1. Hablemos de Futbol…
Antes de llevar a cabo una PLANIFICACIÓN (Macrociclo-Mesociclo-Microciclo-Sesión), debemos saber
las características del deporte a entrenar “FUTBOL”.
El futbol es un deporte, que se juega con una pelota, en una cancha de 90x120 metros como máximo
o 45x90 metros como mínimo. Debe contar de dos arcos, ubicados uno en cada extremo de la
cancha.
Cada equipo contará con 11 jugadores, el objetivo es meter goles en el arco del rival.
El partido se divide en dos tiempos de 45´ con un intervalo de 15´.
“Gana el equipo que convierte más goles”
Acíclico – Intermitente – Con pausas incompletas – De contacto – Con un sistema aeróbico
determinante en el retraso de la fatiga – Con un sistema anaeróbico determinante en las acciones de
alta intensidad.
¿Es suficiente contar con estos datos a la hora de planificar? … No, hay que ir más profundo.
El Preparador Físico tiene que saber cuáles son las exigencias motrices y fisiológicas que le impone el juego
al futbolista.
Por tal motivo, es necesario desglosar un partido y ver qué acciones realiza un jugador en 90´de juego.
Distancias recorridas
Intensidades
Durante cuanto tiempo
Con que intervalos de recuperación
Estos son algunos disparadores para analizar la distancia total que recorre un jugador durante la
competencia.
Una vez obtenidos estos datos, ¿Es suficiente para comenzar a planificar? … No, ya que las carreras no
nos dan a conocer el verdadero desgaste energético que sufre el jugador.
Por eso es necesario tener en cuenta las acciones como: aceleraciones y desaceleraciones, cambios de
dirección, cambios del peso del cuerpo, saltos, conducciones, fintas, anticipos, desmarques, etc. “Todos los
rompimientos de inercia que ocurren durante el juego”, que son movimientos que solicitan una alta demanda
energética y, por lo tanto, deben ser tenidos en cuenta al momento de analizar las tasas y tipos de esfuerzos
en el fútbol.
Ahora sí, una vez analizadas las exigencias y demandas físicas del juego, podemos empezar a planificar en
busca de un entrenamiento más específico para obtener un nivel óptimo de rendimiento.
Concluyendo… Necesitamos jugadores resistentes a la fatiga, fuertes y rápidos para llegar primero en la
disputa de la pelota y resolver efectivamente antes que el rival lo impida.