1. Apocalipsis 2:1-7
Escribe al ángel de la iglesia en Éfeso: El que tiene las siete estrellas en su diestra, el que
anda en medio de los siete candeleros de oro, dice esto: Yo conozco tus obras, y tu arduo
trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a los malos, y has probado a los que se dicen
ser apóstoles, y no lo son, y los has hallado mentirosos; y has sufrido, y has tenido
paciencia, y has trabajado arduamente por amor de mi nombre, y no has desmayado. Pero
tengo contra ti, que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de dónde has caído,
y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu
candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido. Pero tienes esto, que aborreces las
obras de los nicolaítas, las cuales yo también aborrezco. El que tiene oído, oiga lo que el
Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida,el cual
está en medio del paraíso de Dios.
Introducción
La iglesia de Éfeso tuvo un inicio extraordinario; su fundador era nada más y nada menos
que el apóstol Pablo, y sus pastores fueron apolos y Timoteo. La iglesia comenzó como
una isla de pureza en un mar de desdicha. Sus miembros habían tenido tanto éxito en
alcanzar y purificar partes de la ciudad que estuvieron algunos del sistema más complejo
de la religión que existía en aquel entonces. No es de sorprenderse que Jesús comenzara
elogiándolos:
Esta ciudad estaba techada de muchas cosas que se le haría complicado a los cristiano
calar el evangelio de Cristo y entre estas cosas que hacían a Éfeso grande estaban las
siguientes.
1. Era la capital de Asia menor.
2. Era un centro de comercio de tierra y mar y, junto a Alejandría y Antioquía en Siria.
3. Era una de las tres ciudades con mayor influencia en la parte oriental del imperio
Romano.
4. Estaba el templo de Diana (Artemisa), una de las siete maravillas del mundo.
“artemisa” Diosa pagana de la fertilidad, llamada también «Diana».
Se la representaba como una cazadora virgen y era adorada por muchos.
5. En esta ciudad se encontraba una importante industria de imágenes idolatras de la diosa
Diana (artemisa).
Nos preguntamos con el pasar del tiempo muchas cosas como:
¿Por qué no puedo hablar de Cristo?
¿Por qué me estoy enfriando?
¿Por qué ya no siento lo que sentí el principio?
¿Por qué me da pereza lo que tenga que ver con Dios o espiritualidad?
2. Nos hemos olvidado de donde Dios nos saco, porque estamos aquí o para que estemos
aquí y perdemos la comunión con Dios.
PERO TENGO CONTRA TI QUE HAS DEJADO TU PRIMER AMOR
I. EFESO, UNA IGLESIA ENAMORADA DEL SEÑOR JESÚS
A. Experimenta y conoce al Espíritu Santo, Hch. 19:6.
“Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban
en lenguas, y profetizaban”
Nota: El corazón de estos discípulos de Éfeso estaba muy dispuesto, Pablo acaba de
enseñarles de Jesús y viene sobre ellos el Espíritu Santo y hablan en lenguas y profetizan,
para ellos el Espíritu Santo no es un concepto, sino una realidad.
B. La iglesia de Éfeso ama la palabra de Dios, vive lo sobrenatural y prevalece sobre la
adversidad, Hch. 19:10-11,18-19.
“… todos los que habitaban en Asia, judíos y griegos, oyeron la palabra del Señor Jesús.
Y hacía Dios milagros extraordinarios por mano de Pablo… muchos de los que habían
practicado la magia trajeron los libros y los quemaron… y hecha la cuenta de su precio,
era cincuenta mil piezas de plata. Así crecía y prevalecía poderosamente la palabra del
Señor”.
Nota: La palabra Éfeso significa deseable, amado, y esto nos da una connotación del amor
de Dios por esa iglesia y del amor de la iglesia hacía Dios. Era una iglesia que amaba la
revelación de Dios a través de las Escrituras (la Carta a los Efesios es considerada una
“obra maestra del N.T.” o “el lugar santísimo” del N.T.). Esta iglesia experimentaba el
poder sobrenatural del Señor… y la brujería que dominaba la región fue derrotada; a pesar
de la multitud de adoradores de Diana de los efesios, ésta ciudad fue lugar de avivamiento
por la gloria de Dios allí, y de ella se escribe en Hechos, en Apocalipsis y la epístola de
los Efesios.
II. LA IGLESIA COMENZÓ A DESCUIDAR SU PRIMER AMOR (Apoc. 2:4)
A. La iglesia de Éfeso se había descuidado.
“Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor”, Apoc. 2:4.
Nota: Esta iglesia nace en el tercer viaje misionero del apóstol Pablo (Esto ocurre en el
año 53 d.C. aprox.), pastorea allí por tres años aprox. Y escribe la Carta a los Efesios en
el año 60 d.C. aprox. y Apocalipsis es escrito en el año 95 aprox. entonces poco a poco la
iglesia descuido “el primer amor”, o como dice Jesús en otra versión: “ya no me amas
como al principio”.
B. La Escritura nos enseña que entre Cristo y la Iglesia debe existir una relación de
esposos.
3. Nota: Ef. 5:25 “Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se
entregó a sí mismo por ella”, esto nos habla de enamoramiento, comunión, intimidad,
fidelidad, etc. Pero, generalmente con el tiempo esto se descuida y se deteriora…
C. Resultados de éste descuido (Apoc. 2:2-3):
“Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a los
malos, y has probado a los que se dicen ser apóstoles, y no lo son, y los has hallado
mentirosos; y has sufrido, y has tenido paciencia, y has trabajado arduamente por amor
de mi nombre, y no has desmayado”.
1. Obras en exceso (se quiere llenar el vacío espiritual con el quehacer ministerial o
ritualista).
2. Vida religiosa (hay oración pero no intimidad; no hay genuina adoración; la persona se
congrega por hábito no por anhelo de Dios, así que llega a la iglesia tarde, murmura de
los otros, critica el servicio, y sólo cuando tiene privilegios asiste a la iglesia).
3. Orgullo espiritual (no necesita “tanto de Dios”).
4. Discernimiento natural, no por el Espíritu (por ej.: Elí y Ana, cuando ella oraba en el
templo y el sacerdote pensó que estaba ebria).
5. Insensibilidad al Espíritu Santo (no hay preocupación por Su presencia, por su obra, ni
por su mover, no hay anhelo de conocerlo…).
6. No hay pasión misionera (una persona enamorada, sólo habla de su amor… una iglesia
enamorada de Jesús hablará de él, pero al perder ese amor ya no se evangeliza).
III. ES FUNDAMENTAL RESTAURAR EL PRIMER AMOR (Apoc. 2:5)
A. Empieza recordando.
“Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues
si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido.”
Nota: El término griego para “recuerda” es mnemoneúo y traduce además: ejercer
memoria, repasar, seguir pensando en (sí es la mente dónde primero debemos restaurar el
primer amor, puede ser que fue la primera parte dónde comenzó el enfriamiento).
Nota: Debemos recordar “de dónde hemos caído”, esto quiere decir que el primer amor
nos lleva a lugares espirituales, caminamos en las alturas de Dios, por eso David,
inspirado por el Espíritu cantó: “Quien hace mis pies como de ciervas, y me hace estar
firme sobre las alturas; quien adiestra mis manos para la batalla, de manera que se doble
el arco de bronce con mis brazos” (2 Sam. 22:34-35), entonces nos habla de habilidad,
lugares celestiales, fortaleza, victoria en la guerra (las fortalezas eran construidas en las
cimas de los montes, en las alturas). El primer amor nos eleva a regiones de privilegio y
comunión con Dios, y el Señor nos dice: “recuerda todo esto, porque has descendido, has
caído y no te has dado cuenta…”
4. B. Es necesarios arrepentirse y hacer las primeras obras
Nota: Arrepentirse significa en primer lugar: reconocer que hemos pecado, así que
descuidar nuestro primer amor es pecado. En segundo lugar, arrepentirse, y esto es
cambiar de mente, cambiar de actitud, cambiar de vida (la religión mata la vida espiritual,
por ej.: el fariseísmo en tiempos de Jesús…).
Nota: Y volver a “las primeras obras”, la palabra “primeras” viene de un término gr.
prótos, que además traduce: principal, el más distinguido, el más importante, prominente,
nos habla de lo principal, de lo más importante, de lo que da inicio al resto… La intimidad
con Dios es lo primero y principal (descuidar esto, es caer del primer amor). Recordemos
que Jesús dijo: “más buscad primeramente el reino de Dios y su justicia y lo demás vendrá
por añadidura” y también le dijo a Marta: “Marta, Marta, afanada y turbada estás con
muchas cosas. Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la
cual no le será quitada” (Lc. 10:41-42).
C. El candelabro representa a la iglesia, Apoc. 1:12-13, 20.
Nota: Cristo está y se mueve en medio de sus iglesias locales, pero él puede quitar un
candelabro de su lugar, y perder el privilegio de estar en la presencia de Cristo mismo. El
candelabro es retirado y entonces viene la oscuridad, el frio, el envejecimiento (polvo,
telarañas…), el olvido, y se seca su aceite dejando de dar luz, ya no brilla.
Nota: En tiempos del Apóstol Juan, Éfeso ciudad costera, puerto del Mar Mediterráneo,
tenía 225.000 habitantes, centro religioso y comercial. Pero hoy día, sólo hay ruinas y no
hay una iglesia cristiana en muchos kms a la redonda, y la región está bajo gobierno
musulmán…
D. Activa tu oído y aliméntate de Cristo, Apoc. 2:7.
“El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a
comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios”.
Nota: Ahora el mensaje es para todas las iglesias, Adán fue expulsado del Edén, del
paraíso, pero ahora el vencedor (el que derrote la religión, la rutina, el enfriamiento, la
autosuficiencia…) podrá comer del árbol de la vida… (El pan de Dios, la salud y vida de
Dios, se alimentará de la revelación de Cristo…).
Conclusión
Desde el comienzo Dios ha manifestado su deseo de compartir con el hombre, de que el
hombre reciba todos los beneficios de Su reino, desde el A.T. hasta hoy, nos muestra
cuánto desea habitar con y en el hombre (el Edén, el tabernáculo, se hizo hombre, envió
su Espíritu que mora en nosotros…), él quiere continuamente fortalecer y renovar esa
comunión…