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     SODOMA Y GOMORRA EN EL SIGLO XXI
  Los homosexuales y sus derechos legalizados, hacia una
                sociedad sodomodizada
¡Ay de los que traen la iniquidad con cuerdas de vanidad, y el pecado como
con coyundas de carreta, los cuales dicen: Venga ya, apresúrese su obra, y
   veamos; acérquese, y venga el consejo del Santo de Israel, para que lo
  sepamos! ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que
  hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por
                dulce, y lo dulce por amargo! (Isa. 5: 18-20)

___________________________________________________




L
       os acontecimientos que han tenido lugar durante estos últimos
       días, revelan claramente que el mundo se encuentra viviendo en
       sus días finales     y reproduciendo aceleradamente todas las
características de la sociedad de la cual, Cristo, profetizó que se daría poco
antes de su regreso y del fin de todas las cosas.
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Asimismo como sucedió en los días de Lot; comían, bebían, compraban,
vendían, plantaban, edificaban; mas el día en que Lot salió de Sodoma,
llovió del cielo fuego y azufre, y los destruyó a todos. Así será el día en que
el Hijo del Hombre se manifieste. (Luc. 17: 28-30)

Esta profecía se está cumpliendo de manera fidedigna ya en nuestros días,
podemos ver cómo hoy, la depravación y los actos contra naturaleza que
existían en los días de Lot, en tiempos de Sodoma y Gomorra, están
formando parte de nuestra sociedad en la actualidad y extendiéndose a
escala mundial.

Homosexuales en todo el mundo, se unen con la finalidad de exigir sus
derechos para vivir en medio de una sociedad con igualdad de condiciones,
sin embargo, lo más terrible, es que los mismos gobiernos y la autoridad
civil está dando la razón y consintiendo en aprobar tales peticiones,
legalizando así, aquellas prácticas que, en tiempos pasados, condenaron a
las ciudades de Sodoma y Gomorra a ser destruidas por medio del fuego y
del azufre, en lo que la Biblia, claramente señala, como pecado y actos que
van contra naturaleza.

Pero ¿Nos hemos detenido a reflexionar en lo que está sucediendo hoy y
hacia dónde vamos como humanidad? ¿Es aceptada esta práctica y unión
homosexual ante los ojos de Dios? ¿Aprobará Dios que dos personas del
mismo sexo se unan en prácticas y convivencia sexuales?

Muchos quienes tienen estas prácticas y de quienes los defienden, alegan
en su favor sus derechos, es decir, que cada persona en este mundo y en
cada sociedad tiene DD.HH. y en consecuencia, es libre de hacer lo que le
parezca. Al parecer, la famosa doctrina de los DD.HH. se ha transformado
en el juez ético y moral por excelencia, aun por sobre Dios mismo, para
definir o redefinir lo que es bueno y malo, legalizar y aprobar cualquier
práctica de los seres humanos, convirtiéndose, por otro lado, en una
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especie de último refugio a modo de una abuelita que aprueba todo lo que
su nieto le pide en la persistente negativa de sus padres.

¿Está Dios obligado a aceptar las peticiones de estos hombres y mujeres,
que han extraviado sus caminos, porque simplemente o complicadamente
tienen DD.HH, el caballito de batalla de la actual sociedad? ¿Significa esto,
que bajo la actual doctrina de los DD.HH. lo que en un tiempo Dios
repudió y condenó, se ve ahora obligado a cambiar de parecer por un
conjunto de normativas humanas, marchas y protestas?
4


¿Quién le dio la facultad y el poder ético y moral al ser humano para
definir o redefinir lo que es bueno y malo? Todo lo que es bueno y malo,
justo e injusto, inicuo o benigno, está desde hace mucho tiempo ya
definido y establecido por Dios mismo, la máxima autoridad ética y moral
del universo, por medio de los principios estipulados y escritos en su
palabra, la Biblia.

¿Será acaso que la doctrina humanista de los DD.HH. tiene el poder de
imponerse por sobre Dios, los principios y valores bíblicos? O ¿Es el
tiempo el que tiene la autoridad y la última palabra para redefinir si
ciertas prácticas son buenas o malas? Y ¿Qué es el tiempo, alguna
autoridad ética y moral?
5


Para tener una mejor claridad sobre el asunto en cuestión, nos hemos
preguntado alguna vez ¿Cuál es el origen de estas prácticas aberrantes?
¿Sabemos    en   dónde   y   con   quién   o   quienes   se   originaron   la
homosexualidad y cuál era la visión y posición de Dios con respecto a
estos actos de hombres y mujeres del pasado? ¿Creó Dios un tercer sexo,
como una especie de salida alternativa, para todos aquellos que se
sintieran insatisfechos o “atrapados” en sus cuerpos, tuvieran dudas o
estuvieran confundidos sobre su identidad sexual? ¿Es la Biblia un libro
ambiguo con respecto a los valores o tener una posición con respecto a la
sexualidad o a la identidad sexual del ser humano?



                         Varón y hembra los creó
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Para poder responder a todas estas interrogantes y comenzar a dilucidar
con plena claridad el tema o adoptar alguna posición al respecto, tenemos
que remontarnos al origen del hombre y de la mujer. La Biblia nos revela
claramente que en el principio creó Dios, un hombre y una mujer, Y creó
Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los
creó. (Gén. 1: 27) el texto señala definidamente dos sexos, hombre y
mujer, en ningún momento la Biblia se torna ambigua o vacilante como
para dar lugar a especulaciones o sexos alternativos.

Seguidamente, la primera unión matrimonial que existió sobre la tierra y
con ella, se establece el modelo para el resto de la humanidad, fue entre
un hombre y una mujer, unión celebrada y aprobada por Dios mismo en
persona.

Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda
idónea para él. Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán,
y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su
lugar. Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y
la trajo al hombre. Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos
y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del varón fue
tomada. Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a
su mujer, y serán una sola carne. Y estaban ambos desnudos, Adán y su
mujer, y no se avergonzaban. (Gén. 2: 18, 21-25)
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Fue este el modelo creado por Dios para toda la humanidad y por siempre,
un   hombre   y   una   mujer,   como    protagonistas   fundamentales   del
matrimonio, Dios no creó un tercer sexo, como muchos hoy en día, buscan
respuestas o mejor dicho, buscan las alternativas para justificar la
corrupción, depravación y la homosexualidad. La Biblia revela y enseña
como norma válida de vida ante los ojos de Dios, que la unión sexual
aprobada por Dios mismo es entre un hombre y una mujer y dentro del
círculo del matrimonio.   Todo lo que esté fuera de estas normativas y
principios, es degradación, corrupción y depravación moral, que en
términos sencillos se denomina como pecado.



                  “Se casaban y se daban en casamiento”

Sin embargo, este modelo fue corrompido por el mismo hombre, en
apostasía y separado de Dios, Caín fue uno de los primeros en pervertir lo
que Dios había establecido, desde que se convirtió en el primer criminal
sobre la tierra, (Gén. 4: 8) su descendencia sería un semillero del mal que
corrompería a todo el mundo antediluviano. Uno de estos descendientes,
8


Lamec, se convirtió en el primer caso de poligamia registrado en la Biblia,
este patriarca del mal, pervirtió de esta manera el modelo original del
matrimonio establecido por Dios en el Edén, Y Lamec tomó para sí dos
mujeres; el nombre de la una fue Ada, y el nombre de la otra, Zila. (Gén. 4:
19)




La raza de seres humanos que vivió en tiempos antediluvianos, se cuenta
entre la más poderosa que haya existido sobre la tierra. El estado físico y
mental de estos seres era increíble, con alturas que superaban los cuatro
metros o más, (Gén. 6: 4) además, la Escritura revela que su total de vida
alcanzaba cerca de los 950 años y que fácilmente podían llegar a vivir el
milenio.
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Al trascurrir el tiempo en aquella temprana era de la tierra, los hombres
comenzaron a desarrollar un elevado índice de maldad y junto con ello, la
corrupción y depravación, en todas las formas posibles de ser concebidas,
se fueron ahondando más y más, hasta convertirse en algo fuera de
control e inexplicables para la razón. Las poderosas facultades mentales,
con un grado de inteligencia inimaginable, fueron empleadas en la
invención del mal y de todo aquello que sirviera para satisfacer el placer.

Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que
todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo
solamente el mal.     Y se corrompió la tierra delante de Dios, y estaba la
tierra llena de violencia. Y miró Dios la tierra, y he aquí que estaba
corrompida; porque toda carne había corrompido su camino sobre la
tierra. (Gén. 6: 5, 11-12)

A tal punto llegó el índice de violencia, depravación y corrupción, que la
Biblia señala: Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y
le dolió en su corazón. (Gén. 6: 5-6)

El crimen, la violencia extrema, la idolatría, los experimentos con animales
y mutaciones genéticas controladas, actos contra naturaleza, como la
homosexualidad, sexo con animales, rebelión abierta contra Dios y
muchos otros actos inimaginables, se cuentan dentro de la larga lista que
formaban parte de la vida social y los tiempos antediluvianos.

Todo esto, trajo consigo serias y terribles consecuencias para aquella
civilización, Dios, en su carácter de gobernante supremo, no podía seguir
permitiendo un estado tal de cosas sobre la tierra, Y dijo Jehová: No
contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es
carne; mas serán sus días ciento veinte años. Y dijo Jehová: Raeré de sobre
la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la
bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos
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hecho. Dijo, pues, Dios a Noé: He decidido el fin de todo ser, porque la tierra
está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí que yo los destruiré con la
tierra. (Gén. 6: 3, 7, 13)

Tras ciento veinte años de gracia y misericordia a través de la predicación
de Noé, Dios terminaría finalmente con toda aquella depravación por
medio de un poderoso cataclismo mundial, el diluvio, donde solamente
ocho personas se salvarían, (Gén. 7: 1, 10-13) aceptando el llamado y el
mensaje de Dios al arrepentimiento, misericordia que también fue
extendida para todos aquellos que eran depravados y corruptos.
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Desde que Dios instituyera el primer modelo del matrimonio entre un
hombre y una mujer, hasta que los hombres desviaron sus caminos del
sendero del bien, como resultado de la entrada del pecado, (Gén. 3: 1- 24)
las consecuencias sociales y en todo orden de cosas que trajo consigo esto
sobre la tierra fueron desastrosas, violencia, corrupción y depravación, que
finalmente Dios tuvo que destruirlos junto con la tierra.




Con una raza tan poderosa como lo fue la antediluviana ¿Qué hubiera
pasado sobre la tierra, si Dios permitía que siguiera un estado de cosas
semejantes? ¿El bien y el conocimiento de Dios sobre la tierra hubieran
desaparecido para siempre?
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Y por otro lado, si Dios no intervenía, las entidades superiores, como los
ángeles y los habitantes de otros mundos, ¿Cómo hubieran reaccionado
frente a Dios, al permitir que siguieran cosas semejantes sobre la tierra?
¿En dónde hubiera quedado la decencia, la moral, el pudor, el respeto a la
vida, el orden, la seguridad y la justicia?

El mundo antediluviano y su sociedad, revelan a las claras hasta nuestros
días, que pervertir y degradar lo que Dios ha establecido como santo y
sagrado como lo es el matrimonio, trae consigo serias y catastróficas
consecuencias con resultados eternos para los seres humanos.



                           Los pueblos cananeos
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Una vez que terminó el diluvio y los hombres poblaron la tierra
nuevamente,       comenzaron a reproducirse rápidamente las mismas
actitudes y pecados que destruyeron la tierra por el gran cataclismo
universal, los hombres llegaron a alcanzar un índice de maldad tal, que los
llevó una vez más, a las mismas prácticas aberrantes de sus antepasados.

De los tres hijos de Noé, de los cuales fue llena toda la tierra, (Gén. 9: 18-
19) Cam, el segundo hijo, resultó ser depravado y un pervertido. Cam era
corrupto, su inclinación al mal y la depravación sexual extrema quedó de
manifestada al ver este, la desnude de su propio padre, (Gén. 9: 20-23) lo
cual, en el fondo, puede ser interpretado como un acto de violación o
relación sexual aberrante con su progenitor, una vez que Noé despertó de
su embriaguez y supo lo que le había hecho su hijo más joven, y
dijo: Maldito sea Canaán; (Gén. 9: 24-25) Sobre este joven, el hijo de Cam,
cae una gran maldición pronunciada por su propio abuelo.

El pasaje citado, señala que cuando Noé despertó de su embriagues, supo
lo que le había hecho su hijo más joven, pero, ¿Cómo supo Noé lo que había
hecho su hijo, si este estaba embriagado a tal punto de quedarse dormido?
El relato señala que Cam, al ver la desnudes de su propio padre, se lo
contó a sus hermanos, Sem y Jafet, (Gén. 9: 22-23) lo cual puede sugerir
que ambos hermanos, le contaron a su padre lo que había hecho Cam, su
hermano. O bien, Noé, una vez pasada la borrachera, sintió en su propio
cuerpo   que   había    sido   violado,    confirmando   Sem    y   Jafet   tal
acontecimiento.

Como sea, el texto señala un acto de parte de Cam, había hecho o hizo,
(v. 24) señalando una acción, algo activo y no pasivo como resultaría del
simple hecho de mirar la desnudez, lo cual revela un acto sexual aberrante
de violación y homosexualidad en contra de su propio padre.
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¿Pero de donde había aprendido Cam tales costumbres aberrantes si no
hacía nada que había salido del arca? ¿Cómo aprendió tales prácticas si
fue criado en el seno de una familia temerosa de Dios?

La única respuesta posible se encuentra en la vida antediluviana, y
efectivamente, Cam había aprendido esas prácticas de los hombres y
mujeres que fueron destruidos por el diluvio, la corrupción moral y la
depravación   sexual,     tuvieron   una   fuerte   influencia   sobre   Cam,
contaminando la mente y el espíritu de ese joven al mezclarse con los
corruptos y al observar actos y prácticas homosexuales de aquella
sociedad antediluviana.

De esta manera, y una vez salido del arca y tan pronto como tuvo la
oportunidad, Cam puso en práctica los mismos actos sexuales pervertidos
y de la forma más degradante, con su propio padre, de esta forma, la
descendencia de Cam sería portadora de una maldición y los pueblos que
saldrían de tal descendencia, serían llamados los cananeos. (Gén. 10: 6-
20) Estos pueblos fueron los más corruptos y depravados que poblaron la
tierra de entonces y la influencia que tuvieron sobre la sociedad de aquel
tiempo fue poderosa, pero que término finalmente, con las más terribles
consecuencias.
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            Sodoma y Gomorra y las ciudades de la llanura




Sodoma y Gomorra y todas las ciudades de la llanura de Sinar (Gén. 11: 1-
2) revelan y dejan en plena evidencia la depravación de los pueblos
cananeos, la vida social que se llevó al interior de estas ciudades, llegó a
un clímax e índice de maldad y depravación extrema, que una vez más,
Dios se vio obligado a intervenir en los asuntos humanos.

Sodoma y Gomorra, se convirtieron hasta el presente, en íconos de
depravación sexual sobre la tierra y además, se transformaron en un
evento escatológico a escala de la condición final a la cual llegará la
humanidad poco antes de que Cristo retorne a la tierra. Estas ciudades
estaban conformadas por los pueblos cananeos, descendientes de Canaán
(Gén. 10: 15-20) y del originador de toda depravación sexual postdiluviana
sobre la tierra, Cam.
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Reinaban en Sodoma el alboroto y el júbilo, los festines y las borracheras.
Las más viles y más brutales pasiones imperaban desenfrenadas.
Los habitantes desafiaban públicamente a Dios y a su ley, y encontraban
deleite en los actos de violencia.       Aunque tenían ante sí el ejemplo del
mundo antediluviano, y sabían cómo se había manifestado la ira de Dios en
su destrucción, sin embargo, seguían la misma conducta impía. (PP.
Cap. 14 La destrucción de Sodoma. Pág. 153)

Llama la atención, que la Biblia nos revela que finalmente todos los
moradores de Sodoma eran corruptos y quienes formaban parte de la
autoridad de la ciudad, de una u otra forma, también llegaron a formar
parte de estas prácticas y aprobarlas.

El relato bíblico de Génesis capítulo 19, revela que hasta la propia
juventud de esa ciudad y tal vez hasta los mismos niños, estaban de igual
manera involucrados en las prácticas homosexuales, la influencia de los
más adultos, “hasta el más viejo”, ejercieron su influencia corrupta sobre
sus tiernas mentes. En el caso de Sodoma, la depravación sexual a la cual
habían llegado sus moradores fue tal, que toda la ciudad estaba
involucrada en tales prácticas, (v. 4) desde el más joven hasta el más
viejo,     lo   cual   revela   una   iniciación   en   prácticas   depravadas   y
seguidamente, toda una vida de homosexualidad, desde bien temprano en
la vida.

¿Significa esto que los niños de Sodoma se criaron en medio de
matrimonios homosexuales, aprendiendo tales prácticas desde su misma
infancia? ¿Será posible que los homosexuales de Sodoma adoptaran niños
y los criaran como a hijos?
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Por otro lado, esto revela que la influencia de las prácticas homosexuales
de los adultos, hizo un profundo impacto en las tiernas mentes de los
niños y la juventud de aquella sociedad, también revela que nadie se
opuso a tales prácticas inmorales, todos sus habitantes las consideraron
como buenas, comenzando por la misma autoridad de la ciudad, que
finalmente todos, sin excepción alguna, terminaron por aprobarlas y
practicarlas.

Las Escrituras revelan que estos hombres y mujeres, jóvenes y viejos,
habían alcanzado tal índice de maldad, depravación y corrupción moral
que se hizo necesaria y urgente la intervención divina, Mas los hombres de
Sodoma      eran   malos   y   pecadores    contra   Jehová    en    gran
manera. Entonces Jehová le dijo: Por cuanto el clamor contra Sodoma y
Gomorra se aumenta más y más, y el pecado de ellos se ha agravado
en extremo, (Gén. 13: 13; 18: 20)

Estos textos dejan ver las condiciones sociales y morales a las cuales,
todos estos moradores habían llegado, se habla que su pecado aumentaba
más y más y se tornaba muy grave ante los ojos de Dios. No solo
practicaban la homosexualidad como una alternativa en sus vidas, sino
que también tenían relaciones sexuales con animales, de donde se deriva
el término, acto sodomita, para referirse a este tipo de aberraciones con
animales.

Para cuando llegó el momento final de estas ciudades y antes de ser
destruidas, Dios envió ángeles con la misión de sacar de ese lugar a Lot y
su familia, al tiempo en que llegaron los ángeles a la ciudad, esa última
noche, dejó en plena evidencia las prácticas aberrantes de quienes eran
homosexuales, a saber… TODA LA CIUDAD.
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Mas él porfió con ellos mucho, y fueron con él, y entraron en su casa; y les
hizo banquete, y coció panes sin levadura, y comieron.    Pero antes que se
acostasen, rodearon la casa los hombres de la ciudad, los varones de
Sodoma, todo el pueblo junto, desde el más joven hasta el más
viejo.   Y llamaron a Lot, y le dijeron: ¿Dónde están los varones que
vinieron a ti esta noche? Sácalos, para que los conozcamos.

Entonces Lot salió a ellos a la puerta, y cerró la puerta tras sí, y dijo: Os
ruego, hermanos míos, que no hagáis tal maldad. He aquí ahora yo
tengo dos hijas que no han conocido varón; os las sacaré fuera, y
haced de ellas como bien os pareciere; solamente que a estos varones
no hagáis nada, pues que vinieron a la sombra de mi tejado. (Gén. 19: 3-
8)

En este pasaje de las Sagradas Escrituras, se nos revela que una vez que
los moradores de Sodoma se enteraron que Lot tenía visitas (los ángeles en
forma humana) inmediatamente se corrió la voz por toda la ciudad y
rodearon su casa, ¿Quiénes estaban involucrados? Dice la Escritura,
desde el más joven hasta el más viejo, todo el pueblo junto (v. 4) ¿Qué
querían hacer? Dice el texto que querían conocerlos. (v. 5)

Sin embargo, la palabra conocer, empleada aquí, no está en el sentido de
conocer socialmente a un extraño para saludarlo como lo hacemos hoy,
no, esa palabra denota una relación corporal, sexual, y es la misma
palabra hebrea que se usa en Génesis 4: 1 cuando Adán conoció a su
mujer, Eva y de donde tuvieron a su primer hijo, Caín.

¿Acaso no conocía Adán a Eva mucho tiempo antes de tener a su primer
hijo? (Gén. 2: 18-25) claro que sí, y eso fue antes que entrara el pecado,
por lo tanto, resulta evidente que aquí se está refiriendo a una relación
sexual entre un hombre y una mujer y no a un conocer desde el punto de
vista social.
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Luego, más adelante, también se habla que Adán conoció a su esposa Eva,
pero usa la palabra de nuevo, es decir, volvieron a tener relaciones
sexuales y de tal acto, nació su tercer hijo, Set. (Gén. 4: 25)

Cuando los hombres de Sodoma exigieron a Lot que sacara afuera a
aquellos “varones”, ellos querían conocerlos, (Gén. 19: 5) es decir, querían
tener relaciones sexuales con ellos, sin embargo, y lo impresionante de
esto, era que todo el pueblo, junto y unido, estaba involucrado, de manera
que de haberse logrado llevar a efecto lo que intentaban hacer, se hubiera
convertido aquello, en un acto depravado de violación masiva.

Para evitar esto, Lot les ofreció a sus hijas que no habían conocido varón,
es decir eran vírgenes, esto nos comprueba una vez más, que el acto que
esos hombres querían cometer era de naturaleza sexual, si no fuera así
¿Por qué Lot les ofreció a sus hijas para satisfacer sus demandas?
También el texto nos revela que esos hombres no aceptaron la solución de
Lot, con lo cual es una fuerte evidencia que revela la profunda depravación
homosexual que había en ellos, que ni siquiera dos mujeres jóvenes y
vírgenes llamaron su atención. (v. 8)
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Pero ¿Cómo pudo toda una ciudad, así como las otras de aquella llanura,
adoptar tendencias homosexuales? ¿Cómo es posible que la corrupción y
depravación sexual alcanzaran índices de maldad tan elevados? ¿Será
acaso que la autoridad de estas ciudades o la forma de gobierno que las
unía, permitieron esto, llegando también a estar involucradas en tales
actos homosexuales?

        Fuego y Azufre en la destrucción de Sodoma y Gomorra




Finalmente, los ángeles ejercieron su poder divino y protegieron a Lot y su
familia, hiriendo con ceguera y oscuridad a aquellos corruptos moradores.
(Gén. 19: 10-11) Bajo la orden de los ángeles quienes los apuraban para
salir de la ciudad y ponerse a resguardo, solamente Lot y sus dos hijas se
salvaron huyendo hacia los montes. Estando lejos y una vez a salvos,
Dios desató su poder destructor sobre aquellos corruptos moradores.
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Date prisa, escápate allá; porque nada podré hacer hasta que hayas llegado
allí. Por eso fue llamado el nombre de la ciudad, Zoar. El sol salía sobre la
tierra, cuando Lot llegó a Zoar. Entonces Jehová hizo llover sobre
Sodoma y sobre Gomorra azufre y fuego de parte de Jehová desde los
cielos; y destruyó las ciudades, y toda aquella llanura, con todos los
moradores de aquellas ciudades, y el fruto de la tierra. (Gén. 19: 22-
25)

Todo fue destruido por el fuego y el azufre, nada sobrevivió, aquel fértil y
próspero valle, fue convertido en la tierra más estéril y sin vida del planeta,
la devastación fue completa, ninguno de sus moradores se detuvo jamás a
pensar en las consecuencias que traerían sus aberraciones, todos,
seguramente creyeron, que nada ocurriría y que la vida seguiría como
estaba.

Una vez destruidas Sodoma y Gomorra y todas las ciudades de la llanura,
la Biblia revela cuan profunda fue la influencia que tuvieron las prácticas
y estilo de vida aberrantes y degradadas, aun sobre las propias hijas de
Lot. Al ver que no había quedado varón sobre la tierra para unirse a ellas,
procrear y mantener la descendencia, las dos hijas de este patriarca,
embriagaron a su propio padre para concebir de él descendencia. (Gén. 19:
30-32)

El relato inspirado señala que la primera noche durmió la mayor, mientras
que a la noche siguiente le tocó el turno a la menor, (Gén. 19: 32-36) los
hijos que nacieron de tal unión se llamaron Moab y Ben-ammi. Moab, fue
el padre de todos los moabitas, mientras que el segundo hijo, Ben- ammi,
fue el padre de todos los amonitas, (v. 37-38) ambos, moabitas y amonitas,
siglos más tarde, fueron los pueblos más crueles sobre la tierra con el
futuro pueblo de Israel, haciéndole la vida imposible. (2ª Cr. 20)
22


¿Pero acaso acostarse con su propio padre y concebir de él, no es incesto?
¿Dónde aprendieron aquellas señoritas o doncellas, tales costumbres
aberrantes y abominables? Es evidente que de Sodoma, las relaciones
sexuales con familiares cercanos y como resultado el incesto, era otra
práctica abominable de Sodoma y Gomorra que se sumaba, a la larga lista
de pecados y depravaciones sexuales.

Las hijas de Lot, son un claro ejemplo a través de todos los tiempos, para
todos aquellos, quienes piensan y creen o se convencen que ver los actos
pecaminosos y abominables que otros cometen no tendrá una influencia
sobre el alma y la mente, la Biblia a través de estos casos, revela
claramente que están completamente equivocados al respecto. (Isa. 33: 14-
17)

Sin embargo, la Biblia también nos revela, entre otras cosas, que la
homosexualidad es tan antigua y milenaria como la prostitución y que
tales prácticas aberrantes son igualmente condenables por parte de Dios,
sino fuera así ¿Por qué entonces fueron destruidos los moradores de
Sodoma y Gomorra? ¿Por qué Dios no consintió o condescendió en aprobar
sus prácticas contra naturaleza y así evitar estos juicios? ¿Por qué Dios
simplemente no hizo caso de las prácticas inmorales y aberrantes de
aquellos moradores o cambio su concepto de la moralidad para evitar
destruirlos y poner así fin a las prácticas homosexuales? ¿Por qué Dios no
cambió en esos momentos la naturaleza y concepto del matrimonio y de
las prácticas sexuales destinadas solo entre un hombre y una mujer?
23


Por otro lado, ¿Qué hubiera pasado sobre la tierra de entonces y hasta
nuestros días, si Dios no hubiera intervenido de la manera como lo hizo?
Si al interior de aquellas ciudades todos, desde el más joven hasta el más
viejo, estaban influenciados y corrompidos por aquellas prácticas, de
haberlo permitido Dios, ¿La homosexualidad se hubiera extendido a escala
mundial en tan temprano tiempo de la tierra influenciando a todo el
mundo?

De la misma forma, ¿Qué hubieran pensado las entidades superiores como
los ángeles, si Dios hubiera permitido aquello? ¿Qué concepto ético y
moral hubieran tenido ellos de Dios y de su gobierno? ¿Sería un Dios
digno de adoración? ¿Qué clase de Dios hubiera sido si, en su gobierno
permitiera la corrupción y la depravación de la manera y a escala como se
extendían en la llanura de Sinar?



                   Sodoma y Gomorra en el siglo XXI
24


Siglos de distancia nos separan hoy de los antediluvianos y de los
moradores de Sodoma y Gomorra, atrás y en el olvido, han quedado las
advertencias y los juicios que cayeron sobre estas personas, sin embargo,
Cristo reveló que el mismo estado de cosas que se dieron en esos tiempos,
también se darían en la sociedad que vivirá y sería testigo de su segunda
venida y del fin del mundo.

Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del
Hombre. Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y
bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé
entró en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a
todos, así será también la venida del Hijo del Hombre. (Mat. 24: 36-39)

¿A qué tipo de casamiento es al que se refiere Cristo aquí? ¿Qué quiso
decir Jesús cuando habla de: y dándose en casamiento? ¿Acaso casarse,
según lo establecido por Dios no es lo correcto? ¿Entonces, por qué Jesús
hace aquí referencia al matrimonio, antes de su venida, como si fuera algo
malo? O ¿Es que Jesús se está refiriendo a otro tipo de uniones como las
que se practicaban de manera corrupta y degradante antes del diluvio y en
tiempos de Sodoma y Gomorra?

La homosexualidad como parte de la corrupción y depravación del ser
humano y aprobadas como un estilo de vida antes del diluvio, Jesús revela
que esas serán las condiciones y estilo de vida que se darían en la
sociedad que se desarrollará poco antes que termine este mundo.

Sodoma y Gomorra, así como sus habitantes, ya no existen sobre la tierra,
fueron destruidos por el fuego y el azufre, pero, ¿Qué hay de sus
prácticas? ¿Han desaparecido sobre la tierra? Evidentemente que no,
desde ese entonces y hasta nuestros días, han venido tomando diferentes
formas y expresiones y practicándose ya sea de manera, oculta o de forma
abierta y ahora, legalizadas.
25


Pero lo más asombroso de todo esto, es que en la misma iglesia, entre
aquellos que se dicen ser cristianos y representantes de Dios en la tierra,
cometan estos actos aberrantes y desviados al interior de oscuros y
secretos recintos de iglesias y catedrales, monasterios y todo tipo de
recinto privado, sacerdotes católicos, en cuyo interior se anidan las
tendencias y prácticas sodomitas, han frustrado la vida de cientos y miles
de niños y jóvenes, la antigua homosexualidad sodomita en el presente
siglo, bajo el nombre de la pedofilia, se vuelve a repetir secretamente y
esta vez, al interior de la iglesia.

La máxima autoridad del clero católico, el Papa, teniendo conocimiento de
estos actos depravados, han ocultado por años este grave pecado ante la
opinión pública ¿Razones? ¿Será acaso que esta aberración sexual forma
parte de oscuros y secretos rituales, sacrificando niños y jóvenes sobre el
altar del sexo?

No es de extrañar que la misma profecía apocalíptica denomine e
identifique a este poder eclesiástico como, BABILONIA LA GRANDE, LA
MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA
TIERRA. (Apoc. 17: 5) Apocalipsis también nos revela que esta forma de
religión, se ha corrompido sobre la tierra, al punto que, se ha hecho
habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo, y
albergue de toda ave inmunda y aborrecible. (Apoc. 18: 2)

¿Será casualidad que uno de los monumentos más llamativos, históricos y
emblemáticos, así como representativo del Vaticano sea el obelisco situado
al frente de la misma basílica de san Pedro? Esta figura, para quienes
desconocen qué significa, representa al miembro sexual masculino en
estado de erección, el cual, era figura de veneración y adoración en la
antigua Babilonia y entre los pueblos del pasado.
26




Baal, el dios de la fertilidad, era representado por el falo humano, el
miembro sexual masculino y que en los tiempos del pueblo de Israel, al
vivir este, una de las apostasías más terribles que se hayan registrado en
toda la Biblia, también fue adorado al interior del mismo santuario de
Dios. (Ez. 8: 1-18)

A través del profeta Ezequiel, Dios llamó a esto, abominación (Ez. 8: 6,
13, 15) y era cometida, increíblemente, por aquellos que eran los líderes
espirituales de toda la nación. Los mismos sacerdotes que administraban
en el santuario del Señor, llevaron a todo el pueblo de Dios a la apostasía y
a la aberración sexual como parte de un culto pagano y pervertido.

Las torres y obeliscos formaron parte de la cultura antigua como figuras de
adoración, los cuales   representaban al órgano sexual masculino, ¿Será
ahora solo coincidencia o un simple motivo de decoración o expresión
artística el uso de estas figuras en la actualidad? ¿Será coincidencia que
27


esta figura se encuentre en plena plaza de San Pedro y rodeada de cientos
y miles de adoradores? ¿Será acaso que la adoración del falo y las
prácticas sexuales que lo acompañaban en el pasado, se reproduzcan hoy
en día, con toda crueldad, en contra de niños y jóvenes, por medio de
sacerdotes, líderes de la iglesia?

Por otro lado, ¿Qué valor moral tiene ahora pedir perdón y hacer
penitencia frente a la opinión pública mundial por estos actos cometidos?
¿Qué diferencia a la iglesia con el proceder del mundo en sus prácticas
homosexuales y aberrantes? ¿Será acaso que su misma enseñanza e
influencia han llevado al mundo a la depravación sexual? Conforme a su
grandeza, así pecaron contra mí; también yo cambiaré su honra en
afrenta. Del pecado de mi pueblo comen, y en su maldad levantan su alma.
Y será el pueblo como el sacerdote; le castigaré por su conducta, y le pagaré
conforme a sus obras. (Os. 4: 7-9)

Al parecer, la aberrante historia del pasado se vuelve a repetir en el
presente siglo, de luces y progresos. ¿De qué han servido el cúmulo de
evidencias y los hechos del pasado como para no volver a ser repetidos?
¿Será acaso que la fragilidad de la memoria histórica del hombre es cierta?
O ¿Será que todos estos acontecimientos tengan un trasfondo aun más
oscuro y siniestro, que el simple hecho de invocar la historia?

Los   pecados     que    acarrearon      la   venganza   sobre    el   mundo
antediluviano. Existen hoy.          El temor de Dios ha desaparecido de los
corazones de los hombres, y su ley se trata con indiferencia y desdén. Era
lícito que se casaran.       El matrimonio formaba parte del plan de
Dios; fue una de las primeras instituciones que él estableció.           Dio
instrucciones especiales tocantes a esta institución, revistiéndola de
santidad y belleza; pero estas instrucciones fueron olvidadas y el
matrimonio fue pervertido y puesto al servicio de las pasiones
humanas. (PP. Cap. 7 El diluvio. Pág. 90)
28


El Redentor del mundo declara que hay pecados mayores que
aquellos por los cuales fueron destruidas Sodoma y Gomorra. Los
que oyen la invitación del Evangelio que llama a los pecadores al
arrepentimiento, y no hacen caso de ella, son más culpables ante Dios que
los habitantes del valle de Sidim. Mayor aun es el pecado de los que
aseveran   conocer a Dios y guardar sus mandamientos, y sin embargo,
niegan a Cristo en su carácter y en su vida diaria.       De acuerdo con lo
indicado por el Salvador, la suerte de Sodoma es una solemne advertencia,
no meramente para los que son culpables de pecados manifiestos, sino para
todos aquellos que están jugando con la luz y los privilegios que vienen del
cielo. (PP. Cap. 14 La destrucción de Sodoma. Pág. 160, 161)

Jesús también reveló, que al igual que en los tiempos antediluvianos, las
mismas condiciones sociales y sexuales que se dieron en Sodoma y
Gomorra volverán a reproducirse en la actual sociedad que alcanzará un
estado tal de maduración, poco antes del segundo advenimiento de Cristo
y del fin del mundo, Asimismo como sucedió en los días de Lot; comían,
bebían, compraban, vendían, plantaban, edificaban; mas el día en que Lot
salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre, y los destruyó a todos. Así
será el día en que el Hijo del Hombre se manifieste. (Luc. 17: 28-30)

Pero ¿Qué hace diferente que este tipo de prácticas depravadas que se han
venido dando hasta aquí, se conviertan en una reproducción de Sodoma y
Gomorra y como señales del fin de los tiempos?

La diferencia radica esencialmente en la aprobación de la homosexualidad
mediante una legislación a través de los gobiernos, en otras palabras, esta
depravación e inmoralidad es aceptada de forma legislativa, cosa que en el
pasado reciente no se daba, solamente comparable a Sodoma y Gomorra
donde toda la ciudad aprobaba estas prácticas, comenzando por sus
propias autoridades.
29


¿Aprueba Dios esto? ¿Será acaso porque vivimos en tiempos que llamamos
modernos, era de computadores, avances científicos, era espacial y una
sociedad regida por los DD.HH. el argumento como para cambiar la
mentalidad y los valores ya establecidos en cuanto a estos temas?

Dios no se guía por las normativas y declaraciones que los hombres en
conjunto realizan o dictaminan para el resto de la humanidad o por
atrayentes filosofías que presentan las mejores ideas, no, el Dios del cielo
rige la conducta de los hombres y mujeres en base a su ley, verdad
objetiva y en base a esta ley, todo ser humano será juzgado, Así hablad, y
así haced, como los que habéis de ser juzgados por la ley de la
libertad. (Stg. 2: 12)

Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo. Porque escrito
está: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, Y toda
lengua confesará a Dios. De manera que cada uno de nosotros dará a Dios
cuenta de sí. (Ro. 14: 10-12)

La declaración internacional de los DD.HH. puede ser muy loable, buena y
noble, sin embargo, esta tiene su propia esfera de acción dentro de la vida
del ser humano, pero cuando sus enunciados y principios se superponen a
los principios y valores de la ley de Dios, fundamento de su gobierno en el
cielo como en la tierra, y se utilizan sus declaraciones para relativizar la
verdad, justificar la delincuencia, todo tipo de desviaciones y el pecado de
los hombres y de forma concreta, la homosexualidad, atendiendo así, a las
demandas de igualdad de condiciones, entonces, esta carta magna se
convierte en una casa de acogida, escudo y voz de ladrones y depravados,
albergando a toda ave inmunda y aborrecible, pasando a ser la noble
abuelita de la perversión humana.
30


Se destruyó, cayó la tierra; enfermó, cayó el mundo; enfermaron los altos
pueblos de la tierra. Y la tierra se contaminó bajo sus moradores;
porque traspasaron las leyes, falsearon el derecho, quebrantaron el pacto
sempiterno. (Isa. 24: 4-5)

Pero veamos qué dice la Biblia acerca de la manera como considera Dios la
homosexualidad, el caso de Sodoma y Gomorra, pone ya un sólido
fundamento, fueron destruidas, pero a través del tiempo ¿Cambió Dios su
concepto y forma de ver estas prácticas depravadas e inmorales? ¿Acepta
ahora Dios tales aberraciones simplemente porque los tiempos han
cambiado o aun hoy, por la declaración internacional de los DD.HH?

Habló Jehová a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel, y diles: Yo soy
Jehová vuestro Dios.    No haréis como hacen en la tierra de Egipto, en la
cual morasteis; ni haréis como hacen en la tierra de Canaán, a la cual yo os
conduzco, ni andaréis en sus estatutos. Mis ordenanzas pondréis por obra,
y mis estatutos guardaréis, andando en ellos. Yo Jehová vuestro Dios.    Por
tanto, guardaréis mis estatutos y mis ordenanzas, los cuales haciendo el
hombre, vivirá en ellos. Yo Jehová. No te echarás con varón como con
mujer; es abominación. (Lev. 18: 1-5, 22)

Si alguno se ayuntare con varón como con mujer, abominación
hicieron; ambos han de ser muertos; sobre ellos será su sangre. (Lev.
20: 13)

Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios
incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de
cuadrúpedos y de reptiles.
31


Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias
de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios
cuerpos, ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y
dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los
siglos. Amén.

Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus
mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, y
de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la
mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo
hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos
la retribución debida a su extravío.

Quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales
cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se
complacen con los que las practican. (Rom. 1: 22-27, 32)

¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni
los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los
que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos,
ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. (1ª Co. 6:
9-10)

La palabra de Dios es lo suficientemente clara al respecto, Dios condena
tales actos aberrantes, ni los afeminados (Travestis) ni los que se echan
con varones (Homosexuales) o bien lesbianas, jamás heredaran el reino de
Dios, son dignos de muerte.
32


El libro del Apocalipsis revela que al fin del tiempo, todos los que se
perderán y que serán quemados en el lago de fuego, se encuentran bajo
algún pecado cometido. Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y
homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos
tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la
muerte segunda. (Apoc. 21: 8) Seguidamente, el mismo libro amplía la
lista, agregando a otro tipo de personas, Mas los perros estarán fuera, y
los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras, y todo aquel que
ama y hace mentira. (Apoc. 22: 15)

Apocalipsis denomina perros a todos los que practican el pecado de la
homosexualidad, este tipo de personas y que junto con el resto, estarán
fuera de la ciudad de Dios, pero según Apocalipsis, estar fuera de la
ciudad, es sufrir la segunda muerte en el lago de fuego. (Apoc. 20: 10, 15)

Dios no ha cambiado su concepto de la moralidad, la misma Escritura
revela que Dios no cambia y es el mismo por siempre, Porque yo Jehová
no cambio; (Mal. 3: 6) Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los
siglos. (Heb. 13: 8)

Si Dios se dejara modelar por las circunstancias o tuviera una posición
relativista en cuanto a la verdad y la moral, entonces ¿Qué objetivo tendría
revelar su carácter de forma escrita como está en la Biblia? Por lo tanto, si
Dios no cambia, eso significa que su rechazo de estas prácticas aberrantes
es la misma que tuvo en los tiempos antediluvianos, así como también en
Sodoma y Gomorra.
33


  El post modernismo en la relativización de la verdad y los valores

La actual sociedad se está sodomodizando, no nos confundamos con
modernizando, que es algo completamente distinto, la modernidad es una
cosa y esta tiene que estar edificada sobre los principios y valores que Dios
ha establecido, en cambio, una sociedad sodomodizada es otra cosa y esto
es muy diferente, la cual se está levantado, socavando los principios y
valores que la Biblia ha puesto como fundamento.

Nuestra actual sociedad está dominada por la exigencia abrumadora, en
algunos casos, de los DD.HH. todo mundo se aferra a esta doctrina
humanista cuando nos vemos amenazados o cuando ha llegado la hora de
exigir nuestros derechos, por consiguiente, cada uno tiene derecho a
pensar y actuar como quiera y nadie puede ser condenado al respecto
porque cada uno tiene DD.HH. y libertad de expresarse y vivir como
quiera.

El post modernismo ha introducido y dado lugar a la relativización de la
verdad y de los principios morales que regulan el actuar y comportamiento
del ser humano en estos días. Eso significa que lo que era verdad absoluta
en el pasado hoy es cuestionable y de la misma manera, lo que era mentira
o malo en el pasado, hoy también es cuestionable, porque cada ser
humano es portador de su propia verdad, cada uno es un semi dios, capaz
de saber por si mismo lo que es bueno y malo y de encontrar su propio
camino hacia la “luz”.

Por lo tanto, y según esta teoría del postmodernismo, existirían tantas
verdades como personas hay en el mundo, de manera que, la verdad
resultaría en algo completamente subjetiva, dejando de ser sólida y
objetiva y que se encontraría fuera del ser humano.
34


En consecuencia, yo mismo puedo crear mi propia verdad y escala de
valores, no teniendo necesariamente que regirme por un código ético y
moral, como son las Sagradas Escrituras, es decir, la verdad está dentro
de mí y no fuera de mí. Así, fácilmente lo que en un tiempo era malo ahora
es bueno y lo que era bueno ahora es malo, pues uno mismo define lo que
es bueno y malo.

Por lo tanto, nadie tiene derecho de decirle al otro qué es malo y bueno,
nadie puede juzgar a otro ser humano por lo que hace, pues cada ser
humano tiene su propio concepto de la verdad y de los valores, de manera
que, cada uno viva su propia vida como bien le parezca.

Así, la homosexualidad surge como una especie de alternativa, un tercer
sexo y quienes la practiquen, están dentro de sus derechos como
personas. El postmodernismo también ha dado lugar a un amplio
vocabulario que viene a justificar tales comportamientos, así, los términos,
expresión cultural, cultura, expresión artística, arte corporal, desnudo
artístico,   diversidad,   pluralismo,    modernismo,   derechos   humanos,
tolerancia, apertura, son los apelativos para justificar un comportamiento
liberal fuera de todo margen y canon ético y moral ya establecido.

Pero las Sagradas Escrituras en ninguna parte enseñan esto, la Biblia
revela claramente que la verdad no es relativa, sino más bien, absoluta y
no se encuentra en el interior del ser humano, sino fuera de este, pues
proviene de Dios y está en Dios.

Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino.         Le dijo Tomás: Señor, no
sabemos a dónde vas; ¿cómo, pues, podemos saber el camino? Jesús le
dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre,
sino por mí. (Jn. 14: 4-6)
35


Claramente Jesús da a conocer a sus discípulos que la verdad es más que
un concepto, es una persona, Jesús, y en él se encuentran los principios y
valores que conducen al ser humano a la vida eterna, sin embargo, esa
verdad divina fue escrita y entregada al ser humano para su salvación, así
como tener un concepto de qué es lo bueno y qué es lo malo.

Así, lo que es bueno y malo para el ser humano y lo que Dios aborrece,
están claramente ya delineados en las Sagradas Escrituras y de manera
especial, en su ley (Ex. 20: 1-17) y eso no cambiará jamás, porque es la
expresión del mismo carácter de Dios y este no cambia.

Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién
has aprendido; y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras,
las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo
Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para
redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de
Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra. (2ª Tim. 3:
14-17)

Pero ¿Qué dicen las Sagradas Escritura sobre todos aquellos que
consideran la verdad como algo relativo? ¿Qué hay de aquellos que se
rigen por sus propios valores o escala de valores? ¿Qué hay de aquellos
que aprueban el relativismo moral como una forma de apertura a las
nuevas ideas y adaptación a los nuevos tiempos?

¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen
de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por
dulce, y lo dulce por amargo!
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¡Ay de los sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes
delante de sí mismos! ¡Ay de los que son valientes para beber vino, y
hombres fuertes para mezclar bebida; los que justifican al impío
mediante cohecho, y al justo quitan su derecho! (Isa. 5: 20-23)

El relativismo moral y de la verdad, es rechazado abiertamente por la
Biblia, en ella, no existe fundamento para tales suposiciones o doctrinas
filosóficas de los hombres como el relativismo. Muy por el contrario, se
pronuncia un ¡Ay! Sobre todos aquellos que relativizan la verdad y los
principios morales establecidos por Dios para el hombre.

Estos Ayes, bien se pueden traducir en terribles juicios que caerán sobre
todas esas personas, tanto los que inventan las filosofías y pensamientos
que están elaborados para sustituir la verdad de Dios, tal como aparece
revelada en las Sagradas Escrituras, así como todos aquellos quienes se
acogen a esas ideas.

Muchos hoy, hombres y mujeres, desprecian así la verdad de la Biblia
considerando sus verdades y principios como de puritanos, que la práctica
de sus verdades quedó en la edad media, convirtiéndose en obsoleta en el
presente siglo de la modernidad y post modernidad.

Pero si esto es así, entonces ¿Por qué aun hoy, en el presente siglo se sigue
penalizando el crimen, la violación, el incesto, la pedofilia, la poligamia, el
robo, el fraude y otros tantos delitos? Si la Biblia y sus verdades son
obsoletas y de puritanos, entonces, el crimen, el robo, el fraude, el vicio,
deberían de ser hoy virtudes y estar aprobadas por la actual sociedad y la
anarquía reinaría segura como soberana en cada nación y ciudad,
convirtiendo sus calles en campos de batallas y verdaderos barrios bajos,
dominados por verdaderas hordas de ladrones y criminales, veríamos
cuerpos esparcidos por todos lados, mientras que la vida y la propiedad no
estarían seguras en ningún momento.
37


La Biblia hace referencia a estas prácticas como transgresión de la ley de
Dios y esa misma ley enuncia y establece los principios que evitan,
precisamente estos comportamientos inmorales del ser humano, lo cual
nos revela que la verdad de la Biblia nos ilumina hasta el presente siglo,
La hierba se seca, y la flor se marchita, porque el viento de Jehová sopló en
ella; ciertamente como hierba es el pueblo. Sécase la hierba, marchítase la
flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre. (Isa.
40: 7-8)

Los elementos que se coligarán en esta lucha contra la verdad y la justicia,
están ya obrando activamente. La Palabra santa de Dios que nos ha sido
transmitida a costa de tanto padecimiento, de tanta sangre de los mártires,
no es apreciada debidamente. La Biblia está al alcance de todos, pero pocos
son los que la aceptan verdaderamente por guía de la vida. La incredulidad
predomina de modo alarmante, no sólo en el mundo sino también en la
iglesia. Muchos han llegado al        punto de negar doctrinas que son el
fundamento mismo de la fe cristiana.

Los grandes hechos de la creación como los presentan los escritores
inspirados, la caída del hombre, la expiación y el carácter perpetuo de la ley
de Dios son en realidad rechazados entera o parcialmente por gran número
de los que profesan ser cristianos. Miles de personas que se envanecen de
su sabiduría y de su espíritu independiente, consideran como una debilidad
el tener fe implícita en la Biblia; piensan que es prueba de talento superior y
científico argumentar con las Sagradas Escrituras y espiritualizar y eliminar
sus   más   importantes   verdades.    Muchos    ministros   enseñan   a sus
congregaciones y muchos profesores y doctores dicen a sus estudiantes que
la ley de Dios ha sido cambiada o abrogada, y a los que tienen los
requerimientos de ella por válidos y dignos de ser obedecidos literalmente,
se los considera como merecedores tan sólo de burla o desprecio. (CS. Cap.
37 El Conflicto inminente. Pág. 639, 640)
38


Al rechazar la verdad, los hombres rechazan al Autor de ella. Al pisotear la
ley de Dios, se niega la autoridad del Legislador. Es tan fácil hacer un ídolo
de las falsas doctrinas y teorías como tallar un ídolo de madera o piedra. Al
representar falsamente los atributos de Dios, Satanás induce a los hombres
a que se formen un falso concepto con respecto a él. Muchos han
entronizado un ídolo filosófico en lugar de Jehová, mientras que el Dios
viviente, tal cual está revelado en su Palabra, en Cristo y en las obras de la
creación, no es adorado más que por un número relativamente pequeño.

Miles y miles deifican la naturaleza al paso que niegan al Dios de ella.
Aunque en forma diferente, la idolatría existe en el mundo cristiano de hoy
tan ciertamente como existió entre el antiguo Israel en tiempos de Elías. El
Dios de muchos así llamados sabios, o filósofos, poetas, políticos,
periodistas -el Dios de los círculos selectos y a la moda, de muchos colegios
y universidades y hasta de muchos centros de teología- no es mucho mejor
que Baal, el dios-sol de los fenicios. (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág.
640)

Ninguno de los errores aceptados por el mundo cristiano ataca más
atrevidamente la autoridad de Dios, ninguno está en tan abierta oposición
con las enseñanzas de la razón, ninguno es de tan perniciosos resultados
como la doctrina moderna que tanto cunde, de que la ley de Dios ya no es
más de carácter obligatorio para los hombres. Toda nación tiene sus leyes
que exigen respeto y obediencia; ningún gobierno podría subsistir sin ellas;
¿y es posible imaginarse que el Creador del cielo y de la tierra no tenga ley
alguna para gobernar los seres a los cuales creó? Supongamos que los
ministros más eminentes se pusiesen a predicar que las leyes que gobiernan
a su país y amparan los derechos de los ciudadanos no estaban más en
vigencia, que por coartar las libertades del pueblo ya no se les debe
obediencia. ¿Por cuánto tiempo se tolerarían semejantes prédicas? ¿Pero es
acaso mayor ofensa desdeñar las leyes de los estados y de las naciones
39


que pisotear los preceptos divinos, que son el fundamento de todo gobierno?
(CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 640, 641)

Más acertado sería que las naciones aboliesen sus estatutos y dejaran al
pueblo hacer lo que quisiese, antes de que el Legislador del universo
anulase su ley y dejase al mundo sin norma para condenar al culpable o
justificar al obediente. ¿Queremos saber cuál sería el resultado de la
abolición de la ley de Dios? El experimento se ha hecho ya.

Terribles fueron las escenas que se desarrollaron en Francia cuando el
ateísmo ejerció el poder. Entonces el mundo vio que rechazar las
restricciones que Dios impuso equivale a aceptar el gobierno de los más
crueles y despóticos. Cuando se echa a un lado la norma de justicia, queda
abierto el camino para que el príncipe del mal establezca su poder en la
tierra. (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 641)

Siempre que se rechazan los preceptos divinos, el pecado deja de parecer
culpa y la justicia deja de ser deseable. Los que se niegan a someterse al
gobierno de Dios son completamente incapaces de gobernarse a sí mismos.
Debido a sus enseñanzas perniciosas, se implanta el espíritu de
insubordinación   en   el   corazón   de    los   niños   y   jóvenes,   de   suyo
insubordinados, y se obtiene como resultado un estado social donde la
anarquía reina soberana. Al paso que se burlan de la credulidad de los que
obedecen las exigencias de Dios, las multitudes aceptan con avidez los
engaños de Satanás. Se entregan a sus deseos desordenados y practican
los pecados que acarrearon los juicios de Dios sobre los paganos. (CS. Cap.
37 El Conflicto inminente. Pág. 641, 642)
40


Los    que   le   enseñan   al   pueblo     a    considerar   superficialmente     los
mandamientos       de   Dios,    siembran       la   desobediencia    para    recoger
desobediencia. Rechácense enteramente los límites impuestos por la ley
divina y pronto se despreciarán las leyes humanas. Los hombres están
dispuestos a pisotear la ley de Dios por considerarla como un obstáculo
para    su   prosperidad    material,     porque     ella   prohibe   las    prácticas
deshonestas, la codicia, la mentira y el fraude; pero ellos no se imaginan lo
que resultaría de la abolición de los preceptos divinos. Si la ley no tuviera
fuerza alguna ¿por qué habría de temerse el transgredirla? La propiedad ya
no estaría segura. Cada cual se apoderaría por la fuerza de los bienes de su
vecino, y el más fuerte se haría el más rico. Ni siquiera se respetaría la vida.

La institución del matrimonio dejaría de ser baluarte sagrado para la
protección de la familia. El que pudiera, si así lo desease, tomaría la mujer
de su vecino. El quinto mandamiento sería puesto a un lado junto con el
cuarto. Los hijos no vacilarían en atentar contra la vida de sus padres, si al
hacerlo pudiesen satisfacer los deseos de sus corazones corrompidos. El
mundo civilizado se convertiría en una horda de ladrones y asesinos, y la
paz, la tranquilidad y la dicha desaparecerían de la tierra. (CS. Cap. 37 El
Conflicto inminente. Pág. 642)

La doctrina de que los hombres no están obligados a obedecer los
mandamientos de Dios ha debilitado ya el sentimiento de la responsabilidad
moral y ha abierto anchas las compuertas para que la iniquidad aniegue el
mundo. La licencia, la disipación y la corrupción nos invaden como ola
abrumadora. Satanás está trabajando en el seno de las familias. Su
bandera flota hasta en los hogares de los que profesan ser cristianos.
41


En ellos se ven la envidia, las sospechas, la hipocresía, la frialdad, la
rivalidad, las disputas, las traiciones y el desenfreno de los apetitos. Todo el
sistema de doctrinas y principios religiosos que deberían formar el
fundamento y marco de la vida social, parece una mole tambaleante a punto
de desmoronarse en ruinas. Los más viles criminales, echados en la cárcel
por sus delitos, son a menudo objeto de atenciones y obsequios como si
hubiesen llegado a un envidiable grado de distinción.

Se da gran publicidad a las particularidades de su carácter y a sus
crímenes. La prensa publica los detalles escandalosos del vicio, iniciando
así a otros en la práctica del fraude, del robo y del asesinato, y Satanás se
regocija del éxito de sus infernales designios. La infatuación del vicio, la
criminalidad, el terrible incremento de la intemperancia y de la iniquidad, en
toda forma y grado, deberían llamar la atención de todos los que temen a
Dios para que vieran lo que podría hacerse para contener el desborde del
mal. (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 642, 643)
42


              Legislando y legalizando la homosexualidad




De esta manera, el postmodernismo y la relativización de los valores ha
permeado la actual sociedad. Hasta el momento, varios gobiernos de
diferentes pises, tanto de Europa, así como recientemente en latino
América, como es el caso de Argentina y tiempo atrás en EE.UU. aunque
en este país solo de forma estatal, han legislado a favor de la
homosexualidad, donde se reconoce legalmente estas uniones gay.

En otras palabras, legislar a favor de estas prácticas aberrantes es aceptar
y aprobar lo que Dios ha rechazado, condenado y calificado como malo y
degradante, legislar a favor de la homosexualidad, es colocarse por sobre
Dios y ocupar su lugar, donde los hombres, no importando el puesto que
tengan, en un acto de blasfemia, están redefiniendo lo que es bueno y
malo, facultad que Dios no le ha entregado al ser humano.
43


Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e
injusticia        de   los   hombres         que   detienen    con      injusticia    la
verdad; porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo
manifestó.

Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a
una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen; estando
atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad;
llenos       de        envidia,      homicidios,       contiendas,       engaños       y
malignidades; murmuradores,             detractores,    aborrecedores       de      Dios,
injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los
padres, necios,         desleales,     sin    afecto    natural,     implacables,     sin
misericordia; quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que
practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que
también se complacen con los que las practican. (Rom. 1: 18, 28-32)

También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos
peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros,
vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos,
impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes,
crueles,     aborrecedores        de     lo    bueno,     traidores,      impetuosos,
infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán
apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos
evita. (2ª Tim. 3: 1-5)

La Biblia profetiza la apostasía que se desarrollará al fin de los tiempos,
donde los hombres e incluso aquellos que tienen elevados puestos y
mayores responsabilidades, ya sea políticos, como líderes religiosos y
espirituales, abandonarían los principios divinos y seguirán tras los
placeres carnales, desviaciones contra naturaleza, orgías, amor al dinero,
fama, reproduciendo así en sus vidas y la sociedad, tal como lo revelo
44


Jesús, las costumbres y actos inmorales de los hombres y mujeres del
pasado.

Los tribunales están corrompidos. Los magistrados se dejan llevar por el
deseo de las ganancias y el afán de los placeres sensuales. La
intemperancia ha obcecado las facultades de muchos, de suerte que
Satanás los dirige casi a su gusto. Los juristas se dejan pervertir, sobornar y
engañar. La embriaguez y las orgías, la pasión, la envidia, la mala fe
bajo todas sus formas se encuentran entre los que administran las
leyes. "La justicia se mantiene a lo lejos, por cuanto la verdad está caída en
la calle, y la rectitud no puede entrar." (Isaías 59: 14, V.M.) (CS. Cap. 37 El
Conflicto inminente. Pág. 643)

¿Qué hay detrás de estas legislaciones? ¿Qué intereses se ocultan? Mucho
de esto pasa por la corrupción política, mucho de esto, obedece a las
promesas que se hacen con el fin de obtener el voto popular y así, los
hombres venden y cambian los principios y valores divinos por los interese
mundanos, la fama, el dinero y el poder.

La legislación a favor de la homosexualidad para reconocerla en la actual
sociedad y entregarle a los homosexuales igualdad de condiciones, se está
convirtiendo en el efecto dominó. En la medida que varios países ya han
tomado la iniciativa y legislado a favor de la unión gay, otras naciones se
les han unido.

En nuestro país, ya existe también la iniciativa por parte de algunos
políticos, de llevar esta propuesta al congreso con el fin de legalizar y
aprobar la homosexualidad, con lo cual, será más que seguro y conociendo
el estado actual de las cosas y de la misma forma como otros países y sus
gobiernos han descendido y trastocado la escala de valores, que tal
iniciativa, también será aprobada en nuestro país.
45


¿Motivos para esto? ¿Por qué otros lo hacen y no debemos de quedarnos
atrás? Aunque lo que está permeando todo esto, son los mismos
argumentos que se alegan en otras partes del mundo, la igualdad de
condiciones y los DD.HH. pero nos hemos preguntado ¿Qué bien se podrá
esperar de políticos, que han logrado obtener el voto popular para regir los
destinos de la nación y que aprueban y legalizan por ley, la indecencia y la
inmoralidad?

¿Acaso les fue bien y prosperaron los antediluvianos con tales prácticas
aberrantes y degradadas? ¿Acaso prosperaron y les fue igual de bien a los
moradores de Sodoma y Gomorra, ciudades que fueron puestas de ejemplo
(Jud. 7) a todos aquellos quienes habrían de vivir en los postreros días?

De aprobarse una iniciativa como esta y convertida en ley del estado, ¿Qué
valor llegará a tener entonces, la educación de nuestros niños y jóvenes en
las escuelas, liceos, institutos y universidades de nuestro país? ¿Qué valor
llegará a tener la enseñanza de valores y principios que rigen la vida de
cientos de jóvenes?

Una ley como esta, será la grieta en la pared que amenazará la ruina moral
de toda una nación, pondrá al descubierto, revelando la corrupción y
degradación de aquellos que se dicen ser los guías políticos de toda una
sociedad. Porque todo aquel que aprueba y consiente en el pecado, es tan
culpable ante Dios como aquellos que los practican. Los que dejan la ley
alaban a los impíos; Mas los que la guardan contenderán con ellos. (Pr. 28:
4)
46


Legislar y aprobar una iniciativa de esta naturaleza, pondrá en evidencia
que todo lo que se ha venido construyendo en materia de educación y
valores ha sido falaz y por lo mismo, no se molesten los señores políticos,
cenadores y diputados o el gobierno de turno, no importando la inclinación
política que profese, por impulsar mejoras al sistema educativo de la
nación o en exigir a través de la evaluación docente a los profesores por
logros   substanciales    o   el    cumplimiento     transversal     del   programa
curricular.

Porque al hacer todo esto, será efímero y falaz, revelando la idiotez de
quienes se dicen ser sabios, pero que desconocen e ignoran las reales
consecuencias que tendrá en la practica una ley semejante sobre niños y
jóvenes y sobre toda la nación, es cosa de mirar la historia pasada, los
antediluvianos, los moradores de Sodoma y Gomorra, pero la ignorancia e
idiotez y la fragilidad de la memoria histórica del hombre siempre se han
unido, para luego, retorcerse de dolor frente a las consecuencias, pero
cuando ya es demasiado tarde como para retroceder.

De aprobarse una ley que legalice la homosexualidad, ¿Qué ocurrirá más
adelante? ¿Será acaso que el siguiente paso consistirá en incluir en el
programa      educativo   para     escuelas   y   liceos,   los   beneficios   de   la
homosexualidad como materia de estudios o como alternativa sexual para
niños y jóvenes? ¿Le enseñaremos a niños y jóvenes que lo degradante e
indecente es ahora bueno todo porque una ley, redactada y firmada por
una simple autoridad humana lo ha aprobado y legalizado como noble y
bueno? O ¿Nos atreveríamos decir que esto nunca sucederá, de la misma
forma que en épocas pasadas hubiéramos pensado que jamás nunca se
legalizaría la homosexualidad? ¿Cómo podríamos afirmarlo? Si le das una
galleta aun ratón, luego este te pedirá el vaso de leche.
47


Lamentablemente ya hay algunos políticos y quizás, la mayoría de ellos,
así como los medios de comunicación masivos (MCM) están dando las
primeras lecciones. La misma TV. Un medio de comunicación masivo y de
poderosa influencia sobre el espíritu y mente de miles de niños, jóvenes,
adultos y tercera edad, trasmite programas, cuyo contenido, fácilmente se
puede calificar de, hueco, indecente e inmoral, películas y programas de
entretención donde a veces el personaje afeminado se convierte en la
tónica para elevar el raitin televisivo.

Y por otro lado, qué podemos decir de las telenovelas, cuyo contenido de
dudosa moralidad, donde a veces el personaje homosexual forma parte del
guión de este tipo de entretenciones, preparando y transformando la
mentalidad de millones de espectadores, que tendencias como estas, son
normales y buenas, para quienes decidan así adoptarlas y aquello que en
el pasado era malo y repudiable, hoy es bueno y aceptable.


De   esta   manera,     tanto    la   autoridad   política,   que   legaliza   la
homosexualidad, la indecencia e inmoralidad, así como los MCM, se
convierten en los cuervos que arrancan del corazón y la mente de miles de
niños y jóvenes, la semilla que es sembrada con esfuerzo y a veces,
literalmente con lagrimas, al interior de los hogares y las aulas de clases.
48


                 Los juicios divinos se volverán a repetir




Legislar a través de una ley que apruebe el pecado, la corrupción,
depravación e indecencia, basándose en la declaración internacional de los
DD.HH. para otorgar igualdad de condiciones en medio de la sociedad a
aquellos que practican la homosexualidad, es hacer precisamente lo
contrario, es falsear el derecho y corromperlo.

He aquí que Jehová vacía la tierra y la desnuda, y trastorna su faz, y hace
esparcir a sus moradores. Y sucederá así como al pueblo, también al
sacerdote; como al siervo, así a su amo; como a la criada, a su ama; como al
que compra, al que vende; como al que presta, al que toma prestado; como al
que da a logro, así al que lo recibe.
49


La tierra será enteramente vaciada, y completamente saqueada;
porque Jehová ha pronunciado esta palabra. Se destruyó, cayó la
tierra; enfermó, cayó el mundo; enfermaron los altos pueblos de la
tierra. Y la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque
traspasaron las leyes, falsearon el derecho, quebrantaron el pacto
sempiterno. (Isa. 24: 1-5)

Si las autoridades de la tierra proceden a actuar de esta forma o a
consentir en ello, por la obtención de fama, el apoyo y voto popular, poder
y dinero, tengan por cierto que todo esto no quedará impune, estas
legislaciones, aprobando el pecado sodomita, la homosexualidad, no
importando los motivos y aunque los argumentos estén bien planteados y
políticamente correctos, analizados psicológicamente o sociológicamente
por el más erudito o doctor emérito en la materia, traerán serias y terribles
consecuencias sobre las naciones y ciudades del mundo. Porque uno
mayor que toda autoridad de este planeta, ya ha determinado por medio de
su ley lo que es bueno y malo en la vida del ser humano y que la
transgresión de sus requerimientos serán sancionados.

Por esta causa la maldición consumió la tierra, y sus moradores
fueron asolados; por esta causa fueron consumidos los habitantes de la
tierra, y disminuyeron los hombres. Se perdió el vino, enfermó la vid,
gimieron todos los que eran alegres de corazón. Cesó el regocijo de los
panderos, se acabó el estruendo de los que se alegran, cesó la alegría del
arpa. No beberán vino con cantar; la sidra les será amarga a los que la
bebieren. (Isa. 24: 6-9)
50


La Biblia advierte claramente a todos los habitantes de las naciones y sus
autoridades, no importando las banderas o colores políticos o religiosos
que se profesen, que estas ciudades del pasado, sus prácticas anti
naturaleza y sus aberraciones, fueron puestas de ejemplo, es decir, son
precisamente una advertencia para todos aquellos que vivirán en los días
finales de la tierra.

y si condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y de
Gomorra, reduciéndolas a ceniza y poniéndolas de ejemplo a los que
habían de vivir impíamente, y libró al justo Lot, abrumado por la
nefanda conducta de los malvados (porque este justo, que moraba entre
ellos, afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo los hechos inicuos de
ellos), sabe el Señor librar de tentación a los piadosos, y reservar a los
injustos para ser castigados en el día del juicio; y mayormente a aquellos
que, siguiendo la carne, andan en concupiscencia e inmundicia, y
desprecian el señorío. Atrevidos y contumaces, no temen decir mal de las
potestades superiores, mientras que los ángeles, que son mayores en
fuerza y en potencia, no pronuncian juicio de maldición contra ellas delante
del Señor. (2ª P. 2: 6-11)

Como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la
misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de
vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el
castigo del fuego eterno. (Jud. 7)

Tal como lo señala la Biblia, los pecados de los hombres, sus aberraciones
antinaturales,    la    inmundicia   e    inmoralidad,   tendrán   sus   justas
retribuciones, hoy, los hombres hablan de prosperidad, progreso y un
futuro maravilloso, sin embargo, las Escrituras nos presentan otro
mensaje, de advertencia frente a lo que muy pronto sucederá sobre la
tierra.
51


Como los habitantes del valle de Sidim, la gente sueña ahora con
prosperidad y paz. "Escapa por tu vida," es la advertencia de los ángeles de
Dios; pero se oyen otras voces que dicen; "No os inquietéis, no hay nada que
temer." La multitud vocea: "Paz y seguridad," mientras el Cielo declara que
una rápida destrucción está por caer sobre el transgresor.     En la noche
anterior a su destrucción, las ciudades de la llanura se entregaban
desenfrenadamente a los placeres, y se burlaron de los temores y
advertencias del mensajero de Dios; pero aquellos burladores perecieron en
las llamas; en aquella misma noche la puerta de la gracia fue cerrada para
siempre para los impíos y descuidados habitantes de Sodoma. (PP. Cap. 14
La destrucción de Sodoma. Pág. 163)

Las perspectivas de nuestro mundo son ciertamente alarmantes.
Dios está retirando su Espíritu de las ciudades impías, que han
llegado a ser semejantes a las del mundo antediluviano y a Sodoma
y Gomorra. Los habitantes de esas ciudades han sido sometidos a prueba.
Hemos llegado al momento cuando Dios está por castigar a los presuntuosos
malhechores que rehúsan guardar sus mandamientos y desprecian sus
mensajes de advertencia. El que es paciente con los que obran mal, le da a
todos la oportunidad de buscarlo y de humillar sus corazones delante de él.
(Carta 90, del 23 de mayo de 1902, al Hno. Johnson, un laico). 153 (Cada
día con Dios.23 de Mayo. Aseguremos nuestra herencia.) (A- 445)

Si hasta aquí no hemos visto mayores cosas sobre la tierra, como las que
ya han sucedido o están sucediendo, es porque Dios aun tiene paciencia y
misericordia frente a los graves pecados y conductas de los hombres, sin
embargo, se nos advierte que esto no será siempre así. Dios es un Dios de
amor y misericordia y por lo mismo, como actuó en el pasado, no puede
seguir permitiendo por más tiempo un estado de cosas semejantes.
52


Dios no será siempre objeto de burla; no se jugará mucho tiempo con él. "He
aquí el día de Jehová viene, crudo, y de saña y ardor de ira, para tomar la
tierra en soledad, y raer de ella sus pecadores." (Isa. 13:9.) La inmensa
mayoría del mundo desechará la misericordia de Dios, y será sumida en
pronta e irremisible ruina. (PP. Cap. 14 La destrucción de Sodoma. Pág. 163,
164)

Las llamas que consumieron las ciudades de la llanura transmiten hasta
nuestros días la luz de su advertencia. Se nos enseña la temible y solemne
lección de que mientras la misericordia de Dios tiene mucha paciencia con el
transgresor, hay un límite más allá del cual los hombres no pueden seguir
en sus pecados. Cuando se llega a ese límite, se retira el ofrecimiento de la
gracia y comienza la ejecución del juicio. (PP. Cap. 14 La destrucción de
Sodoma. Pág. 160)

Nuestro Dios es un Dios de misericordia. Trata a los transgresores de su ley
con longanimidad y tierna compasión Sin embargo, en esta época nuestra,
cuando hombres y mujeres tienen tanta oportunidad de familiarizarse con la
ley divina según se revela en la Sagrada Escritura, el gran Príncipe del
universo no puede contemplar con satisfacción las ciudades impías, donde
reinan la violencia y el crimen Se está acercando rápidamente el momento
en que acabará la tolerancia de Dios hacia aquellos que persisten en la
desobediencia

La tolerancia de Dios ha sido muy grande, tan grande que cuando
consideramos    el   continuo   desprecio   manifestado   hacia   sus   santos
mandamientos, nos asombramos El Omnipotente ha ejercido un poder
restrictivo sobre sus propios atributos Pero se levantará ciertamente para
castigar a los impíos, que con tanta audacia desafían las justas exigencias
del Decálogo.
53


Dios concede a los hombres un tiempo de gracia; pero existe un punto más
allá del cual se agota la paciencia divina y se han de manifestar con
seguridad los juicios de Dios. El Señor soporta durante mucho tiempo a los
hombres y las ciudades, enviando misericordiosamente amonestaciones
para salvarlos de la ira divina; pero llegará el momento en que ya no se
oirán las súplicas de misericordia, y el elemento rebelde que continúe
rechazando la luz de la verdad quedará raído, por efecto de la misericordia
hacia él mismo y hacia aquellos que podrían, si no fuese así, sentir la
influencia de su ejemplo.

Está muy cerca el momento en que habrá en el mundo una tristeza que
ningún bálsamo humano podrá disipar. Se está retirando el Espíritu de Dios.
Se siguen unos a otros en rápida sucesión los desastres por mar y tierra.
¡Con cuánta frecuencia oímos hablar de terremotos y ciclones, así como de la
destrucción producida por incendios e inundaciones, con gran pérdida de
vidas y propiedades!

Aparentemente estas calamidades son estallidos caprichosos de las
fuerzas desorganizadas y desordenadas de la naturaleza, completamente
fuera del dominio humano; pero en todas ellas puede leerse el propósito de
Dios. Se cuentan entre los instrumentos por medio de los cuales él procura
despertar en hombres y mujeres un sentido del peligro que corren. (PR. Cap.
22 Nínive. Ciudad sobremanera grande. Pág. 205, 206, 207)

Cuando llegue el terrible momento en que esta paciencia divina se agote,
entonces veremos sobre nuestro mundo las más grandes calamidades,
desastres y catástrofes nunca antes vistas sobre la tierra, el pecado y la
inmoralidad aprobadas y legalizadas por las autoridades de la tierra, por
sobre los estatutos y preceptos divinos, reproducirán las condiciones que
vivieron los antiguos moradores de la tierra, Sodoma y Gomorra, parecerán
entonces una simple maqueta, frente a un mundo que recogerá, lo que
simplemente ha sembrado.
54


Otra tempestad se aproxima ahora. La tierra será otra vez barrida por la
asoladora ira de Dios, y el pecado y los pecadores serán destruidos. (PP.
Cap. 7 El diluvio. Pág. 89, 90)

Se acerca el tiempo cuando las grandes ciudades serán visitadas por los
juicios de Dios.      Antes de mucho, esas ciudades serán sacudidas con
violencia.     Cualesquiera que sean las dimensiones y la solidez de los
edificios, o las precauciones tomadas contra incendios, si el dedo de Dios
toca esas casas, en algunos minutos u horas quedarán reducidas a
escombros.

Las impías ciudades de nuestro mundo serán destruidas.              Mediante las
catástrofes que ocasionan actualmente la ruina de grandes edificios y de
barrios enteros, Dios nos muestra lo que acontecerá en toda la tierra. Nos
ha dicho: "De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama se
enternece, y las hojas brotan, sabéis que el verano está cerca.

Así también vosotros, cuando viereis todas estas cosas, sabed que el Hijo
del hombre está cercano, a las puertas" (Mateo 24: 32, 33). 266 (Consejos
sobre la salud. Sección VI, obra institucional de éxito. La ubicación de los
sanatorios.)

Se me pide que declare el mensaje de que las ciudades llenas de
transgresión y pecaminosas en extremo, serán destruidas por terremotos,
incendios e inundaciones. Todo el mundo será advertido de que existe un
Dios que hará notoria su autoridad como Dios.              Sus agentes invisibles
causarán       destrucción,   devastación    y   muerte.   Todas   las   riquezas
acumuladas serán como la nada...
55


Acontecerán calamidades, calamidades de lo más pavorosas, de lo más
inesperadas; y estas destrucciones se seguirán la una a la otra.        Si se
presta atención a las amonestaciones que Dios ha dado, y si las iglesias se
arrepienten y regresan a la lealtad, entonces otras ciudades serán
perdonadas por un tiempo. Pero si los hombres que han sido engañados
continúan en el mismo camino en el cual han estado andando, sin prestar
atención a la ley de Dios y presentando falsedades ante el pueblo, Dios les
permite sufrir calamidades, para que sus sentidos sean despertados...

El Señor no desechará repentinamente a los transgresores o destruirá a
naciones enteras; sino que castigará a ciudades y lugares donde los
hombres se han prestado para ser poseídos por los agentes satánicos. Las
ciudades de las naciones serán tratadas con estrictez, y sin embargo, no
serán visitadas con la extrema indignación de Dios, porque algunas almas
renunciarán a los engaños del enemigo, y se arrepentirán y convertirán,
mientras que las masas estarán atesorando ira para el día de la ira
(Manuscrito 35, 1906). (EV. Cap. 2 Las masas de la población metropolitana.
A la sombra de la condenación inminente. Si las amonestaciones no son
escuchadas. Pág. 24, 25)

Terribles conmociones vendrán sobre la tierra, y los palacios señoriales
levantados a gran costo se convertirán ciertamente en montones de ruinas.-
3MR 312 (1891)

Cuando la mano restrictiva de Dios se retire, el destructor comenzará su
trabajo.    Entonces   ocurrirán   en    nuestras   ciudades   las   mayores
calamidades.-3MR 314 (1897)

El fin está cerca y cada ciudad va a ser trastornada de diferentes maneras.
Habrá confusión en cada ciudad. Todo lo que puede ser sacudido lo será, y
no sabe qué pasará luego. Los juicios serán de acuerdo con maldad de la,
gente y la luz de verdad que han tenido.1MR 248 (1902)
56


¡Ojalá que el pueblo de Dios tuviera una noción de destrucción inminente de
millares de ciudades, ahora casi [totalmente] entregadas a la idolatría!-Ev
26 (1903)

Falta poco para que las grandes ciudades sean barridas, de manera que
todos   deben   ser   amonestados    acerca   de     la   inminencia   de   estas
calamidades.-Ev 26 (1910) (EUD. Enfrentando la crisis final de la tierra.
Cap. 8 Las ciudades. Descienden juicios sobre las ciudades.)

Terribles serán las consecuencias a que llegará el mundo en la
complacencia de la pasión más vil y degradante en aras de lo que se
considera superior a los requerimientos y estatutos divinos. ¿Qué valor
tendrán entonces en esos momentos terribles y desesperantes los famosos
DD.HH, la igualdad de condiciones y todo argumento esgrimido por
justificar la inmoralidad cuando el espíritu humano se vea frente a los
terribles desastres y catástrofes sobre la tierra?

Hoy estamos viviendo en un tiempo en que la actual sociedad, poco a poco
se está sodomodizando y reproduciendo a escala mundial los mismos
pecados del pasado, ¿Cuál será entonces nuestra posición como
cristianos? ¿Nos dejaremos llevar por las declaraciones de los hombres que
correctamente estipuladas se alzan por sobre la palabra de Dios?
¿Modificaremos nuestras creencias, principios y valores, todo porque los
tiempos han cambiado? ¿Será acaso que nos abriremos a esto todo por un
asunto cultural o la famosa diversidad?
57


La mayor necesidad del mundo es la de hombres que no se vendan ni se
compren; hombres que sean sinceros y honrados en lo más intimo de sus
almas; hombres que no teman dar al pecado el nombre que le corresponde;
hombres cuya conciencia sea tan leal al deber como la brújula al polo;
hombres que se mantengan de parte de la justicia aunque se desplomen los
cielos. (La Educación, pág. 54).

Lo único que se necesita para que el mal triunfe sobre la tierra, es que los
justos no hagan nada.




Fernando Antonio Silva Quintana.
Profesor de Religión y estudios en Teología
Tercerangel.silva@gmail.com


MTA/ Noviembre - 2011
www.mensajetercerangel.com

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  • 1. 1 SODOMA Y GOMORRA EN EL SIGLO XXI Los homosexuales y sus derechos legalizados, hacia una sociedad sodomodizada ¡Ay de los que traen la iniquidad con cuerdas de vanidad, y el pecado como con coyundas de carreta, los cuales dicen: Venga ya, apresúrese su obra, y veamos; acérquese, y venga el consejo del Santo de Israel, para que lo sepamos! ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo! (Isa. 5: 18-20) ___________________________________________________ L os acontecimientos que han tenido lugar durante estos últimos días, revelan claramente que el mundo se encuentra viviendo en sus días finales y reproduciendo aceleradamente todas las características de la sociedad de la cual, Cristo, profetizó que se daría poco antes de su regreso y del fin de todas las cosas.
  • 2. 2 Asimismo como sucedió en los días de Lot; comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, edificaban; mas el día en que Lot salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre, y los destruyó a todos. Así será el día en que el Hijo del Hombre se manifieste. (Luc. 17: 28-30) Esta profecía se está cumpliendo de manera fidedigna ya en nuestros días, podemos ver cómo hoy, la depravación y los actos contra naturaleza que existían en los días de Lot, en tiempos de Sodoma y Gomorra, están formando parte de nuestra sociedad en la actualidad y extendiéndose a escala mundial. Homosexuales en todo el mundo, se unen con la finalidad de exigir sus derechos para vivir en medio de una sociedad con igualdad de condiciones, sin embargo, lo más terrible, es que los mismos gobiernos y la autoridad civil está dando la razón y consintiendo en aprobar tales peticiones, legalizando así, aquellas prácticas que, en tiempos pasados, condenaron a las ciudades de Sodoma y Gomorra a ser destruidas por medio del fuego y del azufre, en lo que la Biblia, claramente señala, como pecado y actos que van contra naturaleza. Pero ¿Nos hemos detenido a reflexionar en lo que está sucediendo hoy y hacia dónde vamos como humanidad? ¿Es aceptada esta práctica y unión homosexual ante los ojos de Dios? ¿Aprobará Dios que dos personas del mismo sexo se unan en prácticas y convivencia sexuales? Muchos quienes tienen estas prácticas y de quienes los defienden, alegan en su favor sus derechos, es decir, que cada persona en este mundo y en cada sociedad tiene DD.HH. y en consecuencia, es libre de hacer lo que le parezca. Al parecer, la famosa doctrina de los DD.HH. se ha transformado en el juez ético y moral por excelencia, aun por sobre Dios mismo, para definir o redefinir lo que es bueno y malo, legalizar y aprobar cualquier práctica de los seres humanos, convirtiéndose, por otro lado, en una
  • 3. 3 especie de último refugio a modo de una abuelita que aprueba todo lo que su nieto le pide en la persistente negativa de sus padres. ¿Está Dios obligado a aceptar las peticiones de estos hombres y mujeres, que han extraviado sus caminos, porque simplemente o complicadamente tienen DD.HH, el caballito de batalla de la actual sociedad? ¿Significa esto, que bajo la actual doctrina de los DD.HH. lo que en un tiempo Dios repudió y condenó, se ve ahora obligado a cambiar de parecer por un conjunto de normativas humanas, marchas y protestas?
  • 4. 4 ¿Quién le dio la facultad y el poder ético y moral al ser humano para definir o redefinir lo que es bueno y malo? Todo lo que es bueno y malo, justo e injusto, inicuo o benigno, está desde hace mucho tiempo ya definido y establecido por Dios mismo, la máxima autoridad ética y moral del universo, por medio de los principios estipulados y escritos en su palabra, la Biblia. ¿Será acaso que la doctrina humanista de los DD.HH. tiene el poder de imponerse por sobre Dios, los principios y valores bíblicos? O ¿Es el tiempo el que tiene la autoridad y la última palabra para redefinir si ciertas prácticas son buenas o malas? Y ¿Qué es el tiempo, alguna autoridad ética y moral?
  • 5. 5 Para tener una mejor claridad sobre el asunto en cuestión, nos hemos preguntado alguna vez ¿Cuál es el origen de estas prácticas aberrantes? ¿Sabemos en dónde y con quién o quienes se originaron la homosexualidad y cuál era la visión y posición de Dios con respecto a estos actos de hombres y mujeres del pasado? ¿Creó Dios un tercer sexo, como una especie de salida alternativa, para todos aquellos que se sintieran insatisfechos o “atrapados” en sus cuerpos, tuvieran dudas o estuvieran confundidos sobre su identidad sexual? ¿Es la Biblia un libro ambiguo con respecto a los valores o tener una posición con respecto a la sexualidad o a la identidad sexual del ser humano? Varón y hembra los creó
  • 6. 6 Para poder responder a todas estas interrogantes y comenzar a dilucidar con plena claridad el tema o adoptar alguna posición al respecto, tenemos que remontarnos al origen del hombre y de la mujer. La Biblia nos revela claramente que en el principio creó Dios, un hombre y una mujer, Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. (Gén. 1: 27) el texto señala definidamente dos sexos, hombre y mujer, en ningún momento la Biblia se torna ambigua o vacilante como para dar lugar a especulaciones o sexos alternativos. Seguidamente, la primera unión matrimonial que existió sobre la tierra y con ella, se establece el modelo para el resto de la humanidad, fue entre un hombre y una mujer, unión celebrada y aprobada por Dios mismo en persona. Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él. Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar. Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre. Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del varón fue tomada. Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne. Y estaban ambos desnudos, Adán y su mujer, y no se avergonzaban. (Gén. 2: 18, 21-25)
  • 7. 7 Fue este el modelo creado por Dios para toda la humanidad y por siempre, un hombre y una mujer, como protagonistas fundamentales del matrimonio, Dios no creó un tercer sexo, como muchos hoy en día, buscan respuestas o mejor dicho, buscan las alternativas para justificar la corrupción, depravación y la homosexualidad. La Biblia revela y enseña como norma válida de vida ante los ojos de Dios, que la unión sexual aprobada por Dios mismo es entre un hombre y una mujer y dentro del círculo del matrimonio. Todo lo que esté fuera de estas normativas y principios, es degradación, corrupción y depravación moral, que en términos sencillos se denomina como pecado. “Se casaban y se daban en casamiento” Sin embargo, este modelo fue corrompido por el mismo hombre, en apostasía y separado de Dios, Caín fue uno de los primeros en pervertir lo que Dios había establecido, desde que se convirtió en el primer criminal sobre la tierra, (Gén. 4: 8) su descendencia sería un semillero del mal que corrompería a todo el mundo antediluviano. Uno de estos descendientes,
  • 8. 8 Lamec, se convirtió en el primer caso de poligamia registrado en la Biblia, este patriarca del mal, pervirtió de esta manera el modelo original del matrimonio establecido por Dios en el Edén, Y Lamec tomó para sí dos mujeres; el nombre de la una fue Ada, y el nombre de la otra, Zila. (Gén. 4: 19) La raza de seres humanos que vivió en tiempos antediluvianos, se cuenta entre la más poderosa que haya existido sobre la tierra. El estado físico y mental de estos seres era increíble, con alturas que superaban los cuatro metros o más, (Gén. 6: 4) además, la Escritura revela que su total de vida alcanzaba cerca de los 950 años y que fácilmente podían llegar a vivir el milenio.
  • 9. 9 Al trascurrir el tiempo en aquella temprana era de la tierra, los hombres comenzaron a desarrollar un elevado índice de maldad y junto con ello, la corrupción y depravación, en todas las formas posibles de ser concebidas, se fueron ahondando más y más, hasta convertirse en algo fuera de control e inexplicables para la razón. Las poderosas facultades mentales, con un grado de inteligencia inimaginable, fueron empleadas en la invención del mal y de todo aquello que sirviera para satisfacer el placer. Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal. Y se corrompió la tierra delante de Dios, y estaba la tierra llena de violencia. Y miró Dios la tierra, y he aquí que estaba corrompida; porque toda carne había corrompido su camino sobre la tierra. (Gén. 6: 5, 11-12) A tal punto llegó el índice de violencia, depravación y corrupción, que la Biblia señala: Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en su corazón. (Gén. 6: 5-6) El crimen, la violencia extrema, la idolatría, los experimentos con animales y mutaciones genéticas controladas, actos contra naturaleza, como la homosexualidad, sexo con animales, rebelión abierta contra Dios y muchos otros actos inimaginables, se cuentan dentro de la larga lista que formaban parte de la vida social y los tiempos antediluvianos. Todo esto, trajo consigo serias y terribles consecuencias para aquella civilización, Dios, en su carácter de gobernante supremo, no podía seguir permitiendo un estado tal de cosas sobre la tierra, Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años. Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos
  • 10. 10 hecho. Dijo, pues, Dios a Noé: He decidido el fin de todo ser, porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí que yo los destruiré con la tierra. (Gén. 6: 3, 7, 13) Tras ciento veinte años de gracia y misericordia a través de la predicación de Noé, Dios terminaría finalmente con toda aquella depravación por medio de un poderoso cataclismo mundial, el diluvio, donde solamente ocho personas se salvarían, (Gén. 7: 1, 10-13) aceptando el llamado y el mensaje de Dios al arrepentimiento, misericordia que también fue extendida para todos aquellos que eran depravados y corruptos.
  • 11. 11 Desde que Dios instituyera el primer modelo del matrimonio entre un hombre y una mujer, hasta que los hombres desviaron sus caminos del sendero del bien, como resultado de la entrada del pecado, (Gén. 3: 1- 24) las consecuencias sociales y en todo orden de cosas que trajo consigo esto sobre la tierra fueron desastrosas, violencia, corrupción y depravación, que finalmente Dios tuvo que destruirlos junto con la tierra. Con una raza tan poderosa como lo fue la antediluviana ¿Qué hubiera pasado sobre la tierra, si Dios permitía que siguiera un estado de cosas semejantes? ¿El bien y el conocimiento de Dios sobre la tierra hubieran desaparecido para siempre?
  • 12. 12 Y por otro lado, si Dios no intervenía, las entidades superiores, como los ángeles y los habitantes de otros mundos, ¿Cómo hubieran reaccionado frente a Dios, al permitir que siguieran cosas semejantes sobre la tierra? ¿En dónde hubiera quedado la decencia, la moral, el pudor, el respeto a la vida, el orden, la seguridad y la justicia? El mundo antediluviano y su sociedad, revelan a las claras hasta nuestros días, que pervertir y degradar lo que Dios ha establecido como santo y sagrado como lo es el matrimonio, trae consigo serias y catastróficas consecuencias con resultados eternos para los seres humanos. Los pueblos cananeos
  • 13. 13 Una vez que terminó el diluvio y los hombres poblaron la tierra nuevamente, comenzaron a reproducirse rápidamente las mismas actitudes y pecados que destruyeron la tierra por el gran cataclismo universal, los hombres llegaron a alcanzar un índice de maldad tal, que los llevó una vez más, a las mismas prácticas aberrantes de sus antepasados. De los tres hijos de Noé, de los cuales fue llena toda la tierra, (Gén. 9: 18- 19) Cam, el segundo hijo, resultó ser depravado y un pervertido. Cam era corrupto, su inclinación al mal y la depravación sexual extrema quedó de manifestada al ver este, la desnude de su propio padre, (Gén. 9: 20-23) lo cual, en el fondo, puede ser interpretado como un acto de violación o relación sexual aberrante con su progenitor, una vez que Noé despertó de su embriaguez y supo lo que le había hecho su hijo más joven, y dijo: Maldito sea Canaán; (Gén. 9: 24-25) Sobre este joven, el hijo de Cam, cae una gran maldición pronunciada por su propio abuelo. El pasaje citado, señala que cuando Noé despertó de su embriagues, supo lo que le había hecho su hijo más joven, pero, ¿Cómo supo Noé lo que había hecho su hijo, si este estaba embriagado a tal punto de quedarse dormido? El relato señala que Cam, al ver la desnudes de su propio padre, se lo contó a sus hermanos, Sem y Jafet, (Gén. 9: 22-23) lo cual puede sugerir que ambos hermanos, le contaron a su padre lo que había hecho Cam, su hermano. O bien, Noé, una vez pasada la borrachera, sintió en su propio cuerpo que había sido violado, confirmando Sem y Jafet tal acontecimiento. Como sea, el texto señala un acto de parte de Cam, había hecho o hizo, (v. 24) señalando una acción, algo activo y no pasivo como resultaría del simple hecho de mirar la desnudez, lo cual revela un acto sexual aberrante de violación y homosexualidad en contra de su propio padre.
  • 14. 14 ¿Pero de donde había aprendido Cam tales costumbres aberrantes si no hacía nada que había salido del arca? ¿Cómo aprendió tales prácticas si fue criado en el seno de una familia temerosa de Dios? La única respuesta posible se encuentra en la vida antediluviana, y efectivamente, Cam había aprendido esas prácticas de los hombres y mujeres que fueron destruidos por el diluvio, la corrupción moral y la depravación sexual, tuvieron una fuerte influencia sobre Cam, contaminando la mente y el espíritu de ese joven al mezclarse con los corruptos y al observar actos y prácticas homosexuales de aquella sociedad antediluviana. De esta manera, y una vez salido del arca y tan pronto como tuvo la oportunidad, Cam puso en práctica los mismos actos sexuales pervertidos y de la forma más degradante, con su propio padre, de esta forma, la descendencia de Cam sería portadora de una maldición y los pueblos que saldrían de tal descendencia, serían llamados los cananeos. (Gén. 10: 6- 20) Estos pueblos fueron los más corruptos y depravados que poblaron la tierra de entonces y la influencia que tuvieron sobre la sociedad de aquel tiempo fue poderosa, pero que término finalmente, con las más terribles consecuencias.
  • 15. 15 Sodoma y Gomorra y las ciudades de la llanura Sodoma y Gomorra y todas las ciudades de la llanura de Sinar (Gén. 11: 1- 2) revelan y dejan en plena evidencia la depravación de los pueblos cananeos, la vida social que se llevó al interior de estas ciudades, llegó a un clímax e índice de maldad y depravación extrema, que una vez más, Dios se vio obligado a intervenir en los asuntos humanos. Sodoma y Gomorra, se convirtieron hasta el presente, en íconos de depravación sexual sobre la tierra y además, se transformaron en un evento escatológico a escala de la condición final a la cual llegará la humanidad poco antes de que Cristo retorne a la tierra. Estas ciudades estaban conformadas por los pueblos cananeos, descendientes de Canaán (Gén. 10: 15-20) y del originador de toda depravación sexual postdiluviana sobre la tierra, Cam.
  • 16. 16 Reinaban en Sodoma el alboroto y el júbilo, los festines y las borracheras. Las más viles y más brutales pasiones imperaban desenfrenadas. Los habitantes desafiaban públicamente a Dios y a su ley, y encontraban deleite en los actos de violencia. Aunque tenían ante sí el ejemplo del mundo antediluviano, y sabían cómo se había manifestado la ira de Dios en su destrucción, sin embargo, seguían la misma conducta impía. (PP. Cap. 14 La destrucción de Sodoma. Pág. 153) Llama la atención, que la Biblia nos revela que finalmente todos los moradores de Sodoma eran corruptos y quienes formaban parte de la autoridad de la ciudad, de una u otra forma, también llegaron a formar parte de estas prácticas y aprobarlas. El relato bíblico de Génesis capítulo 19, revela que hasta la propia juventud de esa ciudad y tal vez hasta los mismos niños, estaban de igual manera involucrados en las prácticas homosexuales, la influencia de los más adultos, “hasta el más viejo”, ejercieron su influencia corrupta sobre sus tiernas mentes. En el caso de Sodoma, la depravación sexual a la cual habían llegado sus moradores fue tal, que toda la ciudad estaba involucrada en tales prácticas, (v. 4) desde el más joven hasta el más viejo, lo cual revela una iniciación en prácticas depravadas y seguidamente, toda una vida de homosexualidad, desde bien temprano en la vida. ¿Significa esto que los niños de Sodoma se criaron en medio de matrimonios homosexuales, aprendiendo tales prácticas desde su misma infancia? ¿Será posible que los homosexuales de Sodoma adoptaran niños y los criaran como a hijos?
  • 17. 17 Por otro lado, esto revela que la influencia de las prácticas homosexuales de los adultos, hizo un profundo impacto en las tiernas mentes de los niños y la juventud de aquella sociedad, también revela que nadie se opuso a tales prácticas inmorales, todos sus habitantes las consideraron como buenas, comenzando por la misma autoridad de la ciudad, que finalmente todos, sin excepción alguna, terminaron por aprobarlas y practicarlas. Las Escrituras revelan que estos hombres y mujeres, jóvenes y viejos, habían alcanzado tal índice de maldad, depravación y corrupción moral que se hizo necesaria y urgente la intervención divina, Mas los hombres de Sodoma eran malos y pecadores contra Jehová en gran manera. Entonces Jehová le dijo: Por cuanto el clamor contra Sodoma y Gomorra se aumenta más y más, y el pecado de ellos se ha agravado en extremo, (Gén. 13: 13; 18: 20) Estos textos dejan ver las condiciones sociales y morales a las cuales, todos estos moradores habían llegado, se habla que su pecado aumentaba más y más y se tornaba muy grave ante los ojos de Dios. No solo practicaban la homosexualidad como una alternativa en sus vidas, sino que también tenían relaciones sexuales con animales, de donde se deriva el término, acto sodomita, para referirse a este tipo de aberraciones con animales. Para cuando llegó el momento final de estas ciudades y antes de ser destruidas, Dios envió ángeles con la misión de sacar de ese lugar a Lot y su familia, al tiempo en que llegaron los ángeles a la ciudad, esa última noche, dejó en plena evidencia las prácticas aberrantes de quienes eran homosexuales, a saber… TODA LA CIUDAD.
  • 18. 18 Mas él porfió con ellos mucho, y fueron con él, y entraron en su casa; y les hizo banquete, y coció panes sin levadura, y comieron. Pero antes que se acostasen, rodearon la casa los hombres de la ciudad, los varones de Sodoma, todo el pueblo junto, desde el más joven hasta el más viejo. Y llamaron a Lot, y le dijeron: ¿Dónde están los varones que vinieron a ti esta noche? Sácalos, para que los conozcamos. Entonces Lot salió a ellos a la puerta, y cerró la puerta tras sí, y dijo: Os ruego, hermanos míos, que no hagáis tal maldad. He aquí ahora yo tengo dos hijas que no han conocido varón; os las sacaré fuera, y haced de ellas como bien os pareciere; solamente que a estos varones no hagáis nada, pues que vinieron a la sombra de mi tejado. (Gén. 19: 3- 8) En este pasaje de las Sagradas Escrituras, se nos revela que una vez que los moradores de Sodoma se enteraron que Lot tenía visitas (los ángeles en forma humana) inmediatamente se corrió la voz por toda la ciudad y rodearon su casa, ¿Quiénes estaban involucrados? Dice la Escritura, desde el más joven hasta el más viejo, todo el pueblo junto (v. 4) ¿Qué querían hacer? Dice el texto que querían conocerlos. (v. 5) Sin embargo, la palabra conocer, empleada aquí, no está en el sentido de conocer socialmente a un extraño para saludarlo como lo hacemos hoy, no, esa palabra denota una relación corporal, sexual, y es la misma palabra hebrea que se usa en Génesis 4: 1 cuando Adán conoció a su mujer, Eva y de donde tuvieron a su primer hijo, Caín. ¿Acaso no conocía Adán a Eva mucho tiempo antes de tener a su primer hijo? (Gén. 2: 18-25) claro que sí, y eso fue antes que entrara el pecado, por lo tanto, resulta evidente que aquí se está refiriendo a una relación sexual entre un hombre y una mujer y no a un conocer desde el punto de vista social.
  • 19. 19 Luego, más adelante, también se habla que Adán conoció a su esposa Eva, pero usa la palabra de nuevo, es decir, volvieron a tener relaciones sexuales y de tal acto, nació su tercer hijo, Set. (Gén. 4: 25) Cuando los hombres de Sodoma exigieron a Lot que sacara afuera a aquellos “varones”, ellos querían conocerlos, (Gén. 19: 5) es decir, querían tener relaciones sexuales con ellos, sin embargo, y lo impresionante de esto, era que todo el pueblo, junto y unido, estaba involucrado, de manera que de haberse logrado llevar a efecto lo que intentaban hacer, se hubiera convertido aquello, en un acto depravado de violación masiva. Para evitar esto, Lot les ofreció a sus hijas que no habían conocido varón, es decir eran vírgenes, esto nos comprueba una vez más, que el acto que esos hombres querían cometer era de naturaleza sexual, si no fuera así ¿Por qué Lot les ofreció a sus hijas para satisfacer sus demandas? También el texto nos revela que esos hombres no aceptaron la solución de Lot, con lo cual es una fuerte evidencia que revela la profunda depravación homosexual que había en ellos, que ni siquiera dos mujeres jóvenes y vírgenes llamaron su atención. (v. 8)
  • 20. 20 Pero ¿Cómo pudo toda una ciudad, así como las otras de aquella llanura, adoptar tendencias homosexuales? ¿Cómo es posible que la corrupción y depravación sexual alcanzaran índices de maldad tan elevados? ¿Será acaso que la autoridad de estas ciudades o la forma de gobierno que las unía, permitieron esto, llegando también a estar involucradas en tales actos homosexuales? Fuego y Azufre en la destrucción de Sodoma y Gomorra Finalmente, los ángeles ejercieron su poder divino y protegieron a Lot y su familia, hiriendo con ceguera y oscuridad a aquellos corruptos moradores. (Gén. 19: 10-11) Bajo la orden de los ángeles quienes los apuraban para salir de la ciudad y ponerse a resguardo, solamente Lot y sus dos hijas se salvaron huyendo hacia los montes. Estando lejos y una vez a salvos, Dios desató su poder destructor sobre aquellos corruptos moradores.
  • 21. 21 Date prisa, escápate allá; porque nada podré hacer hasta que hayas llegado allí. Por eso fue llamado el nombre de la ciudad, Zoar. El sol salía sobre la tierra, cuando Lot llegó a Zoar. Entonces Jehová hizo llover sobre Sodoma y sobre Gomorra azufre y fuego de parte de Jehová desde los cielos; y destruyó las ciudades, y toda aquella llanura, con todos los moradores de aquellas ciudades, y el fruto de la tierra. (Gén. 19: 22- 25) Todo fue destruido por el fuego y el azufre, nada sobrevivió, aquel fértil y próspero valle, fue convertido en la tierra más estéril y sin vida del planeta, la devastación fue completa, ninguno de sus moradores se detuvo jamás a pensar en las consecuencias que traerían sus aberraciones, todos, seguramente creyeron, que nada ocurriría y que la vida seguiría como estaba. Una vez destruidas Sodoma y Gomorra y todas las ciudades de la llanura, la Biblia revela cuan profunda fue la influencia que tuvieron las prácticas y estilo de vida aberrantes y degradadas, aun sobre las propias hijas de Lot. Al ver que no había quedado varón sobre la tierra para unirse a ellas, procrear y mantener la descendencia, las dos hijas de este patriarca, embriagaron a su propio padre para concebir de él descendencia. (Gén. 19: 30-32) El relato inspirado señala que la primera noche durmió la mayor, mientras que a la noche siguiente le tocó el turno a la menor, (Gén. 19: 32-36) los hijos que nacieron de tal unión se llamaron Moab y Ben-ammi. Moab, fue el padre de todos los moabitas, mientras que el segundo hijo, Ben- ammi, fue el padre de todos los amonitas, (v. 37-38) ambos, moabitas y amonitas, siglos más tarde, fueron los pueblos más crueles sobre la tierra con el futuro pueblo de Israel, haciéndole la vida imposible. (2ª Cr. 20)
  • 22. 22 ¿Pero acaso acostarse con su propio padre y concebir de él, no es incesto? ¿Dónde aprendieron aquellas señoritas o doncellas, tales costumbres aberrantes y abominables? Es evidente que de Sodoma, las relaciones sexuales con familiares cercanos y como resultado el incesto, era otra práctica abominable de Sodoma y Gomorra que se sumaba, a la larga lista de pecados y depravaciones sexuales. Las hijas de Lot, son un claro ejemplo a través de todos los tiempos, para todos aquellos, quienes piensan y creen o se convencen que ver los actos pecaminosos y abominables que otros cometen no tendrá una influencia sobre el alma y la mente, la Biblia a través de estos casos, revela claramente que están completamente equivocados al respecto. (Isa. 33: 14- 17) Sin embargo, la Biblia también nos revela, entre otras cosas, que la homosexualidad es tan antigua y milenaria como la prostitución y que tales prácticas aberrantes son igualmente condenables por parte de Dios, sino fuera así ¿Por qué entonces fueron destruidos los moradores de Sodoma y Gomorra? ¿Por qué Dios no consintió o condescendió en aprobar sus prácticas contra naturaleza y así evitar estos juicios? ¿Por qué Dios simplemente no hizo caso de las prácticas inmorales y aberrantes de aquellos moradores o cambio su concepto de la moralidad para evitar destruirlos y poner así fin a las prácticas homosexuales? ¿Por qué Dios no cambió en esos momentos la naturaleza y concepto del matrimonio y de las prácticas sexuales destinadas solo entre un hombre y una mujer?
  • 23. 23 Por otro lado, ¿Qué hubiera pasado sobre la tierra de entonces y hasta nuestros días, si Dios no hubiera intervenido de la manera como lo hizo? Si al interior de aquellas ciudades todos, desde el más joven hasta el más viejo, estaban influenciados y corrompidos por aquellas prácticas, de haberlo permitido Dios, ¿La homosexualidad se hubiera extendido a escala mundial en tan temprano tiempo de la tierra influenciando a todo el mundo? De la misma forma, ¿Qué hubieran pensado las entidades superiores como los ángeles, si Dios hubiera permitido aquello? ¿Qué concepto ético y moral hubieran tenido ellos de Dios y de su gobierno? ¿Sería un Dios digno de adoración? ¿Qué clase de Dios hubiera sido si, en su gobierno permitiera la corrupción y la depravación de la manera y a escala como se extendían en la llanura de Sinar? Sodoma y Gomorra en el siglo XXI
  • 24. 24 Siglos de distancia nos separan hoy de los antediluvianos y de los moradores de Sodoma y Gomorra, atrás y en el olvido, han quedado las advertencias y los juicios que cayeron sobre estas personas, sin embargo, Cristo reveló que el mismo estado de cosas que se dieron en esos tiempos, también se darían en la sociedad que vivirá y sería testigo de su segunda venida y del fin del mundo. Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre. Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre. (Mat. 24: 36-39) ¿A qué tipo de casamiento es al que se refiere Cristo aquí? ¿Qué quiso decir Jesús cuando habla de: y dándose en casamiento? ¿Acaso casarse, según lo establecido por Dios no es lo correcto? ¿Entonces, por qué Jesús hace aquí referencia al matrimonio, antes de su venida, como si fuera algo malo? O ¿Es que Jesús se está refiriendo a otro tipo de uniones como las que se practicaban de manera corrupta y degradante antes del diluvio y en tiempos de Sodoma y Gomorra? La homosexualidad como parte de la corrupción y depravación del ser humano y aprobadas como un estilo de vida antes del diluvio, Jesús revela que esas serán las condiciones y estilo de vida que se darían en la sociedad que se desarrollará poco antes que termine este mundo. Sodoma y Gomorra, así como sus habitantes, ya no existen sobre la tierra, fueron destruidos por el fuego y el azufre, pero, ¿Qué hay de sus prácticas? ¿Han desaparecido sobre la tierra? Evidentemente que no, desde ese entonces y hasta nuestros días, han venido tomando diferentes formas y expresiones y practicándose ya sea de manera, oculta o de forma abierta y ahora, legalizadas.
  • 25. 25 Pero lo más asombroso de todo esto, es que en la misma iglesia, entre aquellos que se dicen ser cristianos y representantes de Dios en la tierra, cometan estos actos aberrantes y desviados al interior de oscuros y secretos recintos de iglesias y catedrales, monasterios y todo tipo de recinto privado, sacerdotes católicos, en cuyo interior se anidan las tendencias y prácticas sodomitas, han frustrado la vida de cientos y miles de niños y jóvenes, la antigua homosexualidad sodomita en el presente siglo, bajo el nombre de la pedofilia, se vuelve a repetir secretamente y esta vez, al interior de la iglesia. La máxima autoridad del clero católico, el Papa, teniendo conocimiento de estos actos depravados, han ocultado por años este grave pecado ante la opinión pública ¿Razones? ¿Será acaso que esta aberración sexual forma parte de oscuros y secretos rituales, sacrificando niños y jóvenes sobre el altar del sexo? No es de extrañar que la misma profecía apocalíptica denomine e identifique a este poder eclesiástico como, BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA. (Apoc. 17: 5) Apocalipsis también nos revela que esta forma de religión, se ha corrompido sobre la tierra, al punto que, se ha hecho habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de toda ave inmunda y aborrecible. (Apoc. 18: 2) ¿Será casualidad que uno de los monumentos más llamativos, históricos y emblemáticos, así como representativo del Vaticano sea el obelisco situado al frente de la misma basílica de san Pedro? Esta figura, para quienes desconocen qué significa, representa al miembro sexual masculino en estado de erección, el cual, era figura de veneración y adoración en la antigua Babilonia y entre los pueblos del pasado.
  • 26. 26 Baal, el dios de la fertilidad, era representado por el falo humano, el miembro sexual masculino y que en los tiempos del pueblo de Israel, al vivir este, una de las apostasías más terribles que se hayan registrado en toda la Biblia, también fue adorado al interior del mismo santuario de Dios. (Ez. 8: 1-18) A través del profeta Ezequiel, Dios llamó a esto, abominación (Ez. 8: 6, 13, 15) y era cometida, increíblemente, por aquellos que eran los líderes espirituales de toda la nación. Los mismos sacerdotes que administraban en el santuario del Señor, llevaron a todo el pueblo de Dios a la apostasía y a la aberración sexual como parte de un culto pagano y pervertido. Las torres y obeliscos formaron parte de la cultura antigua como figuras de adoración, los cuales representaban al órgano sexual masculino, ¿Será ahora solo coincidencia o un simple motivo de decoración o expresión artística el uso de estas figuras en la actualidad? ¿Será coincidencia que
  • 27. 27 esta figura se encuentre en plena plaza de San Pedro y rodeada de cientos y miles de adoradores? ¿Será acaso que la adoración del falo y las prácticas sexuales que lo acompañaban en el pasado, se reproduzcan hoy en día, con toda crueldad, en contra de niños y jóvenes, por medio de sacerdotes, líderes de la iglesia? Por otro lado, ¿Qué valor moral tiene ahora pedir perdón y hacer penitencia frente a la opinión pública mundial por estos actos cometidos? ¿Qué diferencia a la iglesia con el proceder del mundo en sus prácticas homosexuales y aberrantes? ¿Será acaso que su misma enseñanza e influencia han llevado al mundo a la depravación sexual? Conforme a su grandeza, así pecaron contra mí; también yo cambiaré su honra en afrenta. Del pecado de mi pueblo comen, y en su maldad levantan su alma. Y será el pueblo como el sacerdote; le castigaré por su conducta, y le pagaré conforme a sus obras. (Os. 4: 7-9) Al parecer, la aberrante historia del pasado se vuelve a repetir en el presente siglo, de luces y progresos. ¿De qué han servido el cúmulo de evidencias y los hechos del pasado como para no volver a ser repetidos? ¿Será acaso que la fragilidad de la memoria histórica del hombre es cierta? O ¿Será que todos estos acontecimientos tengan un trasfondo aun más oscuro y siniestro, que el simple hecho de invocar la historia? Los pecados que acarrearon la venganza sobre el mundo antediluviano. Existen hoy. El temor de Dios ha desaparecido de los corazones de los hombres, y su ley se trata con indiferencia y desdén. Era lícito que se casaran. El matrimonio formaba parte del plan de Dios; fue una de las primeras instituciones que él estableció. Dio instrucciones especiales tocantes a esta institución, revistiéndola de santidad y belleza; pero estas instrucciones fueron olvidadas y el matrimonio fue pervertido y puesto al servicio de las pasiones humanas. (PP. Cap. 7 El diluvio. Pág. 90)
  • 28. 28 El Redentor del mundo declara que hay pecados mayores que aquellos por los cuales fueron destruidas Sodoma y Gomorra. Los que oyen la invitación del Evangelio que llama a los pecadores al arrepentimiento, y no hacen caso de ella, son más culpables ante Dios que los habitantes del valle de Sidim. Mayor aun es el pecado de los que aseveran conocer a Dios y guardar sus mandamientos, y sin embargo, niegan a Cristo en su carácter y en su vida diaria. De acuerdo con lo indicado por el Salvador, la suerte de Sodoma es una solemne advertencia, no meramente para los que son culpables de pecados manifiestos, sino para todos aquellos que están jugando con la luz y los privilegios que vienen del cielo. (PP. Cap. 14 La destrucción de Sodoma. Pág. 160, 161) Jesús también reveló, que al igual que en los tiempos antediluvianos, las mismas condiciones sociales y sexuales que se dieron en Sodoma y Gomorra volverán a reproducirse en la actual sociedad que alcanzará un estado tal de maduración, poco antes del segundo advenimiento de Cristo y del fin del mundo, Asimismo como sucedió en los días de Lot; comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, edificaban; mas el día en que Lot salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre, y los destruyó a todos. Así será el día en que el Hijo del Hombre se manifieste. (Luc. 17: 28-30) Pero ¿Qué hace diferente que este tipo de prácticas depravadas que se han venido dando hasta aquí, se conviertan en una reproducción de Sodoma y Gomorra y como señales del fin de los tiempos? La diferencia radica esencialmente en la aprobación de la homosexualidad mediante una legislación a través de los gobiernos, en otras palabras, esta depravación e inmoralidad es aceptada de forma legislativa, cosa que en el pasado reciente no se daba, solamente comparable a Sodoma y Gomorra donde toda la ciudad aprobaba estas prácticas, comenzando por sus propias autoridades.
  • 29. 29 ¿Aprueba Dios esto? ¿Será acaso porque vivimos en tiempos que llamamos modernos, era de computadores, avances científicos, era espacial y una sociedad regida por los DD.HH. el argumento como para cambiar la mentalidad y los valores ya establecidos en cuanto a estos temas? Dios no se guía por las normativas y declaraciones que los hombres en conjunto realizan o dictaminan para el resto de la humanidad o por atrayentes filosofías que presentan las mejores ideas, no, el Dios del cielo rige la conducta de los hombres y mujeres en base a su ley, verdad objetiva y en base a esta ley, todo ser humano será juzgado, Así hablad, y así haced, como los que habéis de ser juzgados por la ley de la libertad. (Stg. 2: 12) Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo. Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, Y toda lengua confesará a Dios. De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí. (Ro. 14: 10-12) La declaración internacional de los DD.HH. puede ser muy loable, buena y noble, sin embargo, esta tiene su propia esfera de acción dentro de la vida del ser humano, pero cuando sus enunciados y principios se superponen a los principios y valores de la ley de Dios, fundamento de su gobierno en el cielo como en la tierra, y se utilizan sus declaraciones para relativizar la verdad, justificar la delincuencia, todo tipo de desviaciones y el pecado de los hombres y de forma concreta, la homosexualidad, atendiendo así, a las demandas de igualdad de condiciones, entonces, esta carta magna se convierte en una casa de acogida, escudo y voz de ladrones y depravados, albergando a toda ave inmunda y aborrecible, pasando a ser la noble abuelita de la perversión humana.
  • 30. 30 Se destruyó, cayó la tierra; enfermó, cayó el mundo; enfermaron los altos pueblos de la tierra. Y la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las leyes, falsearon el derecho, quebrantaron el pacto sempiterno. (Isa. 24: 4-5) Pero veamos qué dice la Biblia acerca de la manera como considera Dios la homosexualidad, el caso de Sodoma y Gomorra, pone ya un sólido fundamento, fueron destruidas, pero a través del tiempo ¿Cambió Dios su concepto y forma de ver estas prácticas depravadas e inmorales? ¿Acepta ahora Dios tales aberraciones simplemente porque los tiempos han cambiado o aun hoy, por la declaración internacional de los DD.HH? Habló Jehová a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel, y diles: Yo soy Jehová vuestro Dios. No haréis como hacen en la tierra de Egipto, en la cual morasteis; ni haréis como hacen en la tierra de Canaán, a la cual yo os conduzco, ni andaréis en sus estatutos. Mis ordenanzas pondréis por obra, y mis estatutos guardaréis, andando en ellos. Yo Jehová vuestro Dios. Por tanto, guardaréis mis estatutos y mis ordenanzas, los cuales haciendo el hombre, vivirá en ellos. Yo Jehová. No te echarás con varón como con mujer; es abominación. (Lev. 18: 1-5, 22) Si alguno se ayuntare con varón como con mujer, abominación hicieron; ambos han de ser muertos; sobre ellos será su sangre. (Lev. 20: 13) Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles.
  • 31. 31 Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos, ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén. Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío. Quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican. (Rom. 1: 22-27, 32) ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. (1ª Co. 6: 9-10) La palabra de Dios es lo suficientemente clara al respecto, Dios condena tales actos aberrantes, ni los afeminados (Travestis) ni los que se echan con varones (Homosexuales) o bien lesbianas, jamás heredaran el reino de Dios, son dignos de muerte.
  • 32. 32 El libro del Apocalipsis revela que al fin del tiempo, todos los que se perderán y que serán quemados en el lago de fuego, se encuentran bajo algún pecado cometido. Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda. (Apoc. 21: 8) Seguidamente, el mismo libro amplía la lista, agregando a otro tipo de personas, Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras, y todo aquel que ama y hace mentira. (Apoc. 22: 15) Apocalipsis denomina perros a todos los que practican el pecado de la homosexualidad, este tipo de personas y que junto con el resto, estarán fuera de la ciudad de Dios, pero según Apocalipsis, estar fuera de la ciudad, es sufrir la segunda muerte en el lago de fuego. (Apoc. 20: 10, 15) Dios no ha cambiado su concepto de la moralidad, la misma Escritura revela que Dios no cambia y es el mismo por siempre, Porque yo Jehová no cambio; (Mal. 3: 6) Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. (Heb. 13: 8) Si Dios se dejara modelar por las circunstancias o tuviera una posición relativista en cuanto a la verdad y la moral, entonces ¿Qué objetivo tendría revelar su carácter de forma escrita como está en la Biblia? Por lo tanto, si Dios no cambia, eso significa que su rechazo de estas prácticas aberrantes es la misma que tuvo en los tiempos antediluvianos, así como también en Sodoma y Gomorra.
  • 33. 33 El post modernismo en la relativización de la verdad y los valores La actual sociedad se está sodomodizando, no nos confundamos con modernizando, que es algo completamente distinto, la modernidad es una cosa y esta tiene que estar edificada sobre los principios y valores que Dios ha establecido, en cambio, una sociedad sodomodizada es otra cosa y esto es muy diferente, la cual se está levantado, socavando los principios y valores que la Biblia ha puesto como fundamento. Nuestra actual sociedad está dominada por la exigencia abrumadora, en algunos casos, de los DD.HH. todo mundo se aferra a esta doctrina humanista cuando nos vemos amenazados o cuando ha llegado la hora de exigir nuestros derechos, por consiguiente, cada uno tiene derecho a pensar y actuar como quiera y nadie puede ser condenado al respecto porque cada uno tiene DD.HH. y libertad de expresarse y vivir como quiera. El post modernismo ha introducido y dado lugar a la relativización de la verdad y de los principios morales que regulan el actuar y comportamiento del ser humano en estos días. Eso significa que lo que era verdad absoluta en el pasado hoy es cuestionable y de la misma manera, lo que era mentira o malo en el pasado, hoy también es cuestionable, porque cada ser humano es portador de su propia verdad, cada uno es un semi dios, capaz de saber por si mismo lo que es bueno y malo y de encontrar su propio camino hacia la “luz”. Por lo tanto, y según esta teoría del postmodernismo, existirían tantas verdades como personas hay en el mundo, de manera que, la verdad resultaría en algo completamente subjetiva, dejando de ser sólida y objetiva y que se encontraría fuera del ser humano.
  • 34. 34 En consecuencia, yo mismo puedo crear mi propia verdad y escala de valores, no teniendo necesariamente que regirme por un código ético y moral, como son las Sagradas Escrituras, es decir, la verdad está dentro de mí y no fuera de mí. Así, fácilmente lo que en un tiempo era malo ahora es bueno y lo que era bueno ahora es malo, pues uno mismo define lo que es bueno y malo. Por lo tanto, nadie tiene derecho de decirle al otro qué es malo y bueno, nadie puede juzgar a otro ser humano por lo que hace, pues cada ser humano tiene su propio concepto de la verdad y de los valores, de manera que, cada uno viva su propia vida como bien le parezca. Así, la homosexualidad surge como una especie de alternativa, un tercer sexo y quienes la practiquen, están dentro de sus derechos como personas. El postmodernismo también ha dado lugar a un amplio vocabulario que viene a justificar tales comportamientos, así, los términos, expresión cultural, cultura, expresión artística, arte corporal, desnudo artístico, diversidad, pluralismo, modernismo, derechos humanos, tolerancia, apertura, son los apelativos para justificar un comportamiento liberal fuera de todo margen y canon ético y moral ya establecido. Pero las Sagradas Escrituras en ninguna parte enseñan esto, la Biblia revela claramente que la verdad no es relativa, sino más bien, absoluta y no se encuentra en el interior del ser humano, sino fuera de este, pues proviene de Dios y está en Dios. Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino. Le dijo Tomás: Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo, pues, podemos saber el camino? Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. (Jn. 14: 4-6)
  • 35. 35 Claramente Jesús da a conocer a sus discípulos que la verdad es más que un concepto, es una persona, Jesús, y en él se encuentran los principios y valores que conducen al ser humano a la vida eterna, sin embargo, esa verdad divina fue escrita y entregada al ser humano para su salvación, así como tener un concepto de qué es lo bueno y qué es lo malo. Así, lo que es bueno y malo para el ser humano y lo que Dios aborrece, están claramente ya delineados en las Sagradas Escrituras y de manera especial, en su ley (Ex. 20: 1-17) y eso no cambiará jamás, porque es la expresión del mismo carácter de Dios y este no cambia. Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra. (2ª Tim. 3: 14-17) Pero ¿Qué dicen las Sagradas Escritura sobre todos aquellos que consideran la verdad como algo relativo? ¿Qué hay de aquellos que se rigen por sus propios valores o escala de valores? ¿Qué hay de aquellos que aprueban el relativismo moral como una forma de apertura a las nuevas ideas y adaptación a los nuevos tiempos? ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!
  • 36. 36 ¡Ay de los sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de sí mismos! ¡Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida; los que justifican al impío mediante cohecho, y al justo quitan su derecho! (Isa. 5: 20-23) El relativismo moral y de la verdad, es rechazado abiertamente por la Biblia, en ella, no existe fundamento para tales suposiciones o doctrinas filosóficas de los hombres como el relativismo. Muy por el contrario, se pronuncia un ¡Ay! Sobre todos aquellos que relativizan la verdad y los principios morales establecidos por Dios para el hombre. Estos Ayes, bien se pueden traducir en terribles juicios que caerán sobre todas esas personas, tanto los que inventan las filosofías y pensamientos que están elaborados para sustituir la verdad de Dios, tal como aparece revelada en las Sagradas Escrituras, así como todos aquellos quienes se acogen a esas ideas. Muchos hoy, hombres y mujeres, desprecian así la verdad de la Biblia considerando sus verdades y principios como de puritanos, que la práctica de sus verdades quedó en la edad media, convirtiéndose en obsoleta en el presente siglo de la modernidad y post modernidad. Pero si esto es así, entonces ¿Por qué aun hoy, en el presente siglo se sigue penalizando el crimen, la violación, el incesto, la pedofilia, la poligamia, el robo, el fraude y otros tantos delitos? Si la Biblia y sus verdades son obsoletas y de puritanos, entonces, el crimen, el robo, el fraude, el vicio, deberían de ser hoy virtudes y estar aprobadas por la actual sociedad y la anarquía reinaría segura como soberana en cada nación y ciudad, convirtiendo sus calles en campos de batallas y verdaderos barrios bajos, dominados por verdaderas hordas de ladrones y criminales, veríamos cuerpos esparcidos por todos lados, mientras que la vida y la propiedad no estarían seguras en ningún momento.
  • 37. 37 La Biblia hace referencia a estas prácticas como transgresión de la ley de Dios y esa misma ley enuncia y establece los principios que evitan, precisamente estos comportamientos inmorales del ser humano, lo cual nos revela que la verdad de la Biblia nos ilumina hasta el presente siglo, La hierba se seca, y la flor se marchita, porque el viento de Jehová sopló en ella; ciertamente como hierba es el pueblo. Sécase la hierba, marchítase la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre. (Isa. 40: 7-8) Los elementos que se coligarán en esta lucha contra la verdad y la justicia, están ya obrando activamente. La Palabra santa de Dios que nos ha sido transmitida a costa de tanto padecimiento, de tanta sangre de los mártires, no es apreciada debidamente. La Biblia está al alcance de todos, pero pocos son los que la aceptan verdaderamente por guía de la vida. La incredulidad predomina de modo alarmante, no sólo en el mundo sino también en la iglesia. Muchos han llegado al punto de negar doctrinas que son el fundamento mismo de la fe cristiana. Los grandes hechos de la creación como los presentan los escritores inspirados, la caída del hombre, la expiación y el carácter perpetuo de la ley de Dios son en realidad rechazados entera o parcialmente por gran número de los que profesan ser cristianos. Miles de personas que se envanecen de su sabiduría y de su espíritu independiente, consideran como una debilidad el tener fe implícita en la Biblia; piensan que es prueba de talento superior y científico argumentar con las Sagradas Escrituras y espiritualizar y eliminar sus más importantes verdades. Muchos ministros enseñan a sus congregaciones y muchos profesores y doctores dicen a sus estudiantes que la ley de Dios ha sido cambiada o abrogada, y a los que tienen los requerimientos de ella por válidos y dignos de ser obedecidos literalmente, se los considera como merecedores tan sólo de burla o desprecio. (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 639, 640)
  • 38. 38 Al rechazar la verdad, los hombres rechazan al Autor de ella. Al pisotear la ley de Dios, se niega la autoridad del Legislador. Es tan fácil hacer un ídolo de las falsas doctrinas y teorías como tallar un ídolo de madera o piedra. Al representar falsamente los atributos de Dios, Satanás induce a los hombres a que se formen un falso concepto con respecto a él. Muchos han entronizado un ídolo filosófico en lugar de Jehová, mientras que el Dios viviente, tal cual está revelado en su Palabra, en Cristo y en las obras de la creación, no es adorado más que por un número relativamente pequeño. Miles y miles deifican la naturaleza al paso que niegan al Dios de ella. Aunque en forma diferente, la idolatría existe en el mundo cristiano de hoy tan ciertamente como existió entre el antiguo Israel en tiempos de Elías. El Dios de muchos así llamados sabios, o filósofos, poetas, políticos, periodistas -el Dios de los círculos selectos y a la moda, de muchos colegios y universidades y hasta de muchos centros de teología- no es mucho mejor que Baal, el dios-sol de los fenicios. (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 640) Ninguno de los errores aceptados por el mundo cristiano ataca más atrevidamente la autoridad de Dios, ninguno está en tan abierta oposición con las enseñanzas de la razón, ninguno es de tan perniciosos resultados como la doctrina moderna que tanto cunde, de que la ley de Dios ya no es más de carácter obligatorio para los hombres. Toda nación tiene sus leyes que exigen respeto y obediencia; ningún gobierno podría subsistir sin ellas; ¿y es posible imaginarse que el Creador del cielo y de la tierra no tenga ley alguna para gobernar los seres a los cuales creó? Supongamos que los ministros más eminentes se pusiesen a predicar que las leyes que gobiernan a su país y amparan los derechos de los ciudadanos no estaban más en vigencia, que por coartar las libertades del pueblo ya no se les debe obediencia. ¿Por cuánto tiempo se tolerarían semejantes prédicas? ¿Pero es acaso mayor ofensa desdeñar las leyes de los estados y de las naciones
  • 39. 39 que pisotear los preceptos divinos, que son el fundamento de todo gobierno? (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 640, 641) Más acertado sería que las naciones aboliesen sus estatutos y dejaran al pueblo hacer lo que quisiese, antes de que el Legislador del universo anulase su ley y dejase al mundo sin norma para condenar al culpable o justificar al obediente. ¿Queremos saber cuál sería el resultado de la abolición de la ley de Dios? El experimento se ha hecho ya. Terribles fueron las escenas que se desarrollaron en Francia cuando el ateísmo ejerció el poder. Entonces el mundo vio que rechazar las restricciones que Dios impuso equivale a aceptar el gobierno de los más crueles y despóticos. Cuando se echa a un lado la norma de justicia, queda abierto el camino para que el príncipe del mal establezca su poder en la tierra. (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 641) Siempre que se rechazan los preceptos divinos, el pecado deja de parecer culpa y la justicia deja de ser deseable. Los que se niegan a someterse al gobierno de Dios son completamente incapaces de gobernarse a sí mismos. Debido a sus enseñanzas perniciosas, se implanta el espíritu de insubordinación en el corazón de los niños y jóvenes, de suyo insubordinados, y se obtiene como resultado un estado social donde la anarquía reina soberana. Al paso que se burlan de la credulidad de los que obedecen las exigencias de Dios, las multitudes aceptan con avidez los engaños de Satanás. Se entregan a sus deseos desordenados y practican los pecados que acarrearon los juicios de Dios sobre los paganos. (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 641, 642)
  • 40. 40 Los que le enseñan al pueblo a considerar superficialmente los mandamientos de Dios, siembran la desobediencia para recoger desobediencia. Rechácense enteramente los límites impuestos por la ley divina y pronto se despreciarán las leyes humanas. Los hombres están dispuestos a pisotear la ley de Dios por considerarla como un obstáculo para su prosperidad material, porque ella prohibe las prácticas deshonestas, la codicia, la mentira y el fraude; pero ellos no se imaginan lo que resultaría de la abolición de los preceptos divinos. Si la ley no tuviera fuerza alguna ¿por qué habría de temerse el transgredirla? La propiedad ya no estaría segura. Cada cual se apoderaría por la fuerza de los bienes de su vecino, y el más fuerte se haría el más rico. Ni siquiera se respetaría la vida. La institución del matrimonio dejaría de ser baluarte sagrado para la protección de la familia. El que pudiera, si así lo desease, tomaría la mujer de su vecino. El quinto mandamiento sería puesto a un lado junto con el cuarto. Los hijos no vacilarían en atentar contra la vida de sus padres, si al hacerlo pudiesen satisfacer los deseos de sus corazones corrompidos. El mundo civilizado se convertiría en una horda de ladrones y asesinos, y la paz, la tranquilidad y la dicha desaparecerían de la tierra. (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 642) La doctrina de que los hombres no están obligados a obedecer los mandamientos de Dios ha debilitado ya el sentimiento de la responsabilidad moral y ha abierto anchas las compuertas para que la iniquidad aniegue el mundo. La licencia, la disipación y la corrupción nos invaden como ola abrumadora. Satanás está trabajando en el seno de las familias. Su bandera flota hasta en los hogares de los que profesan ser cristianos.
  • 41. 41 En ellos se ven la envidia, las sospechas, la hipocresía, la frialdad, la rivalidad, las disputas, las traiciones y el desenfreno de los apetitos. Todo el sistema de doctrinas y principios religiosos que deberían formar el fundamento y marco de la vida social, parece una mole tambaleante a punto de desmoronarse en ruinas. Los más viles criminales, echados en la cárcel por sus delitos, son a menudo objeto de atenciones y obsequios como si hubiesen llegado a un envidiable grado de distinción. Se da gran publicidad a las particularidades de su carácter y a sus crímenes. La prensa publica los detalles escandalosos del vicio, iniciando así a otros en la práctica del fraude, del robo y del asesinato, y Satanás se regocija del éxito de sus infernales designios. La infatuación del vicio, la criminalidad, el terrible incremento de la intemperancia y de la iniquidad, en toda forma y grado, deberían llamar la atención de todos los que temen a Dios para que vieran lo que podría hacerse para contener el desborde del mal. (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 642, 643)
  • 42. 42 Legislando y legalizando la homosexualidad De esta manera, el postmodernismo y la relativización de los valores ha permeado la actual sociedad. Hasta el momento, varios gobiernos de diferentes pises, tanto de Europa, así como recientemente en latino América, como es el caso de Argentina y tiempo atrás en EE.UU. aunque en este país solo de forma estatal, han legislado a favor de la homosexualidad, donde se reconoce legalmente estas uniones gay. En otras palabras, legislar a favor de estas prácticas aberrantes es aceptar y aprobar lo que Dios ha rechazado, condenado y calificado como malo y degradante, legislar a favor de la homosexualidad, es colocarse por sobre Dios y ocupar su lugar, donde los hombres, no importando el puesto que tengan, en un acto de blasfemia, están redefiniendo lo que es bueno y malo, facultad que Dios no le ha entregado al ser humano.
  • 43. 43 Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad; porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó. Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen; estando atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades; murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres, necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia; quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican. (Rom. 1: 18, 28-32) También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita. (2ª Tim. 3: 1-5) La Biblia profetiza la apostasía que se desarrollará al fin de los tiempos, donde los hombres e incluso aquellos que tienen elevados puestos y mayores responsabilidades, ya sea políticos, como líderes religiosos y espirituales, abandonarían los principios divinos y seguirán tras los placeres carnales, desviaciones contra naturaleza, orgías, amor al dinero, fama, reproduciendo así en sus vidas y la sociedad, tal como lo revelo
  • 44. 44 Jesús, las costumbres y actos inmorales de los hombres y mujeres del pasado. Los tribunales están corrompidos. Los magistrados se dejan llevar por el deseo de las ganancias y el afán de los placeres sensuales. La intemperancia ha obcecado las facultades de muchos, de suerte que Satanás los dirige casi a su gusto. Los juristas se dejan pervertir, sobornar y engañar. La embriaguez y las orgías, la pasión, la envidia, la mala fe bajo todas sus formas se encuentran entre los que administran las leyes. "La justicia se mantiene a lo lejos, por cuanto la verdad está caída en la calle, y la rectitud no puede entrar." (Isaías 59: 14, V.M.) (CS. Cap. 37 El Conflicto inminente. Pág. 643) ¿Qué hay detrás de estas legislaciones? ¿Qué intereses se ocultan? Mucho de esto pasa por la corrupción política, mucho de esto, obedece a las promesas que se hacen con el fin de obtener el voto popular y así, los hombres venden y cambian los principios y valores divinos por los interese mundanos, la fama, el dinero y el poder. La legislación a favor de la homosexualidad para reconocerla en la actual sociedad y entregarle a los homosexuales igualdad de condiciones, se está convirtiendo en el efecto dominó. En la medida que varios países ya han tomado la iniciativa y legislado a favor de la unión gay, otras naciones se les han unido. En nuestro país, ya existe también la iniciativa por parte de algunos políticos, de llevar esta propuesta al congreso con el fin de legalizar y aprobar la homosexualidad, con lo cual, será más que seguro y conociendo el estado actual de las cosas y de la misma forma como otros países y sus gobiernos han descendido y trastocado la escala de valores, que tal iniciativa, también será aprobada en nuestro país.
  • 45. 45 ¿Motivos para esto? ¿Por qué otros lo hacen y no debemos de quedarnos atrás? Aunque lo que está permeando todo esto, son los mismos argumentos que se alegan en otras partes del mundo, la igualdad de condiciones y los DD.HH. pero nos hemos preguntado ¿Qué bien se podrá esperar de políticos, que han logrado obtener el voto popular para regir los destinos de la nación y que aprueban y legalizan por ley, la indecencia y la inmoralidad? ¿Acaso les fue bien y prosperaron los antediluvianos con tales prácticas aberrantes y degradadas? ¿Acaso prosperaron y les fue igual de bien a los moradores de Sodoma y Gomorra, ciudades que fueron puestas de ejemplo (Jud. 7) a todos aquellos quienes habrían de vivir en los postreros días? De aprobarse una iniciativa como esta y convertida en ley del estado, ¿Qué valor llegará a tener entonces, la educación de nuestros niños y jóvenes en las escuelas, liceos, institutos y universidades de nuestro país? ¿Qué valor llegará a tener la enseñanza de valores y principios que rigen la vida de cientos de jóvenes? Una ley como esta, será la grieta en la pared que amenazará la ruina moral de toda una nación, pondrá al descubierto, revelando la corrupción y degradación de aquellos que se dicen ser los guías políticos de toda una sociedad. Porque todo aquel que aprueba y consiente en el pecado, es tan culpable ante Dios como aquellos que los practican. Los que dejan la ley alaban a los impíos; Mas los que la guardan contenderán con ellos. (Pr. 28: 4)
  • 46. 46 Legislar y aprobar una iniciativa de esta naturaleza, pondrá en evidencia que todo lo que se ha venido construyendo en materia de educación y valores ha sido falaz y por lo mismo, no se molesten los señores políticos, cenadores y diputados o el gobierno de turno, no importando la inclinación política que profese, por impulsar mejoras al sistema educativo de la nación o en exigir a través de la evaluación docente a los profesores por logros substanciales o el cumplimiento transversal del programa curricular. Porque al hacer todo esto, será efímero y falaz, revelando la idiotez de quienes se dicen ser sabios, pero que desconocen e ignoran las reales consecuencias que tendrá en la practica una ley semejante sobre niños y jóvenes y sobre toda la nación, es cosa de mirar la historia pasada, los antediluvianos, los moradores de Sodoma y Gomorra, pero la ignorancia e idiotez y la fragilidad de la memoria histórica del hombre siempre se han unido, para luego, retorcerse de dolor frente a las consecuencias, pero cuando ya es demasiado tarde como para retroceder. De aprobarse una ley que legalice la homosexualidad, ¿Qué ocurrirá más adelante? ¿Será acaso que el siguiente paso consistirá en incluir en el programa educativo para escuelas y liceos, los beneficios de la homosexualidad como materia de estudios o como alternativa sexual para niños y jóvenes? ¿Le enseñaremos a niños y jóvenes que lo degradante e indecente es ahora bueno todo porque una ley, redactada y firmada por una simple autoridad humana lo ha aprobado y legalizado como noble y bueno? O ¿Nos atreveríamos decir que esto nunca sucederá, de la misma forma que en épocas pasadas hubiéramos pensado que jamás nunca se legalizaría la homosexualidad? ¿Cómo podríamos afirmarlo? Si le das una galleta aun ratón, luego este te pedirá el vaso de leche.
  • 47. 47 Lamentablemente ya hay algunos políticos y quizás, la mayoría de ellos, así como los medios de comunicación masivos (MCM) están dando las primeras lecciones. La misma TV. Un medio de comunicación masivo y de poderosa influencia sobre el espíritu y mente de miles de niños, jóvenes, adultos y tercera edad, trasmite programas, cuyo contenido, fácilmente se puede calificar de, hueco, indecente e inmoral, películas y programas de entretención donde a veces el personaje afeminado se convierte en la tónica para elevar el raitin televisivo. Y por otro lado, qué podemos decir de las telenovelas, cuyo contenido de dudosa moralidad, donde a veces el personaje homosexual forma parte del guión de este tipo de entretenciones, preparando y transformando la mentalidad de millones de espectadores, que tendencias como estas, son normales y buenas, para quienes decidan así adoptarlas y aquello que en el pasado era malo y repudiable, hoy es bueno y aceptable. De esta manera, tanto la autoridad política, que legaliza la homosexualidad, la indecencia e inmoralidad, así como los MCM, se convierten en los cuervos que arrancan del corazón y la mente de miles de niños y jóvenes, la semilla que es sembrada con esfuerzo y a veces, literalmente con lagrimas, al interior de los hogares y las aulas de clases.
  • 48. 48 Los juicios divinos se volverán a repetir Legislar a través de una ley que apruebe el pecado, la corrupción, depravación e indecencia, basándose en la declaración internacional de los DD.HH. para otorgar igualdad de condiciones en medio de la sociedad a aquellos que practican la homosexualidad, es hacer precisamente lo contrario, es falsear el derecho y corromperlo. He aquí que Jehová vacía la tierra y la desnuda, y trastorna su faz, y hace esparcir a sus moradores. Y sucederá así como al pueblo, también al sacerdote; como al siervo, así a su amo; como a la criada, a su ama; como al que compra, al que vende; como al que presta, al que toma prestado; como al que da a logro, así al que lo recibe.
  • 49. 49 La tierra será enteramente vaciada, y completamente saqueada; porque Jehová ha pronunciado esta palabra. Se destruyó, cayó la tierra; enfermó, cayó el mundo; enfermaron los altos pueblos de la tierra. Y la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las leyes, falsearon el derecho, quebrantaron el pacto sempiterno. (Isa. 24: 1-5) Si las autoridades de la tierra proceden a actuar de esta forma o a consentir en ello, por la obtención de fama, el apoyo y voto popular, poder y dinero, tengan por cierto que todo esto no quedará impune, estas legislaciones, aprobando el pecado sodomita, la homosexualidad, no importando los motivos y aunque los argumentos estén bien planteados y políticamente correctos, analizados psicológicamente o sociológicamente por el más erudito o doctor emérito en la materia, traerán serias y terribles consecuencias sobre las naciones y ciudades del mundo. Porque uno mayor que toda autoridad de este planeta, ya ha determinado por medio de su ley lo que es bueno y malo en la vida del ser humano y que la transgresión de sus requerimientos serán sancionados. Por esta causa la maldición consumió la tierra, y sus moradores fueron asolados; por esta causa fueron consumidos los habitantes de la tierra, y disminuyeron los hombres. Se perdió el vino, enfermó la vid, gimieron todos los que eran alegres de corazón. Cesó el regocijo de los panderos, se acabó el estruendo de los que se alegran, cesó la alegría del arpa. No beberán vino con cantar; la sidra les será amarga a los que la bebieren. (Isa. 24: 6-9)
  • 50. 50 La Biblia advierte claramente a todos los habitantes de las naciones y sus autoridades, no importando las banderas o colores políticos o religiosos que se profesen, que estas ciudades del pasado, sus prácticas anti naturaleza y sus aberraciones, fueron puestas de ejemplo, es decir, son precisamente una advertencia para todos aquellos que vivirán en los días finales de la tierra. y si condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y de Gomorra, reduciéndolas a ceniza y poniéndolas de ejemplo a los que habían de vivir impíamente, y libró al justo Lot, abrumado por la nefanda conducta de los malvados (porque este justo, que moraba entre ellos, afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo los hechos inicuos de ellos), sabe el Señor librar de tentación a los piadosos, y reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio; y mayormente a aquellos que, siguiendo la carne, andan en concupiscencia e inmundicia, y desprecian el señorío. Atrevidos y contumaces, no temen decir mal de las potestades superiores, mientras que los ángeles, que son mayores en fuerza y en potencia, no pronuncian juicio de maldición contra ellas delante del Señor. (2ª P. 2: 6-11) Como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno. (Jud. 7) Tal como lo señala la Biblia, los pecados de los hombres, sus aberraciones antinaturales, la inmundicia e inmoralidad, tendrán sus justas retribuciones, hoy, los hombres hablan de prosperidad, progreso y un futuro maravilloso, sin embargo, las Escrituras nos presentan otro mensaje, de advertencia frente a lo que muy pronto sucederá sobre la tierra.
  • 51. 51 Como los habitantes del valle de Sidim, la gente sueña ahora con prosperidad y paz. "Escapa por tu vida," es la advertencia de los ángeles de Dios; pero se oyen otras voces que dicen; "No os inquietéis, no hay nada que temer." La multitud vocea: "Paz y seguridad," mientras el Cielo declara que una rápida destrucción está por caer sobre el transgresor. En la noche anterior a su destrucción, las ciudades de la llanura se entregaban desenfrenadamente a los placeres, y se burlaron de los temores y advertencias del mensajero de Dios; pero aquellos burladores perecieron en las llamas; en aquella misma noche la puerta de la gracia fue cerrada para siempre para los impíos y descuidados habitantes de Sodoma. (PP. Cap. 14 La destrucción de Sodoma. Pág. 163) Las perspectivas de nuestro mundo son ciertamente alarmantes. Dios está retirando su Espíritu de las ciudades impías, que han llegado a ser semejantes a las del mundo antediluviano y a Sodoma y Gomorra. Los habitantes de esas ciudades han sido sometidos a prueba. Hemos llegado al momento cuando Dios está por castigar a los presuntuosos malhechores que rehúsan guardar sus mandamientos y desprecian sus mensajes de advertencia. El que es paciente con los que obran mal, le da a todos la oportunidad de buscarlo y de humillar sus corazones delante de él. (Carta 90, del 23 de mayo de 1902, al Hno. Johnson, un laico). 153 (Cada día con Dios.23 de Mayo. Aseguremos nuestra herencia.) (A- 445) Si hasta aquí no hemos visto mayores cosas sobre la tierra, como las que ya han sucedido o están sucediendo, es porque Dios aun tiene paciencia y misericordia frente a los graves pecados y conductas de los hombres, sin embargo, se nos advierte que esto no será siempre así. Dios es un Dios de amor y misericordia y por lo mismo, como actuó en el pasado, no puede seguir permitiendo por más tiempo un estado de cosas semejantes.
  • 52. 52 Dios no será siempre objeto de burla; no se jugará mucho tiempo con él. "He aquí el día de Jehová viene, crudo, y de saña y ardor de ira, para tomar la tierra en soledad, y raer de ella sus pecadores." (Isa. 13:9.) La inmensa mayoría del mundo desechará la misericordia de Dios, y será sumida en pronta e irremisible ruina. (PP. Cap. 14 La destrucción de Sodoma. Pág. 163, 164) Las llamas que consumieron las ciudades de la llanura transmiten hasta nuestros días la luz de su advertencia. Se nos enseña la temible y solemne lección de que mientras la misericordia de Dios tiene mucha paciencia con el transgresor, hay un límite más allá del cual los hombres no pueden seguir en sus pecados. Cuando se llega a ese límite, se retira el ofrecimiento de la gracia y comienza la ejecución del juicio. (PP. Cap. 14 La destrucción de Sodoma. Pág. 160) Nuestro Dios es un Dios de misericordia. Trata a los transgresores de su ley con longanimidad y tierna compasión Sin embargo, en esta época nuestra, cuando hombres y mujeres tienen tanta oportunidad de familiarizarse con la ley divina según se revela en la Sagrada Escritura, el gran Príncipe del universo no puede contemplar con satisfacción las ciudades impías, donde reinan la violencia y el crimen Se está acercando rápidamente el momento en que acabará la tolerancia de Dios hacia aquellos que persisten en la desobediencia La tolerancia de Dios ha sido muy grande, tan grande que cuando consideramos el continuo desprecio manifestado hacia sus santos mandamientos, nos asombramos El Omnipotente ha ejercido un poder restrictivo sobre sus propios atributos Pero se levantará ciertamente para castigar a los impíos, que con tanta audacia desafían las justas exigencias del Decálogo.
  • 53. 53 Dios concede a los hombres un tiempo de gracia; pero existe un punto más allá del cual se agota la paciencia divina y se han de manifestar con seguridad los juicios de Dios. El Señor soporta durante mucho tiempo a los hombres y las ciudades, enviando misericordiosamente amonestaciones para salvarlos de la ira divina; pero llegará el momento en que ya no se oirán las súplicas de misericordia, y el elemento rebelde que continúe rechazando la luz de la verdad quedará raído, por efecto de la misericordia hacia él mismo y hacia aquellos que podrían, si no fuese así, sentir la influencia de su ejemplo. Está muy cerca el momento en que habrá en el mundo una tristeza que ningún bálsamo humano podrá disipar. Se está retirando el Espíritu de Dios. Se siguen unos a otros en rápida sucesión los desastres por mar y tierra. ¡Con cuánta frecuencia oímos hablar de terremotos y ciclones, así como de la destrucción producida por incendios e inundaciones, con gran pérdida de vidas y propiedades! Aparentemente estas calamidades son estallidos caprichosos de las fuerzas desorganizadas y desordenadas de la naturaleza, completamente fuera del dominio humano; pero en todas ellas puede leerse el propósito de Dios. Se cuentan entre los instrumentos por medio de los cuales él procura despertar en hombres y mujeres un sentido del peligro que corren. (PR. Cap. 22 Nínive. Ciudad sobremanera grande. Pág. 205, 206, 207) Cuando llegue el terrible momento en que esta paciencia divina se agote, entonces veremos sobre nuestro mundo las más grandes calamidades, desastres y catástrofes nunca antes vistas sobre la tierra, el pecado y la inmoralidad aprobadas y legalizadas por las autoridades de la tierra, por sobre los estatutos y preceptos divinos, reproducirán las condiciones que vivieron los antiguos moradores de la tierra, Sodoma y Gomorra, parecerán entonces una simple maqueta, frente a un mundo que recogerá, lo que simplemente ha sembrado.
  • 54. 54 Otra tempestad se aproxima ahora. La tierra será otra vez barrida por la asoladora ira de Dios, y el pecado y los pecadores serán destruidos. (PP. Cap. 7 El diluvio. Pág. 89, 90) Se acerca el tiempo cuando las grandes ciudades serán visitadas por los juicios de Dios. Antes de mucho, esas ciudades serán sacudidas con violencia. Cualesquiera que sean las dimensiones y la solidez de los edificios, o las precauciones tomadas contra incendios, si el dedo de Dios toca esas casas, en algunos minutos u horas quedarán reducidas a escombros. Las impías ciudades de nuestro mundo serán destruidas. Mediante las catástrofes que ocasionan actualmente la ruina de grandes edificios y de barrios enteros, Dios nos muestra lo que acontecerá en toda la tierra. Nos ha dicho: "De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama se enternece, y las hojas brotan, sabéis que el verano está cerca. Así también vosotros, cuando viereis todas estas cosas, sabed que el Hijo del hombre está cercano, a las puertas" (Mateo 24: 32, 33). 266 (Consejos sobre la salud. Sección VI, obra institucional de éxito. La ubicación de los sanatorios.) Se me pide que declare el mensaje de que las ciudades llenas de transgresión y pecaminosas en extremo, serán destruidas por terremotos, incendios e inundaciones. Todo el mundo será advertido de que existe un Dios que hará notoria su autoridad como Dios. Sus agentes invisibles causarán destrucción, devastación y muerte. Todas las riquezas acumuladas serán como la nada...
  • 55. 55 Acontecerán calamidades, calamidades de lo más pavorosas, de lo más inesperadas; y estas destrucciones se seguirán la una a la otra. Si se presta atención a las amonestaciones que Dios ha dado, y si las iglesias se arrepienten y regresan a la lealtad, entonces otras ciudades serán perdonadas por un tiempo. Pero si los hombres que han sido engañados continúan en el mismo camino en el cual han estado andando, sin prestar atención a la ley de Dios y presentando falsedades ante el pueblo, Dios les permite sufrir calamidades, para que sus sentidos sean despertados... El Señor no desechará repentinamente a los transgresores o destruirá a naciones enteras; sino que castigará a ciudades y lugares donde los hombres se han prestado para ser poseídos por los agentes satánicos. Las ciudades de las naciones serán tratadas con estrictez, y sin embargo, no serán visitadas con la extrema indignación de Dios, porque algunas almas renunciarán a los engaños del enemigo, y se arrepentirán y convertirán, mientras que las masas estarán atesorando ira para el día de la ira (Manuscrito 35, 1906). (EV. Cap. 2 Las masas de la población metropolitana. A la sombra de la condenación inminente. Si las amonestaciones no son escuchadas. Pág. 24, 25) Terribles conmociones vendrán sobre la tierra, y los palacios señoriales levantados a gran costo se convertirán ciertamente en montones de ruinas.- 3MR 312 (1891) Cuando la mano restrictiva de Dios se retire, el destructor comenzará su trabajo. Entonces ocurrirán en nuestras ciudades las mayores calamidades.-3MR 314 (1897) El fin está cerca y cada ciudad va a ser trastornada de diferentes maneras. Habrá confusión en cada ciudad. Todo lo que puede ser sacudido lo será, y no sabe qué pasará luego. Los juicios serán de acuerdo con maldad de la, gente y la luz de verdad que han tenido.1MR 248 (1902)
  • 56. 56 ¡Ojalá que el pueblo de Dios tuviera una noción de destrucción inminente de millares de ciudades, ahora casi [totalmente] entregadas a la idolatría!-Ev 26 (1903) Falta poco para que las grandes ciudades sean barridas, de manera que todos deben ser amonestados acerca de la inminencia de estas calamidades.-Ev 26 (1910) (EUD. Enfrentando la crisis final de la tierra. Cap. 8 Las ciudades. Descienden juicios sobre las ciudades.) Terribles serán las consecuencias a que llegará el mundo en la complacencia de la pasión más vil y degradante en aras de lo que se considera superior a los requerimientos y estatutos divinos. ¿Qué valor tendrán entonces en esos momentos terribles y desesperantes los famosos DD.HH, la igualdad de condiciones y todo argumento esgrimido por justificar la inmoralidad cuando el espíritu humano se vea frente a los terribles desastres y catástrofes sobre la tierra? Hoy estamos viviendo en un tiempo en que la actual sociedad, poco a poco se está sodomodizando y reproduciendo a escala mundial los mismos pecados del pasado, ¿Cuál será entonces nuestra posición como cristianos? ¿Nos dejaremos llevar por las declaraciones de los hombres que correctamente estipuladas se alzan por sobre la palabra de Dios? ¿Modificaremos nuestras creencias, principios y valores, todo porque los tiempos han cambiado? ¿Será acaso que nos abriremos a esto todo por un asunto cultural o la famosa diversidad?
  • 57. 57 La mayor necesidad del mundo es la de hombres que no se vendan ni se compren; hombres que sean sinceros y honrados en lo más intimo de sus almas; hombres que no teman dar al pecado el nombre que le corresponde; hombres cuya conciencia sea tan leal al deber como la brújula al polo; hombres que se mantengan de parte de la justicia aunque se desplomen los cielos. (La Educación, pág. 54). Lo único que se necesita para que el mal triunfe sobre la tierra, es que los justos no hagan nada. Fernando Antonio Silva Quintana. Profesor de Religión y estudios en Teología Tercerangel.silva@gmail.com MTA/ Noviembre - 2011 www.mensajetercerangel.com