1. PRÁCTICA 3: ABP
Diana García García
Virginia Iglesias Morcillo
Cristina Pascual García
1. Definir el problema
Violencia con armas entre niños que se dan en el contexto escolar.
Consideramos que es un problema que actualmente está ocurriendo mucho, y
supone una amenaza para la sociedad que haya niños tan violentos y que éstos
tengan a su alcance cualquier tipo de armas.
2. Analizar el problema: tormenta de ideas
Para afrontar el problema se podría generar diferentes alternativas para buscar la
mejor manera de solucionar dicho problema:
Cachear a los alumnos a la hora de la entrada
Cambiar armas por caramelos
Aumentar la vigilancia en el centro
Contar con la ayuda de alumnos ayudantes
Impartir charlas para prevenir estos hechos y explicar las consecuencias que
conlleva la violencia
Promover las escuelas sin violencia
Aumentar los castigos a los niños violentos
Realizar actividades grupales en las que tengan que colaborar los unos con los
otros
Informar a las familias sobre los hechos
Promover el diálogo
2. 3. Organizar jerárquicamente
Hemos organizado las ideas de tal forma que la idea principal es la de promover
una escuela sin violencia y todas las demás giran en torno a ella.
Alumnos
ayudantes Informar a
Realizar actividades
grupales en las que los padres
tengan que colaborar
los unos con los otros
sobre los
hechos
Impartir charlas para
prevenir estos hechos
Aumentar la
y explicar las vigilancia en
consecuencias que
conlleva la violencia el centro
PROMOVER
PROMOVER UNA aumentar los
castigos en
EL DIÁLOGO ESCUELA SIN niños rebeldes
VIOLENCIA
4. Formular objetivos de aprendizaje
Para promover una escuela sin violencia planteamos los siguientes objetivos y a
continuación explicaremos como llevar cabo cada uno de ellos:
Promover el diálogo: En la convivencia en el aula sentimos la satisfacción de
compartir las ideas con los demás y convertir la igualdad en un hecho cotidiano,
compartir nuestras diferentes opiniones nos enriquece, para conseguir dicho
objetivo, realizaremos debates en el aula con los niños más mayores sobre el
tema de la violencia para que los alumnos expresen sus diferentes opiniones y
puedan compartirlas con los demás. Se discutirán varios temas, podrán
defender sus puntos de vista, pero siempre respetando el turno de palabra y a
sus compañeros. Para realizar los debates debemos
Impartir charlas para prevenir estos hechos y explicar las consecuencias que
conlleva la violencia: Para cumplir este objetivo será necesario impartir charlas
en el colegio. Éstas las realizaremos dos veces al mes, irán dirigidas tanto a
padres como a alumnos. Algunos temas que trataremos serán:
3. Buenas formas de conducta, técnicas de autocontrol, respeto a la diversidad,
etc.
Todo esto ayudará a entrenar el aprendizaje de la convivencia y a educar la
práctica de hábitos y valores.
Para realizarlas de manera adecuada los profesores deben tener conocimientos
sobre los temas a tratar, que sus explicaciones sean claras y concisas y que
atraiga la atención de los oyentes motivando la participación.
Realizar actividades grupales en las que tengan que colaborar los unos con los
otros: La metodología que utilizaremos será variada, ya que pretendemos que
el alumno no solo aprenda los conceptos sino que adquiera unas habilidades de
búsqueda, recopilación y asimilación de datos. Por tanto se llevarán a cabo
actuaciones muy participativas, de forma individual pero sobre todo grupal.
Con este tipo de metodología queremos que los alumnos desarrollen su
capacidad autónoma y de cooperación en grupo.
Contar con la ayuda de alumnos ayudantes: Los alumnos ayudantes son un
grupo de alumnos que ha recibido una formación para mediar en los conflictos
existentes entre los compañeros, al mismo tiempo que ayudan a la integración
de nuevos compañeros que aparecen en el Centro. Su misión no es delatar,
sino intentar que la convivencia en el Centro sea lo más pacífica posible. Ante
un problema, estos alumnos no tienen la responsabilidad de solucionar dichos
problemas sino de aportar soluciones y mediar entre los compañeros. Si el
problema es persistente o grave si deben pedir la ayuda del profesor para que
llegue a su fin.
Informar a las familias sobre los hechos: Al producirse en el Centro hechos que
atenten contra la salud física o psíquica de alguno de nuestros alumnos y esto
se repita con frecuencia, será necesario la creación de documentos
informativos en los que intervengan tanto el profesorado como los
especialistas con los que cuente el Centro, en dichos informes se ha de
describir el problema producido y a su vez exponer algunas de las pautas que
han de seguir los padres con sus hijos para mejorar esta situación.
Aumentar la vigilancia en el centro: Creación de un comité de profesores para
evaluar mediante la observación cómo se comportan los alumnos tanto dentro
del aula como en los descansos y el recreo. También podrán colaborar los
alumnos ayudantes, informando de cualquier altercado sucedido en ausencia
de los profesores.
4. Aumentar los castigos a los niños violentos: Esta es una solución que se ha
llevado a cabo durante toda la vida. No estamos a favor de fomentar los
castigos entre los alumnos problemáticos ya que esto no es para nada
pedagógico, pero en casos determinados y ante una falta grave es necesario el
castigo, haciendo que estos alumnos sean consecuentes con sus actos. Algunos
de los castigos podrían ser expulsión del Centro (pero esto para muchos es más
un regalo que un castigo), realización de tareas cooperativas durante el recreo,
privarles de asistir a las próximas excursiones…etc.
5. Trabajo individual
Buscando otros artículos relacionados con el tema del bullying, hemos encontrado uno
del Dr. César Lozano en el que propone las siguientes soluciones ante dicho problema:
Hay que convencer a la víctima a que recurra a la ayuda de sus padres y
profesores y denunciar cuanto antes esta situación.
Si el acosado no quiere colaborar en solucionar el problema se vuelve más
difícil.
Para ayudarlo, necesita saber que puede contar con la ayuda de los mayores en
cualquier momento, y así, ir recuperando la confianza y poder superar esta
situación. Para que esto funcione de mejor manera, es indispensable el apoyo y
la amistad de amigos, familia y maestros.
Informe al Director o Coordinador de la escuela cualquier incidente de abuso o
intimidación, incluso si su hijo(a) ha participado en esos comportamientos.
Esto les enseñará a ser responsables de su propio comportamiento.
Busque ayuda de afuera. El comportamiento de abuso o intimidación requiere
un abordaje integral. El psicólogo o consejero puede ofrecer más sugerencias o
de trabajar con su hijo(a) para desarrollar nuevas habilidades emocionales y
sociales.
Hable calmadamente con su hijo(a) sobre las razones de participar en dichos
comportamientos.
Explique a su hijo(a) porqué es inaceptable el comportamiento abusivo.
Enseñe a su niño algunas alternativas para el comportamiento agresivo, como
pedir ayuda, respetar a otros y mostrar tolerancia hacia aquellos que son
diferentes.
Alabe a su niño por usar otros comportamientos apropiados.
Para evitar que un niño o niña sea quien genere bullying frente a los demás
menores es importante que los padres le ayuden a reconocer sus propias
debilidades y a respetar las de los otros, aceptándolas como parte de la
diversidad.
5. 6. Trabajo en grupo para elaborar resultado de aprendizaje y evaluaciones.
Después de realizar esta práctica nos hemos dado cuenta de que en nuestra futura
profesión nos encontraremos con problemas a los cuales deberemos dar una
respuesta adecuada, y más cuando un problema está tan extendido en nuestra
sociedad, como el maltrato psicológico, verbal o físico producido entre escolares de forma
reiterada a lo largo de un tiempo determinado (bullying).
Está práctica nos ha resultado muy interesante ya que es un nuevo aprendizaje basado
en problemas. Hemos buscado algunos artículos que tratan sobre este tema, dándose
las distintas formas de acoso, también hemos jerarquizado todas las ideas obtenidas
alrededor de la que consideramos la fundamental ‘Promover escuelas sin violencia’, y
buscado alternativas para intentar solucionar las malas conductas de los alumnos.
Creemos que es más importante prevenir que solucionar, unas de las maneras sería
desarrollar un plan de convivencia de Centro en el que intervengan todos los
integrantes de la comunidad educativa: profesores, padres y alumnos, para creer un
entorno donde la convivencia sea posible.
No olvidemos que “si educamos a los niños de hoy no tendremos que castigar a los
hombres del mañana.”