El documento describe cómo Walt Disney decidió producir su primer largometraje animado, Blancanieves y los siete enanitos, en 1934 durante la Gran Depresión. Se basó en el cuento de los Hermanos Grimm y dio a los personajes características de actores reales como Janet Gaynor para Blancanieves y Douglas Fairbanks para el Príncipe. El personaje más logrado fue la Malvada Reina, modelada a partir de Joan Crawford para parecerse a Lady Macbeth de Shakespeare. Disney eligió esta historia porque contenía elementos como enseñanzas morales,