El pueblo fortificado de Monsanto en Portugal se encuentra construido en la ladera de una montaña entre rocas gigantescas. Las casas se extienden cuesta arriba aprovechando las rocas de granito para sus paredes e incluso techos. Entre las casas sobresale la Torre de Lucano del siglo XIV y las ruinas de un antiguo castillo lusitano ofrecen magníficas vistas, junto a las ruinas de una capilla románica.