Imaginar, un poder mental que nos puede llevar donde queramos. Daniel vive en un mundo que él mismo ha construido donde está bien. Como es feliz puede encajar perfectamente en una situación social difícil para él.
2. Daniel vivía temporalmente en casa de sus tíos porque sus padres habían tenido que irse a otro país
para trabajar. Eran personas muy ocupadas y no tenían otros hijos ni hijas. Estaba demasiado solo y
se aburría un poco.
3. Se armó de valor y pidió un gatito de regalo de cumpleaños. Su tío lo llevó a
una tienda de juguetes y le dijo:
- Elige tú el qué quieras, que no pase de 10 €
Todos los peluches eran un poco feos, pero por aquel precio sólo podía
encontrar uno que era un gatito pequeño pegado a una cesta de mimbre que
dormía acurrucado. No se podía mover ni una pizca; estaba allí, pegado con
cola.
4.
5. En casa, lo puso encima de su cama y le hablaba diciendo:
- ¿Sabes gatito? A mí me gustan mucho los animales; nunca les haría daño
y en cambio les ayudaría a vivir felices a mi lado... Y hablando, hablando,
los animales iban llegando.
6. Primero llegó un elefante grande... ancho... con unos
colmillos que no pasaban por la puerta. Por cierto, al
pasar se frotaba el dintel y lo dejó un poco lleno de
polvo. Daniel le avisó y lo limpió.
7. El siguiente fue un cocodrilo... Abría una gran boca y lucía muchos dientes bien ordenados.
También tenía ganas de jugar.
10. Al ver que eran tantos, los invitó a salir al jardín que, por suerte, era muy grande.
Les asignó un espacio a cada uno para que estuvieran cómodos y bien. Jugaba e
iba corriendo de los unos hacia los otros para darles cacahuetes, pipas e incluso
chocolate. Ellos le hacían reír porque hacían un montón de pasos de danza
diferentes y saltaban unos por encima de los otros o se arrastraban por el suelo
para pasar por debajo del banco sin dañarlo para nada.
11.
12. Cuando lo llamaban para ir a dormir, se los llevaba a su habitación y allí
jugaban a hacer pareados hasta que le venía el sueño... ¡qué divertido!
13. Pasaron muchos días y su tío y su tía estaban
contentos de ver que siempre jugaba y reía y se
movía por todo el jardín e iba a dormir cuando le
decían....
14. Siempre lo encontraban durmiendo cogido al gato dentro del cesto y nunca vieron todos los
animales invisibles que conformaban su ZOO PARTICULAR.