor nace o se hace? Existe un debate
generalizado acerca de si el emprendimiento es un
don innato en las personas o si se puede aprender
a emprender. Es cierto que determinadas personas
tienen una mayor disponibilidad para lanzarse a la
aventura de emprender, pero si reconocemos que
queremos emprender, se puede aprender a
encontrar oportunidades de negocio, pero siempre
emprendiendo. Como dice una frase popular “quien
no arriesga no gana” y emprender comienza por
eso, por arriesgar.
3. Lo cierto es que en las escuelas y universidades no se aprende a
emprender, y que la mayoría de las personas buscan la seguridad y
la estabilidad en sus vidas, por eso encontrar emprendedores no es
una tarea fácil. Son aquellas personas inquietas, a las que la
estabilidad les aburre y la incertidumbre le motiva, las que tarde o
temprano emprenderán.
Desde mi punto de vista todo emprendedor debe contar con
cualidades personales como la constancia, el espíritu y el esfuerzo;
debe tener motivación, debe fijarse unos objetivos y planes de
acción que estén adaptadas a sus propios valores y estar
informado. A todo lo demás se aprende con técnicas como el
Coaching o recurriendo a un mentor que puede orientarte para
iniciar y desarrollar tu proyecto.
4. Estamos en un momento en el emprender ya no sólo es
una necesidad, sino que es la mejor opción posible. Es el
momento de emprender, pero sin olvidar que lo
fundamental en los negocios es aprender haciendo.
Desde aquí, os recomendamos su interesante lectura.
@Jaime_Bedia